Presión impositiva y costos laborales, el reclamo que aglutina a todos los sectores industriales
Otro de los paneles reunió a cuatro industrias distintas, pero que comparten desafíos, visiones y necesidades. La necesidad de reformas fiscales y laborales, procurar por una apertura con un "timing" sincronizado entre sector público y provado para evitar la pérdida de masa industrial y puestos de trabajo.

En un contexto de profundos cambios económicos y un persistente debate sobre el modelo productivo nacional, el panel "Qué país queremos: Capitulo Industria", reunión a José Luis Alonso, CEO de Mirgor; Matías Campodónico, Presidente de Dow América Latina; Santiago Farinati, Director General de Alsea en Sudamérica; y Claudio Rodríguez, Director de Administración y Finanzas de Sinteplast, quienes compartieron sus visiones sobre los pilares necesarios para una Argentina más competitiva y atractiva para la inversión. 

Uno de los puntos más álgidos del debate giró en torno a la presión fiscal y la falta de competitividad. Farinati, de Alsea, fue contundente al señalar la carga impositiva en su sector: "En gastronomía, de 100 pesos que hoy se pagan, 38 son impuestos, mientras que en Chile son 21 o 25". 

Rodríguez, de Sinteplast, compartió esta preocupación, destacando que Argentina ostenta la mayor carga tributaria de la región y lamentó que los costos laborales sean significativamente más altos que en países vecinos como Bolivia, Paraguay, Brasil y Uruguay. 

Campodónico, de Dow, agregó que la búsqueda de un "país normal" implica resolver temas básicos como la estabilidad macroeconómica, con una moneda creíble y con una previsibilidad a cinco 10 años.

Matías Campodónico, Presidente de Dow América Latina

Pero sostuvo también que el sector privado, además de exigirle al sector público, debe da ciertos debates. "Estos años de consumo subsidiado, permitieron que las empresas barrieran ineficiencias debajo de la alfombra, eso hoy se terminó y hay que trabajar en las ineficiencias".

La apertura de la economía, un tema central en la agenda actual, fue vista con una mezcla de optimismo y cautela. El ejecutivo de Mirgor manifestó: "Todo industrial argentino está deseoso de tener competencia, no le teme. Sin embargo, es importante que el gobierno trate de nivelar la cancha".

Para los voceros, el "timing" de esta apertura es el punto crítico. En este sentido, Campodónico alertó: "Hoy Argentina está cara en dólares para quien produce y barata en dólares para quien importa". 

Rodríguez también advirtió sobre los riesgos: "Si vamos a favorecer la importación y no nivelamos la cancha con impuestos semejantes, con leyes laborales o costos laborales, especialmente los costos no remunerativos, se van a perder muchos puestos de trabajo y eso le va a afectar al país".

Desde la perspectiva gastronómica, Santiago Farinati celebró la posibilidad de importar insumos que antes eran difíciles de conseguir, pero insistió: "Si se baja la presión fiscal se empieza a generar el círculo virtuoso, más flujo, permite abrir más tiendas y so genera más trabajo".

Santiago Farinati, Director General de Alsea en Sudamérica

El desafío del capital humano y la educación

El desarrollo del capital humano fue identificado como un pilar fundamental para el crecimiento futuro y cada uno compartió iniciativas que están llevando a cabo para abordar la brecha de talento

En el caso de Mirgor, a través de su fundación, implementa programas en escuelas primarias y secundarias para desarrollar capacidades en mecatrónica, en temas tecnológicos, buscando despertar el interés en los jóvenes desde temprana edad.

José Luis Alonso, CEO de Mirgor

Dow trabaja con la Universidad Nacional del Sur y la UTN en Bahía Blanca para crear los talentos que seguramente van a faltar en oficios, como técnicos, instrumentistas y soldadores, esenciales para el crecimiento del sector de Vaca Muerta

Por el lado de Sinteplast, su ejecutivo comentó que trabaja con colegios de la zona y la Unión Industrial de Ezeiza en un centro de capacitación, y enfatizó en la necesidad de capacitar a la gente para nuevas tecnologías y oficios: "La gente que antes movía bolsas, hoy maneja computadoras, y precisamos pintores de auto".

Finalmente, el vocero de Alsea desmitificó la idea de que la gastronomía es una industria de paso, señalando que el 70% de sus gerentes empezaron trabajando en sus locales y que el 40% hizo su carrera profesional con la empresa, con un promedio de 20 años.

Las reformas más urgentes

Al ser consultados sobre la reforma más urgente que el país necesita, los panelistas ofrecieron respuestas diversas, reflejando las particularidades de sus sectores, aunque todas consideradas sumamente necesarias.

Desde la mirada de José Luis Alonso, "para la industria es clave la reforma laboral". Matías Campodónico, por su parte, planteó que es la fiscal la prioritaria, "comenzando por la eliminación de los derechos de exportación y la supresión de impuestos distorsivos como ingresos brutos y la tasa de seguridad e higiene".

Claudio Rodríguez, Director de Administración y Finanzas de Sinteplast

Según Claudio Rodríguez, quien también prioriza a la fiscal, "hay que bajar la presión tributaria para poder competir contra el resto del mundo". Por último, Santiago Farinati apuntó a la "carga laboral no salarial", sugiriendo la urgencia de una reforma laboral.