Las acciones de Lithium Americas subieron más de 97% este miércoles, después de que la administración de Donald Trump anunciara su interés en obtener una participación dentro de la minera canadiense. El avance respondió a una serie de negociaciones que la empresa mantiene con el Departamento de Energía de EE.UU., en el marco de un préstamo millonario vinculado al desarrollo de Thacker Pass, el mayor yacimiento de litio del país.
El precio de las acciones trepó hasta rondar los US$ 6 a media mañana, lo que duplicó su capitalización de mercado: pasó de US$ 674 millones a cerca de US$ 1.320 millones en cuestión de horas.
Un funcionario de la Casa Blanca confirmó a Forbes que el Gobierno pidió una participación accionaria en la compañía como parte de la renegociación de un préstamo de US$ 2.200 millones, originalmente acordado durante la gestión de Joe Biden. La agencia Reuters adelantó que esa participación podría ubicarse en torno al 10%.
Lithium Americas, que trabaja junto a General Motors en el desarrollo del proyecto en Nevada, comunicó que continúa en tratativas con el Departamento de Energía y GM para alcanzar "una resolución mutuamente aceptable". Desde el organismo oficial explicaron que se harán "modificaciones menores al préstamo para proteger a los contribuyentes".
El fuerte respaldo desde Washington disparó la demanda por las acciones y puso a la minera en el centro de atención de Wall Street.
40.000. Esa es la cantidad de toneladas métricas de litio de calidad para baterías que se espera producir cada año en las instalaciones de Thacker Pass, según Lithium Americas y el Departamento de Energía. Esa cifra alcanzaría para abastecer unos 800.000 autos eléctricos.
Antecedentes
La alianza entre Lithium Americas y General Motors para producir carbonato de litio en Thacker Pass recibió elogios tanto del gobierno de Joe Biden como del de Donald Trump, por su potencial para reducir la dependencia de insumos provenientes de China.
El proyecto obtuvo luz verde durante el primer mandato de Trump, mientras que el préstamo del Departamento de Energía se cerró el año pasado, bajo la administración de Biden. En ese momento, funcionarios del organismo señalaron que la iniciativa generaría más de 2.000 empleos y ayudaría a reducir el uso de combustibles fósiles. Según estimaciones oficiales, las baterías fabricadas con este litio permitirían evitar el consumo de unos 317 millones de galones de nafta por año.
GM invirtió cerca de US$ 625 millones por una participación del 38% y se comprometió a comprar el resto de la mina cuando comience a operar por completo.
A qué prestar atención
El secretario del Interior, Doug Burgum, dijo en abril que la administración de Donald Trump buscaría invertir en compañías dedicadas a la extracción y procesamiento de minerales clave, con el objetivo de reducir la dependencia de importaciones. En julio, el Departamento de Defensa compró un 15% de participación en MP Materials, minera especializada en tierras raras.
Desde ese acuerdo, las acciones de la empresa prácticamente se duplicaron. Otras industrias también se vieron beneficiadas por esta estrategia. En agosto, Trump anunció que Estados Unidos adquiriría un 10% de participación en la golpeada Intel, en una de las intervenciones gubernamentales más importantes en una empresa estadounidense en más de diez años.
Nota publicada por Forbes US
