Japón enfrentará un arancel del 15% en lugar del 25% previsto inicialmente por Estados Unidos, según anunció el presidente Donald Trump a través de una publicación en Truth Social. El acuerdo también incluye una promesa de inversión de US$ 550.000 millones por parte del país asiático dentro del territorio estadounidense. Trump calificó este entendimiento como el "mayor ACUERDO COMERCIAL de la historia con Japón".
El mandatario destacó que el pacto permitirá abrir el comercio en sectores como el de los automó, los camiones, el arroz y otros productos agrícolas. En paralelo, el primer ministro japonés Shigeru Ishiba celebró el acuerdo al que consideró el inicio de una "nueva era dorada" entre ambas naciones. El funcionario indicó en X (ex Twitter) que el objetivo fue "priorizar la inversión sobre los aranceles". Según detalló, la tasa del 15% se aplicará tanto a las tarifas de autos como a las recíprocas.
Fuerte reacción del Nikkei y suba en los fabricantes de autos
El impacto inmediato del anuncio se vio reflejado en el Nikkei 225, que cerró la jornada con una suba del 3,51%, alcanzando los 41.171,32 puntos. Las acciones japonesas de fabricantes de autos lideraron las ganancias: Toyota subió 14,34%, cotizando en US$ 19,43 (2.854 yenes), mientras que Honda escaló 11,15%, hasta US$ 11,23 (1.650 yenes). Nissan, a pesar de sus dificultades actuales, aumentó 8,28% hasta US$ 2,24 (329 yenes), y Subaru encabezó el alza con un avance del 16,61% hasta los US$ 20 (2.938 yenes).
En Estados Unidos, los futuros de acciones también reaccionaron en positivo. El Dow Futures subió 0,5% y alcanzó los 44.938 puntos. El S&P 500 Futures avanzó 0,38%, hasta los 6.371,25 puntos, y el Nasdaq Futures, más centrado en tecnológicas, creció 0,18% hasta los 23.267,75 puntos.
Con este acuerdo, el gobierno de Trump busca fortalecer los lazos comerciales con un socio estratégico del Pacífico y contener la tensión comercial que había escalado en los últimos meses. La promesa de inversiones por parte de Japón representa un gesto clave en medio de un escenario internacional de alta volatilidad económica.
Un acuerdo que generó polémica
El acuerdo de aranceles reducidos recibió críticas de un grupo que representa a los fabricantes de autos de Estados Unidos, entre ellos GM, Ford y Stellantis, la empresa matriz de Chrysler. Matt Blunt, director del American Automotive Policy Council, le dijo a Reuters: "Cualquier acuerdo que cobre un arancel más bajo para las importaciones japonesas con prácticamente ningún contenido estadounidense que el arancel impuesto a los vehículos fabricados en América del Norte con alto contenido estadounidense es un mal negocio para la industria y los trabajadores automotrices estadounidenses".
Ese mismo grupo, que representa a los Tres Grandes de Detroit, ya había cuestionado el acuerdo comercial entre Estados Unidos y el Reino Unido. En ese momento expresó: "Estamos decepcionados de que la administración haya priorizado al Reino Unido por encima de nuestros socios norteamericanos. Con este acuerdo, ahora será más barato importar un vehículo del Reino Unido con muy poco contenido estadounidense que un vehículo que cumpla con el T-MEC de México o Canadá que tenga la mitad de piezas estadounidenses".
Con el acuerdo comercial con Japón ya cerrado, Trump dijo que pronto podría anunciarse otro entendimiento con un socio comercial importante. El martes, le comentó a la prensa: "Mañana llegará Europa y pasado mañana llegarán otros países".
La baja de aranceles para Japón, especialmente para sus fabricantes de autos, encendió expectativas sobre un posible acuerdo favorable con la Unión Europea. El índice paneuropeo STOXX 50 subió 1,35%. Las acciones de las automotrices europeas también repuntaron con fuerza: las del Grupo Volkswagen treparon 6,31%, las de Mercedes-Benz avanzaron 5,69% y las de BMW crecieron 5%.
Antecedentes
Trump amenazó este mes con aplicar un arancel del 25% a Japón como parte de una serie de cartas enviadas a distintos países para informarles sobre sus respectivas tasas. También advirtió que si Japón decidía subir sus propios aranceles, entonces Estados Unidos sumaría ese porcentaje al 25% ya anunciado. "Si por alguna razón deciden aumentar sus aranceles, entonces, cualquiera que sea la cifra que elijan para aumentarlos, se añadirá al 25% que cobramos", dijo el presidente.
Trump defendió en varias ocasiones su política arancelaria desde que reveló las tasas en abril. Esa postura generó enojo entre socios comerciales históricos y preocupación entre especialistas que advierten que los gravámenes podrían encarecer los productos para los consumidores.
Un estudio reciente de la Universidad de Yale, publicado antes de conocerse el acuerdo con Japón, estimó que la política arancelaria de Trump podría costarle a los hogares estadounidenses US$ 2.400 extra este año si los nuevos aranceles al cobre y a productos importados se aplican y se mantienen.
Nota publicada en Forbes US.