Florencia Radici Forbes Staff
El panorama financiero argentino es un reflejo de los tiempos que corren: diverso, digital y, sobre todo, altamente multibancarizado. Así lo revela el reciente estudio "Retos para los players financieros en Argentina 2025" presentado por VML, que arroja luz sobre cómo los argentinos se relacionan con bancos, fintechs y neobancos.
El informe, parte de una serie de investigaciones regionales, destaca que los usuarios bancarizados en Argentina poseen, en promedio, cuentas en 2,7 entidades financieras. Una cifra que se eleva a 3,5 para aquellos que también operan con fintechs o neobancos. Esta fragmentación del ecosistema es liderada por Mercado Pago, plataforma de la que el 81% de los usuarios bancarizados declara ser cliente.
A pesar de la masiva adopción de plataformas como Mercado Pago o Naranja X (32% de clientes bancarizados), la banca tradicional sigue acaparando la "principalidad" en la cartera de los clientes multibanca. "Si bien en Argentina la población se muestra muy receptiva a fintechs y neobancos, la principalidad, mayoritariamente, es de banca tradicional", señala Julio Pedrazuela, Director Regional de Investigación en VML. Pedrazuela atribuye esto al "abanico muy extenso de productos susceptibles de acompañarte en todos los momentos de tu ciclo vital" que ofrece la banca tradicional.
Entre los principales hallazgos del estudio, se destaca que las tarjetas de débito y crédito, y las cuentas de ahorro, son los productos básicos más contratados. Particularmente, los clientes con dos o más cuentas bancarias muestran una mayor contratación de tarjetas de crédito (72%) en comparación con quienes operan con un único banco (51%). Además, casi la mitad de la población posee al menos una tarjeta departamental, impulsada principalmente por los descuentos (54%) y la facilidad de acceso en tienda (28%).
El estudio también profundiza en el segmento de la población no bancarizada, que representa aproximadamente el 28% de los internautas argentinos. Un 60% de estas personas nunca accedió a una cuenta bancaria, esgrimiendo como principales motivos la falta de necesidad (30%) y la desconfianza (25%) hacia las entidades financieras, sumado a la percepción de costos elevados (20%).
La experiencia digital se consolida como el principal canal de interacción con los bancos (84%), y los resultados del análisis confirman que la facilidad de uso, la confianza y una buena experiencia digital son atributos clave para construir preferencia en este mercado fragmentado. "La banca compite hoy en un entorno donde las personas ya no eligen una única entidad, sino que distribuyen sus necesidades financieras entre varias. Entender este nuevo patrón es clave para definir estrategias de posicionamiento y diferenciación real", afirma Pedrazuela.
Por su parte, Ronny Weter, Director General de Estrategia de VML Argentina, subraya un desafío latente para el sector: "En este contexto, la banca tradicional enfrenta el desafío de reconectar con las personas desde propuestas más ágiles, empáticas y centradas en las verdaderas necesidades del usuario". Weter también apunta a una "hibridez en la cabeza del argentino, de la seguridad, la confianza, la sucursal y el trato humano, y del otro lado la agilidad, la gestión, tenerlo en la app y no pagar costos extra por los servicios".
Entre las preguntas realizadas a los internautas, una fue cuáles son los atributos más deseables asociados a la imagen de un banco. La primera respuesta fue coincidente entre los cinco países donde se realizó el relevamiento: gestión desde la app. Pero, a la hora del segundo atributo, en la Argentina aparece la confianza (que, en otros países de la región, pondera más abajo). "Hay variables, como la confianza y el trato humano, o la presencia de sucursales físicas, que ponderan más que en otros países", confirma Weter.
Este informe, basado en una encuesta cuantitativa online realizada a más de 1.500 personas en Argentina entre el 4 y el 11 de diciembre de 2024, perfila a un consumidor financiero digital por hábito, multibancarizado por necesidad y cada vez más exigente en términos de experiencia. El estudio también tiene sus versiones en Chile, Colombia, Perú y México. "Esta diversificación por parte de la población no es exclusiva de la Argentina, sino algo muy de estos tiempos, del smart shopper. La gente compara hasta la saciedad, sea un reloj, una linterna o un banco, no solo a nivel de diseño, sino a nivel de producto", concluye Pedrazuela.