Entre premios a destinos, aerolíneas y cadenas hoteleras de la región, uno de los reconocimientos de este año quedó en manos argentinas: Meliá Recoleta Plaza fue elegido Mejor Hotel Boutique de Lujo de Argentina en los World Travel Awards 2025 el programa global que desde hace más de tres décadas distingue la excelencia en la industria turística.
Fue la primera vez que el hotel se postuló y la primera vez que ganó. "Es un orgullo enorme para todo el equipo", afirma Damián País, Gerente General del hotel, quien destaca el valor simbólico del premio por su consistencia a lo largo del tiempo. "Es una distinción que ayuda a mostrar el trabajo diario que hacemos en un hotel de escala boutique, donde la experiencia se construye en cada detalle y en la cercanía con el huésped".
"En un hotel boutique, el lujo no pasa por el tamaño, sino por la atención. Nosotros conocemos a nuestros huéspedes por su nombre y tratamos de anticiparnos a lo que necesitan".
Situado en Recoleta, el hotel cuenta con 59 habitaciones y un nivel de ocupación estable, impulsado en gran parte por viajeros internacionales. Según País, los huéspedes suelen elegirlo por su ubicación estratégica, la atención personalizada y el perfil íntimo del edificio. La estadía promedio es de 2,5 noches, un dato que consideran un diferencial dentro del segmento boutique de Buenos Aires.
Conocido como "los Oscar del turismo", el premio llega para un hotel chico -con ADN de boutique- que apuesta desde hace años a un servicio de cinco estrellas en un formato íntimo. Para la cadena Meliá, que este año también celebró reconocimientos para otras propiedades de la región como Casa Lucía, Meliá Iguazú y Meliá São Paulo, el logro subraya un posicionamiento: hoteles con identidad local, estándares globales y experiencias cada vez más personalizadas.

El impacto de los "Oscar del turismo"
La categoría en la que compitió Meliá Recoleta Plaza tiene a la reputación digital como uno de los principales criterios: comentarios, reseñas, presencia en redes y consistencia del servicio. Además de una etapa de nominación con jurado, la votación final queda abierta a toda la industria.
A nivel operativo, el premio no cambió las cifras de manera inmediata. Coincidió con la temporada alta de Buenos Aires -octubre, noviembre, diciembre- y el hotel alcanzó picos de 95% de ocupación, habituales para esa época. Pero sí tuvo un impacto interno: "Para el equipo es una motivación enorme. Es un reconocimiento al trabajo de tanta gente que está visible y también al equipo detrás, que no se ve", señala País.
Calaf: El restaurante que marca una nueva etapa
Pero el premio no es el único hito del año. En abril de 2025 el hotel inauguró Calaf, su nuevo restaurante, el mismo espacio en el que -desayuno mediante- transcurre buena parte de la experiencia diaria de los huéspedes.
Hasta hace pocos meses, ese sector era un salón clásico: oscuro, alfombrado, pensado para eventos. El proyecto de renovación lo transformó por completo. Se construyó una cúpula de vidrio que baña el espacio de luz natural, un diferencial que hoy es parte del concepto. Con el piano de cola como punto focal y una estética cuidada, Calaf busca instalarse no solo como el restaurante del hotel, sino como una propuesta gastronómica abierta también al público local.

La cocina sigue esa línea: platos clásicos, técnicos y reconocibles, con un guiño a la experiencia en sala. El lomo Wellington es uno de los favoritos de los huéspedes, igual que la ensalada Caesar preparada en la mesa, a la vista del comensal, una práctica poco habitual en restaurantes de hotel y que apunta a ese lujo artesanal que el hotel quiere destacar. "Queremos que el huésped sienta que cada detalle está pensado para él: desde cómo se presenta un plato hasta la interacción con el equipo. Ese es el diferencial que estamos construyendo", señala País.
Aunque el hotel ya contaba con un fuerte enclave cultural gracias al Jazz Voyeur Club, un espacio de música en vivo que funciona en el subsuelo desde 2005, Calaf suma una capa más: buena mesa, arquitectura contemporánea y una identidad que dialoga con el resto del hotel: incluso, durante el desayuno, un pianista en vivo acompaña el servicio y refuerza ese espíritu musical que forma parte del ADN del hotel.

El lujo según Buenos Aires
El año fue especialmente desafiante para la hotelería argentina. La ocupación repuntó recién desde septiembre y la demanda sigue muy influenciada por el tipo de cambio. El promedio anual del Recoleta Plaza se ubica entre 75% y 80%. En el mix de huéspedes predominan los brasileños, seguido por estadounidenses que llegan con los cruceros entre enero y marzo. También hay españoles, italianos, franceses, ingleses y viajeros de distintos países latinoamericanos.
La pregunta es inevitable: ¿qué busca hoy el viajero de lujo que llega a Buenos Aires? "Trato personalizado", responde País sin rodeos. "Yo paso buena parte del día en el lobby o en la puerta, recibiendo huéspedes. Les doy mi teléfono; si necesitan algo, me escriben a cualquier hora. Creo que valoran esa atención directa y la rapidez para resolver. Eso no se ve en todos lados".

La respuesta tiene un peso adicional cuando uno considera su trayectoria: País trabaja en el hotel desde su apertura, en 2005. "Empecé como camarero, después en el restaurante, en el área de alimentos y bebidas, y desde hace casi diez años soy gerente general", resume, una historia que se repita en gran parte del personal estable del hotel. Esa continuidad explica parte del vínculo con los huéspedes: "Muchos nos conocen por nuestro nombre. Y nosotros sabemos qué café toman, qué vista prefieren. No son un número de habitación".
Con el premio como impulso, Meliá Hotel Plaza Recoleta prepara una estrategia más ambiciosa. A nivel interno, la meta es fortalecer estándares de servicio, seguir apostando a la sustentabilidad integral y ampliar la oferta gastronómica. En el plano externo, se enfocan en posicionarse como un referente boutique en Sudamérica: "Los propietarios dicen hace 20 años que la meta es ser el mejor hotel boutique de Sudamérica. Este año ganamos Argentina; ahora vamos por más".





