AMT Sud: consiguieron inversores extranjeros, evitaron la quiebra y hoy exportan carne a China y al mundo
American Meat Company, se instaló hace cuatro años comprando el know how del holding nacional q, decidieron hacer foco en el mercado internacional con exportaciones a China.

Cuando en 2017, Ricardo Bruzzese aceptó ser el director ejecutivo de la firma AMT Sud, la misma que asumió la responsabilidad económica del conocido frigorífico Penta, probablemente no se hubiese proyectado estar ante un desafío empresarial por delante como el que le tocó vivir en los últimos meses. La compañía atravesó, en este último tiempo y producto de la administración anterior, una reestructuración empresarial para poder salir a flote en el negocio nacional e internacional de las carnes.

La firma estadounidense American Meat Company, que se instaló en el país hace más de cuatro años bajo el nombre de AMT Sud, lo hizo con la idea de encabezar un proyecto de exportaciones de carne vacuna, y querían que Bruzzese sí o sí formara parte del directorio ejecutivo. Hoy, el holding empresarial que en su momento lo encabezaba Penta, está compuesto por los frigoríficos Ganadera de las Pampas, Ganadera Varela y Ganadera Arenales. 

Bruzzese tiene 49 años y 22 de experiencia en el rubro. "Empecé vendiendo medias reses en una carnicería y terminé comprando una en la provincia y otra en Mataderos, donde están todas las carnicerías. Sin embargo, siempre fui matarife que compra, mata y vende la hacienda", señala el empresario que empezó en el rubro con una cadena de negocios de venta minorista. Bruzzese fue presidente de la Cámara de Matarifes y Abastecedores (CAMyA), actualmente también ocupa la presidencia de la Cámara Argentina de la Industria Frigorífica (Cadif). 

Hace cuatro años cuando la empresa compró el know how del holding nacional, decidieron hacer foco en el mercado internacional con exportaciones a China. Sin embargo, para conseguirlo necesitaban de una persona que conociera el rubro. "Cuando llegué no se exportaba, estaban enfocados en el consumo local y entonces decidimos abrir las exportaciones", asevera. Fue apenas en 2018 cuando el frigorífico pudo abrirse camino a otros destinos y el país asiático fue el primero en habilitar el ingreso de sus productos. 


La planta frigorífica que envía al gigante asiático cerca de 650 toneladas de carne vacuna al mes, lo hace, actualmente, a través del grupo Ganadera de las Pampas. "Estamos esperando que nos habiliten de Estados Unidos y Europa para poder extender nuestros horizontes y se hizo una transformación de las tres plantas para poder hacerlo", agrega. 

Según mencionan desde la firma ganadera, antes de que el grupo empresarial pasara por una debacle económica por una deuda de US$ 6 millones que arrastraba desde antes de 2014 con proveedores y el personal, en concepto de sueldos y salarios, el frigorífico logró salir a flote y pudo saldar las deudas tanto con los proveedores como con el personal.

En su oportunidad, el frigorífico envió cargamentos de carne vacuna a Estados Unidos y ahora buscan recuperar ese mercado y expandirse a Europa. "A USA, anteriormente, se hicieron exportaciones, ya se estaba trabajando con ellos, se tiene que recuperar el mercado. Además, también se hizo la inspección sobre Ganadera de las Pampas donde se pidió cumplir con los requisitos que exige la Cuota Hilton", remarcan desde la firma.

La Cuota Hilton es un cupo de exportación de carne vacuna sin hueso de alta calidad y valor que la Unión Europea (UE) otorga a países productores y exportadores de carnes. Los frigoríficos de esos países habilitados para enviar estos productos a ese continente deben cumplir con una serie de requisitos que exige la UE para poder posicionar la carne en ese destino. Según el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca, la Argentina es el país que mayor porcentaje de cuota posee, con 28.000 toneladas anuales, esto representa casi la mitad de la Cuota Hilton que otorga Europa.

"La pandemia hizo que los principales compradores de carne argentina en Europa retraigan su actividad por el cierre de restaurantes. Además de esto, China fue el principal jugador durante este período, manejando los precios con un tipo de cambio que no nos acompañó, lo que hizo que nuestro negocio se achique en cuanto a ganancias", observa Bruzzese.

"Soy optimista para el futuro dado que nuestras carnes son muy valoradas por Europa, y cuando reinicie sus actividades, nos permitirá aumentar nuestras ventas al exterior, mejorando los precios por el tipo de cortes y calidad que demanda este mercado", relata el empresario. La idea de que Bruzzese acompañara la empresa desde la parte administrativa, estaba basada en una estrategia comercial y de mercado para permitir el crecimiento de la firma en la industria nacional e internacional.

Según relata, antes de aceptar el reto de encabezar el holding en el país, la firma estadounidense le pidió que formara parte del equipo internacional, lo que iba a implicar un eventual traslado a tierras norteamericanas. "Yo les dije que no y entonces se decidió que acá se pusiera AMT Sud. No fue que hubo una compra del holding, sino que se puso una franquicia y ellos ayudaron a pagar las deudas del frigorífico para quedarse con él, y pasar a ser tres frigoríficos a la vez. Con esta decisión pasamos a hacer la mayor faena del mercado local", detalla. 

"Para poder cancelar la deuda del frigorífico, la compañía norteamericana compró bonos en el Banco Central y capitalizó la empresa", precisa. Una vez que los inversores decidieron que el management local estuviera dirigido por el empresario, le plantearon la posibilidad de que, a medida que la empresa fuera creciendo, Bruzzese podía quedarse como parte de la sociedad del conglomerado nacional. De esta forma, el frigorífico de Quilmes busca resurgir para liderar, ahora, no solo el mercado nacional de las carnes, sino también el internacional, donde las posibilidades son altas, gracias a los acuerdos de cupos de exportaciones que posee la Argentina con países que presentan un alto consumo de carne vacuna. 

La Argentina envía al mundo alrededor de 900.000 toneladas de carne vacuna todos los años, según datos del Instituto de Promoción de Carne Vacuna Argentina (IPCVA). En rigor, esa industria aporta entre US$ 3.000 millones y US$ 3.500 millones en divisas por año, lo que hace que sea una de las principales actividades de la cadena agroexportadora. 

En promedio, China se lleva el 75% del volumen total de la carne que envía la Argentina al exterior todos los años. 

Para 2020, según la proyección del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca se prevé que se envíen cerca de 1.000.000 de toneladas de carne vacuna que serán clave para alcanzar los objetivos que pretende el Gobierno nacional para reactivar la economía. 

La planta frigorífica envía China cerca de 650 toneladas de carne vacuna al mes,


Solo en los primeros ocho meses de este año, se exportaron 381.479 toneladas, un 16,8% más que igual período del año anterior. China, en tanto, resultó ser el principal destino, con aproximadamente 278.000 toneladas en ese período. Mientras que las divisas ingresadas por la venta a ese país, representaron el 61,5% del total. Esto lo posiciona entre los favoritos dentro del sector exportador.

En agosto pasado, representantes del Consejo Agroindustrial Argentino (CAA) le entregaron al presidente Alberto Fernádez un plan que permitirá reactivar las exportaciones del sector agropecuario y pasar de los US$ 65.000 millones que hoy recibe a US$ 100.000 millones anuales en divisas. 

No obstante, en lo que va del año, China redujo el precio de la tonelada de las carnes frías congeladas, de superar los US$ 5.000 ha llegado a rozar los US$ 4.000. Según el coordinador de la Mesa de las Carnes, Dardo Chiesa, se está corrigiendo un poco. No obstante, "se queda muy retrasado con respecto de la inflación. La carne viene muy atrasada con respecto a las actualizaciones de los otros alimentos", apunta.  

En rigor, según menciona Mario Ravettino, presidente del Consorcio ABC, "los volúmenes de consumo que registra China se mantienen, no obstante, ha habido una baja en los precios del 30% con respecto del año pasado".

Para impulsar las exportaciones de la industria cárnica, el Ministerio de Agricultura analizaba junto al Consejo Agroindustrial una baja de los derechos de exportación de esos productos que hoy pagan el 9% por cada dólar y, eventualmente, pasarían a tener una alícuota del 5%. Pero hasta el momento, el sector no ha sido notificado sobre eventuales cambios.