Planificadores financieros revelan: ¿qué relación hay entre dinero y felicidad?
Los planificadores financieros atienden a personas de todos los niveles de riqueza y pueden decirle de primera mano que no existe una correlación entre más riqueza y más felicidad.

Los Beatles dijeron una vez que el dinero no puede comprar el amor, pero el dinero tampoco puede comprar la felicidad. Los planificadores financieros atienden a personas de todos los niveles de riqueza y pueden decirte de primera mano que no existe una correlación entre más riqueza y más felicidad.

Por supuesto, existe la salvedad de que tener dinero y activos puede facilitarle la vida, tanto ahora como en la jubilación. Contar con fondos suficientes puede asegurarte una cosa menos de la que preocuparse: un techo, un vehículo fiable, etcétera.

Además, el dinero puede comprar experiencias y cosas que no sólo ahorran tiempo, sino que mejoran tu calidad de vida, desde algo tan sencillo como subcontratar una tarea que no le gusta (cortar el pasto) o simplemente permitirte aprovechar mejor ese tiempo para dedicarlo a hacer algo que te guste.

Planificación financiera y felicidad

 

Acá es donde todo vuelve a la planificación financiera. Aunque el dinero no puede comprarte la felicidad, lo que sí puede hacer (a través de la planificación financiera) es ayudarte a priorizar tu vida determinando tus objetivos y sueños, y luego poniendo tu dinero a trabajar para vos con el fin de ayudarte a alcanzar esos objetivos y sueños, en busca de esa felicidad.

La planificación financiera se debe hacer con la intención de llegar al núcleo de lo que te hace feliz, y luego construir alrededor de eso, para poder encontrar el equilibrio en la vida y continuamente ir tras lo que te hace feliz. Al elaborar estrategias para tus finanzas y hacer que tu dinero trabaje para vos, podes, en última instancia, trabajar por tus propios sueños cada día. Y aunque ese dinero no te compre la felicidad, puede ayudarte a acercarte a tus objetivos.

Si no estás donde querés estar

Si no estás donde querés estar, ya sea en la vida o financieramente, no te desanimes. Tal vez estés más endeudado de lo que te gustaría, o no estés ganando lo que crees que deberías para el momento de tu vida en el que te encontras. Aunque unas finanzas que no están donde te gustaría pueden añadir estrés a tu vida y afectar a tu felicidad, hay formas de contrarrestar tu situación financiera

Aunque el dinero no puede comprarte la felicidad, lo que sí puede hacer (a través de la planificación financiera) es ayudarte a priorizar tu vida determinando tus objetivos y sueños.

Si no te sentís cómodo elaborando un plan financiero por tu cuenta, trabajar en tus finanzas con un planificador financiero puede ayudarle a sentirse más en control y cómodo con su situación financiera y más optimista sobre su futuro financiero.

Así que sí, aunque el dinero no puede comprarte la felicidad (ni ahora ni en tu jubilación), lo que sí puede hacer es ayudarte a liberar tu tiempo y quizás hacerte la vida más fácil, si tenés objetivos y un plan.

 

*Con información de Forbes US