“El ecosistema cripto es un cambio de paradigma en el uso de las finanzas, tanto en instituciones como los bancos, como en la moneda. En una economía más global, por qué confiar en una persona que defina cuánto es la emisión monetaria y no dejar que eso lo haga una moneda encriptada ciento por ciento segura y transparente”, planteó en la tercera edición del Forbes Revolución Fintech Summit Andrés Ondarra, Country Manager at Bitso, en una postura disruptiva para el esquema financiero tradicional pero que es el core de las monedas digitales.
Es que la depreciación del dólar a nivel global está generando grandes pérdidas de valor en el mundo por el aumento de la base monetaria en Estados Unidos que se duplicó como consecuencia de la pandemia. “Como ahorrista el dólar me defraudó”, agregó Ondarra al explicar qué está ocurriendo con el fenómeno de las criptos a la luz de una falta de confianza en monedas cuya cantidad esta definida y no se puede cambiar, y que “está generando una migración a nivel mundial al bitcoin de monedas fiduciarias”.
“Es una paradoja que en la Argentina el dólar tenga tanto interés y demanda”, enfatizó en ese sentido el directivo de Bitso, la primera fintech del mundo cripto en convertirse en unicornio y que con más de 3 millones de usuarios activos es la plataforma de criptomonedas de Latinoamérica con el mayor volumen de operaciones contra monedas locales y la primera en ser regulada en la región. Desde esa experiencia, es que destaca la necesidad de proveer “una experiencia totalmente innovadora y superadora, dotando a los usuarios de herramientas que les permitan acceder a más oportunidades de inversión y desarrollar sus vidas de una manera más sencilla y eficiente, colaborando a fomentar la inclusión financiera”.
Así, para Ondarra, las Fintech y el espacio cripto vienen a traer una solución tecnológica superior para cubrir la necesidad financiera que tiene la región en la que los bancos y compañías financieras tradicionales no logran llegar a mas del 50% de la población que tiene acceso a una cuenta bancaria, y mucho menos posibilidades de invertir.
“La educación financiera va acompañada de la adopción de la tecnología y la nuevas herramientas del nuevo ecosistema” insiste el especialista al asegurar que hay disponibles sistemas en los cuales es muy fácil transaccionar a través de criptos y que en muy poco tiempo van a permitir elegir operar con dinero fiduciario o dinero cripto para las transacciones habituales de compras, a través de un QR como el que ya existe.
La velocidad de ese desarrollo en la Argentina puede ser de impacto muy positivo donde “el usuario promedio es más conservador porque viene de una cultura muy impactada como ahorristas, y esta tecnología permite recuperar la cultura del ahorro y la confianza de invertir en un activo digital que no va a ser devaluado, que va a poder usar libremente. Bitso logró ese puente que la gente en la Argentina y la región acceda a estas opciones”.
Tanto en esta plataforma que opera con 15 criptomonedas como en el resto del ecosistema, el desafío es “lograr que la experiencia transaccional sea segura, genere confianza, y que como empresa regulada cada vez que se incorpora un activo nuevo se pueda entender qué beneficios va a traer a la comunidad”. Así por tratarse de un instrumento nuevo de ahorro e inversión, Ondarra destaca que es necesario en cualquier cartera personal o institucional “extender el beneficio de la diversificación, invertir de a poco, no exponerse a riesgos que no se conocen” y enmarcar el apetito al riesgo en el contexto macro que ofrece la economía y la moneda.
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