El 37% de las pequeñas y medianas empresas industriales argentinas redujo su presencia en el mercado local frente a la competencia extranjera durante el tercer trimestre de 2025, según reveló el último informe de la Fundación Observatorio Pyme. Se trata del valor más alto desde que comenzó el relevamiento en 2007, lo que el informe destaca como "un máximo histórico para la serie, lo cual se observa con especial atención dado el bajo dinamismo de las ventas".
El estudio, que relevó 425 empresas industriales entre el 29 de septiembre y el 23 de octubre, muestra que esta pérdida de participación superó el 33% registrado en el trimestre anterior y se produce en un contexto marcado por la caída de la demanda y presiones sobre la rentabilidad.
China, el principal origen de la amenaza
Entre las empresas que identifican amenaza importadora, China se consolidó como el principal origen, concentrando el 73,3% de las respuestas, según la Fundación Observatorio Pyme. Muy lejos quedaron Brasil (16,6%), el Sudeste Asiático (2,1%) y Paraguay (1,7%).
Los sectores más golpeados fueron textiles, prendas de vestir, productos de cuero y calzado, donde el 68,4% de las empresas reportó amenaza importadora. Le siguieron metalmecánica (59,8%) y sustancias y productos químicos, caucho y plástico (56,2%).

En el sector de alimentos y bebidas, en cambio, solo el 9,1% de las empresas manifestó esta problemática, mientras que en muebles, madera, corcho y paja la cifra fue del 20,7%.
La presión importadora no solo afecta la competencia en productos finales. El relevamiento documenta un fenómeno de sustitución en dos frentes: el 21,9% de las empresas reemplazó producción propia de bienes terminados por importados, mientras que el 22,1% sustituyó insumos, materias primas y bienes intermedios de origen local por importados.
Estos porcentajes representan un salto significativo respecto al cuarto trimestre de 2024, cuando las cifras eran del 12,2% y 15,2% respectivamente.
Los sectores con mayor sustitución de bienes intermedios fueron metalmecánica (33,9%), textiles (30,7%) y otras actividades industriales (21,2%). En cuanto a bienes terminados, metalmecánica lideró con 23,2%, seguida por textiles (20,9%) y muebles (8,6%).
Costos, precios y tipo de cambio
Detrás de esta pérdida de competitividad se encuentra una brecha creciente entre costos y capacidad de fijar precios. El 81% de las empresas experimentó aumentos en sus costos de producción durante el tercer trimestre, pero solo el 47% pudo trasladar estos incrementos a sus precios de venta, según el informe de la Fundación Observatorio Pyme.
Si bien esta proporción mejoró respecto al 35% del trimestre anterior, sigue siendo insuficiente para preservar márgenes de rentabilidad. De hecho, solo el 8% de las empresas reportó aumentos en su rentabilidad durante el período.

El tipo de cambio oficial jugó un rol central en esta dinámica. Según datos del Banco Central citados en el informe, el tipo de cambio se aceleró en el trimestre alcanzando un 41% de variación interanual, superando ampliamente el aumento del Índice de Precios Internos al por Mayor (24%) y de los costos pyme (29%).
"El tipo de cambio oficial se aceleró en el trimestre (+41% i.a.), por encima del IPIM (+24%) y los costos pyme (+29%), con un traslado a precios aún acotado", sintetiza el documento.
Por otra parte, la preocupación por el aumento en los costos de las materias primas creció del 41% al 51% de las empresas entre el tercer trimestre de 2024 y el mismo período de 2025. Aunque el informe señala que este valor es "históricamente bajo" comparado con promedios superiores al 80% en años anteriores, marca un cambio de tendencia que el documento destaca como relevante.

Por otro lado, la preocupación por el aumento en los costos salariales disminuyó del 53% al 46% de las empresas, manteniéndose también en niveles bajos respecto a la serie histórica.
Expectativas en el sector energético
Un panorama parcialmente diferente surge del relevamiento realizado por el Grupo de Articulación de Proveedores Petroleros (GAPP) entre sus empresas socias proveedoras del sector energético durante octubre-diciembre de 2025.
Aunque el 51% de estas empresas registró niveles medios de capacidad ociosa (entre 25% y 50%) y más del 65% opera con al menos un cuarto de su capacidad productiva sin utilizar, el 60% se mostró "entre expectante y altamente optimista respecto de los proyectos y coyuntura de la actividad por venir".
Estas expectativas están vinculadas a "proyectos del RIGI, Vaca Muerta Sur, GNL 1-2-3", según el documento de GAPP, aunque en el corto plazo prevalecen "demoras en la actualización de contratos y negociaciones desventajosas para la actualización de montos".
Contexto de contracción
Los datos de amenaza importadora se enmarcan en un contexto más amplio de contracción del sector. La producción pyme cayó 7,5% interanual en el tercer trimestre, acumulando una baja del 4,1% en el año. El empleo se redujo 4,2% interanual, y el 73% de las empresas manifestó preocupación por la debilidad de la demanda.
"Los datos presentados en este informe fueron relevados en un contexto particularmente incidido por el proceso electoral que finalizó el 26 de octubre", aclara Fundación Observatorio Pyme en su informe.