Ecuador no es ajeno a la expansión de la multinacional en Latinoamérica. En un inicio, los productos se vendían a través de Comercial Panamericana. En 1955, la multinacional abrió su operación propia con un primer producto destinado a lactantes. Hoy, cuenta con ocho líneas de negocio y 900 artículos. En 2024, registró ingresos por US$ 620 millones, cuenta con 1.800 colaboradores directos y genera más de 30.000 empleos indirectos.
A nivel global, opera en 185 países y el año pasado alcanzó ventas por US$ 100.000 millones.
Josué De La Maza, presidente ejecutivo de Nestlé Ecuador, habló con Forbes sobre la hoja de ruta de los US$ 63 millones que se invertirán hasta 2028.
¿Cuál es la apuesta detrás de los US$ 63 millones?
Vamos a empezar diciendo que llevamos 70 años en el país y seguimos aquí porque creemos en Ecuador. Estamos dispuestos a continuar invirtiendo en distintos proyectos. Hemos realizado adquisiciones importantes, como negocios de chocolates, galletas y otros. Recientemente, en 2023, compramos Nature's Heart. La inversión es constante, porque para quedarnos debemos seguir desarrollando nuestro negocio. En los próximos años destinaremos US$ 63 millones, enfocados principalmente a fortalecer las dos plantas de Guayaquil.
¿En qué se concentrará este monto?
El 70 % se orientará a dos grandes proyectos industriales. Tenemos tres fábricas: una en Tabacundo (Pichincha) y dos en Guayaquil. El primero será en la planta Ceibos, que produce caldos de pollo en polvo, en cubitos y salsas frías como mayonesas, kétchup, mostaza y sazonadores líquidos. Estas categorías han tenido un crecimiento importante, por lo que necesitamos ampliar nuestra capacidad productiva. Debimos apoyarnos en terceros para complementar la demanda.
Para esta expansión, serán los US$ 30 millones que permitirán aumentar en un 30 % la producción, sobre todo de salsas frías. El segundo proyecto es en la planta de galletas y chocolates, también el Guayaquil, donde implementaremos un sistema de automatización en la etapa final de línea. Sustituiremos procesos manuales de empaque por tecnología automatizada para ganar eficiencia, velocidad y optimización de maquinaria. Para esto destinaremos US$ 25 millones. En la planta de Tabacundo el enfoque está en seguridad industrial, tratamiento de aguas y mejora continua en calidad.
¿Qué otras iniciativas están en marcha?
Tenemos varias. En tecnología proyectamos unos US$ 8 millones para energía renovable con más paneles solares, conectividad IT y digitalización. Nuestros operarios ahora trabajan con tablets para registrar procesos e información en tiempo real.
¿Qué representa la ampliación de la planta Ceibos?
Tenemos espacio disponible para incorporar nuevas líneas de producción y maquinaria. Estamos haciendo un reacomodo total de las instalaciones para crecer de forma sostenible y poder responder a la demanda.
¿Cuánto se destina a innovación?
La innovación es constante y está dentro de los US$ 63 millones. Adicionalmente, cada año con US$ 25 millones anuales financiamos la digitalización, desarrollo y nuevos lanzamientos. Toda propuesta parte de pruebas y si el resultado lo justifica, invertimos en maquinaria y escalamos la producción.
¿Cuántas líneas maneja actualmente Nestlé Ecuador?
Contamos con cerca de 900 SKU (artículos), distribuidos en ocho líneas de negocio: confites (galletas y chocolates), nutrición infantil, culinarios (salsas frías y caldos), cafés, chocolates en polvo, alimentos para mascotas y cereales. Además, tenemos Nestlé Professional (máquinas y accesorios) y recientemente Nespresso, una línea de café de lujo.
¿Cómo fue la acogida de Nespresso?
Excelente. La lanzamos hace dos meses con una inversión de US$ 2,5 millones. Ya tenemos dos boutiques y dos islas y la aceptación ha superado nuestras expectativas.
Nestlé Ecuador factura unos USD 620 millones anuales, ¿qué peso tiene dentro del grupo global?
Además del negocio local, Ecuador tiene una participación destacada en exportaciones de cacao. Cerca de 38.000 toneladas anuales, que representan unos US$ 295 millones. Exportamos la fruta en distintas formas, grano, manteca, licor y bloque. Nuestros principales mercados son Europa, Estados Unidos, Suiza y Australia. Aproximadamente el 10 % del cacao que utiliza el grupo a nivel global proviene de Ecuador. También exportamos productos terminados a Estados Unidos y España, donde los migrantes ecuatorianos buscan marcas tradicionales como las galletas Amor o Tangos.
Nestlé también lidera un programa de cacao sostenible, ¿cómo funciona?
El programa tiene un gran impacto social y económico. Trabajamos con 7.500 pequeños productores, cada uno con fincas de 4 a 5 hectáreas. Cada año incorporamos entre 500 y 600 nuevos agricultores. Nuestras fincas son un 60 % más productivas que el promedio nacional, gracias al desarrollo tecnológico, la capacitación y el acompañamiento técnico. Contamos con 65 agrónomos que asesoran a los productores y una escuela de agro ingeniería donde graduamos unos 400 técnicos al año. Ellos aprenden sobre injertos, control de plagas, fertilización, manejo de aguas, lombricultura, apicultura y administración agrícola. El programa se desarrolla en 11 provincias, principalmente en la Costa. Anualmente, invertimos alrededor de US$ 7 millones en este plan, independiente de los US$ 63 millones que comentamos.
¿Qué oportunidades ve para seguir apostando por Ecuador?
Ecuador es un país de ingreso medio, con consumidores que buscan innovación. Eso nos da margen para introducir nuevos productos y diversificarnos. Al ecuatoriano le gusta probar cosas diferentes. Un buen ejemplo es La Sazón, que nació de la iniciativa de los propios operarios de la fábrica, que experimentaron con mezclas hasta crear uno de los productos más vendidos.
¿Qué condiciones consideran para invertir?
Estoy muy positivo. Ecuador necesita algunos cambios estructurales, advierto que hay voluntad para hacerlo. Es un país abierto a transformarse y queremos ser parte activa de ese proceso. (I)