Todo comenzó en 2014, con una parrilla portátil y dos jóvenes recién egresados del colegio secundario que querían emprender. Hoy, poco más de una década más tarde, Federico Schaer y Tomás Beutin lideran una pyme en crecimiento: lo que empezó con la venta de parrillas desmontables evolucionó hacia una empresa especializada en utensilios de cocina de hierro como sartenes, que facturó $ 3.400 millones en 2024 y proyecta alcanzar los $ 9.000 millones este año, un crecimiento del 165%.
La historia de Kankay (que comenzó llamándose Kankay Amara, que en latín significa "amor por el fuego") nació del amor por la cocina. "La idea surge inspirada por la pasión gastronómica de nuestros padres, que son amigos, a quienes les encantaba cocinar en los viajes que hacíamos en grupo", cuenta Schaer. "Entonces, pensamos cómo podíamos armar una parrilla desmontable para llevar a donde fuera que quisiéramos cocinar. Pensamos las medidas, los materiales y la hicimos realidad. Así, con nuestra primera parrilla, empezamos a llevarla a nuestros viajes y a cocinar en distintas locaciones, por ejemplo en Pinamar o en Bariloche".
La primera parrilla fue un éxito "Nos subíamos a la camioneta con la parrilla y la llevábamos a cada viaje. La repercusión fue increíble: la gente se acercaba a preguntar dónde la habíamos conseguido y se quedaba fascinada con el producto", recuerda Schaer. Esa reacción los convenció de que tenían algo valioso entre las manos.
Por ese entonces, Schaer y Beutin trabajaban en una pyme y tenían muchas ganas de emprender. "Decidimos hacer nuestras primeras 10 parrillas dado el éxito que habíamos tenido con la primera", explica Beutin. La inversión inicial fue modesta: las 10 primeras parrillas las pagaron con sus ahorros, que, estiman, habrán sido aproximadamente US$ 3.000 entre los dos. "Teníamos 23 y 21 años. Era divertido, no había nada que nos apresure. Íbamos a ver fábricas. Tocábamos puertas de bazares. Todavía no estaba el boom de Instagram y publicábamos mucho en Facebook. Por ese entonces, si había alguien que nos preguntaba precio después lo llamábamos hasta diez veces para que finalmente comprara, jaja. Siempre fuimos persistentes", recuerdan.
La decisión de apostar todo al proyecto llegó rápido. "Al poco tiempo, Fede renunció y luego seguí yo y ya son 10 años emprendiendo con Kankay", dice Beutin, quien hoy tiene 32 años y es licenciado en marketing de la UCES, al igual que su socio Schaer, de 30 años.
En mayo de 2024 registraron un crecimiento del 1.000% respecto al mismo período del año anterior, mientras que entre mayo de 2024 y mayo de 2025 el aumento fue del 216%. Actualmente venden más de 5.000 sartenes por mes a nuevos clientes y llevan colocadas más de 60.000 unidades desde 2024.
Una característica distintiva de la empresa es que nunca recurrió al financiamiento externo. "Todo el crecimiento de la marca fue posible gracias a la reinversión constante de lo recaudado, año tras año", explica Beutin. "Eso nos permitió mantener el control total sobre la marca, sus valores y decisiones estratégicas, sin depender de capital externo ni comprometer nuestra identidad."
El punto de inflexión llegó con las redes sociales y la exportación. En 2020, año de confinamiento debido a la pandemia de Covid-19, sus videos comenzaron a viralizarse y los pedidos comenzaron a llegar de diferentes partes del mundo. Hoy, Kankay exporta a ocho países: Estados Unidos, Australia, Alemania, Países Bajos, Reino Unido, Francia, Uruguay y España. "Llegamos a mandar casi 100 parrillas por mes a Estados Unidos", cuenta Schaer, y recuerda: "Un día nos escribió una mujer desde Estados Unidos interesada en nuestras parrillas y nosotros no sabíamos ni cómo mandársela. 'Voy y la busco en el día', nos dijo. Y a los pocos días tomó un vuelo desde Estados Unidos y vino a San Isidro solo por el día, retiró las parrillas, le invitamos un choripán y se fue directo a Ezeiza".
Todos los productos de Kankay, comparten los socios, son 100% industria nacional, fabricados con hierro, sin químicos ni recubrimientos tóxicos. "Frente a otros competidores, como marcas que utilizan teflón o aluminio, nuestro diferencial está en la calidad de los materiales que utilizamos, hierro noble, sin químicos ni recubrimientos tóxicos, lo que garantiza un producto duradero y saludable", explican.
La producción se realiza en asociación con una metalúrgica de Pilar, con una capacidad mensual de 25.000 sartenes y 100 parrillas. Su producto más vendido es la sartén de la línea Carbonada, aunque también destaca la línea Curada, "única en el mercado argentino", dicen los socios, porque llega lista para usar sin necesidad de curado inicial.
Expansión territorial y nuevos productos
Kankay emplea directa e indirectamente a 60 personas y proyecta llegar a 75 en 2026. En febrero de este año, tras una inversión de $ 40 millones, abrió su primer local físico en San Isidro. "La ubicación no fue pensada al azar. Está a solo 30 metros de la casa de Fede, donde empezamos con todo esto. Además del espacio comercial, allí también funcionan nuestras oficinas, donde hoy trabajan más de 30 personas", cuenta Beutin.
De cara al año que viene, planean abrir dos nuevos locales en Recoleta y Nordelta, trabajar con mayor foco en el interior del país y desarrollar una red de distribución más sólida, además de expandirse a Chile, Colombia y Brasil. "En cuanto al plano internacional, ya tenemos una fuerte presencia de nuestros productos en Estados Unidos y soñamos con un local, como también en Chile y en Uruguay", adelantan.
Su canal principal sigue siendo la tienda online, que representa el 80% de la facturación, complementado con Mercado Libre, ventas mayoristas y el local de San Isidro.
Los fundadores reconocen los desafíos del contexto actual. "Durante este año notamos una desaceleración en el consumo, especialmente en los últimos meses", admiten. Sin embargo, ven oportunidades: "El consumidor argentino se está volviendo más selectivo: busca productos de calidad, duraderos y que justifiquen su inversión. En nuestro caso, eso juega a favor porque vendemos un producto que no solo tiene una vida útil muy larga, sino que también responde a nuevas preocupaciones vinculadas con la salud".
*Fotos: Alejandro Baccarat