El sorpresivo resultado de las elecciones legislativas trajo un gran alivio al mundo energético y minero, donde sostienen que se abre un panorama mucho más optimista que ayudará a la llegada de nuevas inversiones.
"Debería ayudar a decisiones de inversión significativas en cobre, litio, oro, plata y uranio. Siempre hay cosas por hacer, pero es un hecho que sin duda ayuda a tomar esas decisiones", indica a Forbes el CEO de una minera.
A diferencia de la industria petrolera que ya alcanzó un peso considerable en la economía argentina cada vez más producción, la minería corre mucho más de atrás y es por eso que electoral es mucho más influyente. En particular, para el cobre donde todavía no empezó a construirse ningún proyecto y cada señal es calve para despejar incertidumbre.
"Los de afuera tenían mucho miedo de que se repitiera lo de las elecciones bonaerenses de septiembre, estaban muy preocupados de que pueda volver el kirchnerismo en 2027. Esto ayuda a generar confianza en el rumbo económico, brinda gobernabilidad y oportunidad de reformas profundas en el sentido que interesa a inversores extranjeros. Siempre que mantengan el rumbo que expresó Milei el domingo con un discurso de diálogo y trabajo en conjunto con gobernadores y quienes no son libertarios puros", agregaron desde otras firmas mineras.
El entusiasmo de las energéticas
Los mercados fueron un fiel reflejo de este clima de euforia, con saltos de hasta el 40% en las acciones de distintas compañías del sector. Las que menos subieron fueron las petroleras debido a que resistieron mejor el desplome de los últimos meses.
"Las tres compañías petroleras de Vaca Muerta que operan en Wall Street (YPF, Vista y Pampa) proyectan duplicar sus ingresos para los próximos 5 años. Es un sector que se defendió mucho este año con bajas del 20% al 30%, cuando las reguladas cayeron hasta un 60% en dólares", indicó Matías Cattaruzzi, analista de Adcap.

Esto se debe a que las distribuidoras y transportistas corrían un riesgo mucho mayor frente a un eventual gobierno peronista en 2027 por la posibilidad de que se vuelvan a congelar sus tarifas. Un panorama que se modifica totalmente con este resultado y que incluso promete un incremento de ingresos para las eléctricas.
"Hoy vemos que, garantizando una agenda reformista, una de las patas en la arista energética es la desregulación del mercado eléctrico. Eso podría mejorar ampliamente los ingresos de las compañías entre un 20% o 30%", agregaron desde Adcap.
Qué piden las empresas
En línea con la agenda del Poder Ejecutivo, desde las firmas del sector esperan con ansias el debate por las "reformas estructurales" en el Congreso para poder reducir costos impositivos y laborales.
"Es una oportunidad gigantesca para bajar el costo argentino. Nosotros nos sentamos en una silla donde competimos por las inversiones que hace la compañía en todo el mundo. Todos peleamos por esa misma plata y ahora si tenemos mejores costos yo puedo pelear de otra manera y conseguir más", celebraron desde una petrolera extranjera presente en el país.
Ahí destacan que habría que eliminar desde el impuesto al cheque, aranceles a insumos claves de Vaca Muerta que solamente se consiguen afuera y tienen muy bajo impacto fiscal, y las siempre tan criticadas retenciones.
"Lo que verdaderamente ayuda es la sostenibilidad de los precios a mediano plazo. La política influye en la economía claramente. Ahora hay que mantener los cambios macros y que no todo esté sujeto al tipo de cambio. Tiene que generar consenso para hacer los cambios impositivos, laborales y mantener el tema de los dividendos. Ganar es condición necesaria, pero no suficiente para que podamos proyectar", coincidieron desde otra big major.