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Lidia Monzón
Liderazgo

Lidia Monzón: "Iberoamérica está viviendo una escalada de su tejido empresarial más innovador"

Laura Mafud

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Presidenta de la Asociación Española de Mujeres Empresarias en Canarias y Secretaria General de la Federación Iberoamericana de Mujeres Empresarias, Lidia Monzón visitó la Argentina y compartió con Forbes su visión sobre las oportunidades y los desafíos que aún enfrentan las mujeres a la hora de hacer negocios en la región.

30 Octubre de 2022 09.59

La experta en liderazgo de la mujer, Lidia Monzón, luce una interesante carta de presentación: nacida en Canarias, fue considerada de las 25 mujeres más influyentes de España. Mentora para el desarrollo de competencias en comunicación, liderazgo y valores, preside la Asociación Española de Mujeres Empresarias en Canarias y es Secretaria General de la Federación Iberoamericana de Mujeres Empresarias. Con un Master en Inteligencia Emocional para los Negocios y diplomada universitaria por la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria en Graduado Social y experta en Alta Dirección, publicó el libro Éxito ¿Divina Cuestión? y ha dado conferencias en diversas ciudades. 

Recientemente, visitó la Argentina para participar del Congreso Iberoamericano de Mujeres Empresarias CIME 2022 (encuentro anual que se realiza desde 1990 impulsado por la Federación Iberoamericana de Mujeres Empresarias) y compartió con Forbes su visión acerca de la situación de las mujeres emprendedoras en la región y los desafíos pendientes para achicar la brecha de género.


- ¿Cómo resultó su experiencia en el Congreso Iberoamericano de Mujeres Empresarias CIME?


El congreso ha sido muy satisfactorio. Las diferentes mesas y ponencias han puesto de manifiesto el deseo de las profesionales y empresarias de España y Latinoamérica por ser referentes en su comunidad. 

Durante el evento pudimos hacer todo aquello de lo que teníamos ganas: socializar, compartir, hacer networking…, con grandes conclusiones sobre a dónde caminamos como mujeres empresarias directivas, hacia dónde caminamos en ese mundo de la interculturalidad, donde todo es absolutamente global con la claridad de que cada vez estamos más unidos.


- ¿Cómo encontró a la Argentina?


Para las que amamos el continente americano, Argentina siempre ha sido la perla del continente, tierra de infinitos tesoros naturales y excelentes personas, pero en los últimos años la aguda crisis que se está viviendo en Argentina, donde la caída del PIB es constante, las exportaciones e inversiones españolas han seguido el mismo camino, reduciéndose año tras año, hasta alcanzar cifras que no se conocían desde 1996.


- ¿Qué análisis hace sobre la situación de las mujeres empresarias en la Argentina?


Según uno de los últimos informes del Gobierno de Argentina, de su ministerio de economía, las mujeres argentinas son las que sufren los mayores niveles de desempleo y precarización laboral. Ganan hasta un 35,6% menos que los hombres, y son las mujeres quienes se enfrentan cada día con las tasas más altas de desocupación de toda la economía con un 23%.

Esta situación debe cambiar si los argentinos quieren cambiar su futuro. En España, aquellas empresas que están lideradas por mujeres, que apuestan por el talento y el liderazgo femenino tienen una relación directa con el aumento de su rentabilidad y la creación de valor, y creo que en Argentina nos encontramos con la misma fuerza y liderazgo femenino.

Lidia Monzón
Lidia Monzón

La resiliencia de las argentinas, la constancia y la correcta toma de decisiones, que favorecen el poder mantener la fortaleza emocional en todo momento, son el reflejo de un estilo de liderazgo empático, comunicativo y colaborativo. Así son las empresas lideradas por mujeres, empresas humanas que están cambiando el mundo y que cambiarán Argentina.


- ¿Y de la mujer empresaria en Iberoamérica como marco general?


Durante estos días he tenido muchas conversaciones profundas con empresarias y directivas de Uruguay, Chile, Paraguay o Ecuador. Hoy en Iberoamérica hay más de 1.000 startups, que se han fundado en menos de tres años y que ya están valoradas en más de un millón de euros y, han surgido cerca de medio centenar de unicornios, compañías valoradas en mil millones de euros. Iberoamérica está viviendo en los últimos cinco años una auténtica escalada de su tejido empresarial más innovador, que está impactando directamente en la mejora de lo social, lo ambiental o en la transformación digital. Empresas de alto impacto que son tractor de desarrollo económico de toda la región.

En este punto no se pueden olvidar las empresas de la importancia de incorporar el talento femenino en cada área de la empresa. Las mujeres representan poco más de la mitad de la población mundial pero su contribución a la actividad económica, al crecimiento y al bienestar está muy por debajo de su potencial, con serias consecuencias macroeconómicas.

A pesar de los significativos progresos logrados en las últimas décadas, en todo el mundo los mercados de trabajo siguen estando divididos por géneros y parece haberse estancado el avance hacia la igualdad de género. Hay amplias evidencias de que, cuando las mujeres pueden desarrollar plenamente su potencial en el mercado de trabajo, los beneficios macroeconómicos son significativos, y se ha estimado que el PIB podría crecer más de un 27%, si la equiparación fuera total.


- ¿Cuál es la incidencia de las mujeres en la economía del mundo y, en especial, en Argentina, Uruguay, Ecuador y España?


Investigaciones recientes del Banco Mundial y de las Naciones Unidas demuestran que las mujeres son los verdaderos motores de la economía mundial, producen el 66% del trabajo mundial, dominan el mercado global al controlar más del 70% de los gastos diarios en productos de consumo, y ya son dueñas de cerca del 40% de las empresas creadas en los últimos 10 años.

Según los últimos estudios del Global Entrepreneurship Monitor, más de 130 millones de mujeres lideran empresas consolidadas. En España hay 7 mujeres emprendedoras por cada 10 hombres, cuando la media europea es de 6 mujeres cada 10. Sin embargo, esto no es así en todos los lugares del mundo. Por ejemplo, en Argentina solo el 30% de los emprendedores son mujeres, y queda mucho trabajo por hacer.

Según los datos oficiales en Uruguay la brecha de participación laboral se ha reducido en los últimos años, pero aún solo tiene un empleo remunerado el 47% de las mujeres, frente a un 62% de los hombres. Uruguay se sitúa en el puesto 72 del ranking de brecha de género, aquel que analiza la división de los recursos y las oportunidades entre hombres y mujeres, su participación en la economía y el mundo laboral cualificado, en política, acceso a la educación y esperanza de vida, y lo compara en 155 países.

En Ecuador y según los datos de Naciones Unidas, al ritmo actual de cambios para alcanzar la igualdad de oportunidades, se necesitarán más de 200 años para cerrar la brecha económica de género. En este sentido hay dos caminos, esperar a que pasen estos doscientos años o que la mujer iberoamericana y también la española cambie su forma de pensar y de actuar.

Nos hemos dedicado tradicionalmente a sectores como el de los servicios o el de la moda, pero hoy el emprendimiento digital es el principal motor de creación de valor en la economía en las últimas décadas, y es responsable de entre el 40% y el 70% del crecimiento económico de un país. Tomar nuestras riendas y entender donde debemos poner el foco, es nuestro trabajo para los próximos cinco años.


- ¿Cuáles son los principales retos que afrontan?


Creo que los retos son muy similares para las mujeres de ambos lados del Atlántico. Desde el miedo al fracaso a la hora de iniciar un emprendimiento, la carga de tareas no remuneradas, una mayor dificultad a la hora de conseguir financiación, una menor red de contactos, y la falta de casos de éxito femeninos, son solo algunos de los retos que tenemos por delante.


- ¿Hay suficiente acceso al financiamiento?


No. América Latina está en plena transformación y las mujeres no pueden quedarse al margen. Sin embargo, sin financiación sus oportunidades y su participación en el tejido empresarial será siempre insuficiente.

Lidia Monzón
Lidia Monzón

Se estima que las startups latinoamericanas lideradas por mujeres reciben menos del 5% de los fondos destinados en la región, aunque América Latina cuenta con la mayor representación femenina en la industria a nivel mundial, con un 24% en etapas iniciales, son muchas las mujeres que si quieren emprender han de hacerlo con sus ahorros, más del 80%.

Si una mujer logra levantar 500.000 euros para una startup innovadora, si fuera hombre se estima que habría podido levantar cerca de 10 millones. Son datos muy preocupantes, cuando sabemos que las empresas fundadas y dirigidas por mujeres tienen un nivel de superviviencia mayor que las creadas por los hombres. Parece que los fondos y los inversores miran más los pantalones que los informes financieros.


- ¿Puede cambiar el rumbo de la economía la participación de las mujeres en las economías de los países?


Sin duda. Diversos estudios sostienen que, desde el punto de vista macroeconómico, una mayor participación de la mujer en la actividad puede impulsar el ritmo de incremento del PIB. Su participación fomenta que se aumente la actividad económica y la productividad.

Los mismos estudios indican que una vez conseguida la igualdad de oportunidades, el PIB crecería un 20% de media. Hoy no me imagino ninguna otra medida que pueda suponer un impulso tan radical para las economías mundiales.


- ¿Los emprendimientos y pymes dirigidos por mujeres argentinas despiertan interés por parte de inversión española? Si es así ¿en qué sentido?


España ha invertido tradicionalmente en Argentina, con cantidades superiores a los 500 millones de euros, pero desde 2020 se están reduciendo de forma significativa, hasta alcanzar poco más de 100 millones de euros.

Los inversores españoles están hoy centrados en empresas y startups de telecomunicaciones, algunos servicios financieros, metalurgia, industria automovilística y algo en el sector energético, pero la devaluación del peso, y un panorama político que preocupa y mucho a las empresas españolas, puede provocar que acabemos este año con una inversión aún inferior a la de años anteriores, quien sabe si cercano a los 20 millones de euros.


- ¿Qué oportunidades de negocio hay hoy en España para empresas argentinas que busquen exportar o abrir operaciones?
 

Sin duda Canarias es la mejor entrada para las empresas argentinas que quieran saltar a Europa. Debido a su posición geográfica, cuenta con una serie de ventajas fiscales que pretenden compensar la situación de desventaja que sufre respecto al resto de regiones europeas por ser una región ultraperiférica.

Lidia Monzón
Lidia Monzón

El Archipiélago canario está definido como zona de baja tributación, las empresas de la ZEC cuentan con un tipo impositivo reducido del 4%, frente al régimen general del 25 % en el Impuesto de Sociedades, además de otras deducciones en sectores clave, lo que favorece los primeros años de vida de las empresas.

Solo durante los primeros meses de 2022, se han implantado en Canarias más de 44 proyectos que han creado cerca de 900 puestos de trabajo, y más de 400 millones de euros de capital invertido. Sectores como el tecnológico, el audiovisual, el biotecnológico, las energías renovables y economía azul o el logístico, están en plena expansión.


-¿Qué análisis hace acerca del ecosistema emprendedor tanto en Iberoamérica y del rol que tienen las mujeres emprendedoras?


Aunque falta mucho camino por recorrer, las mujeres están cada vez más presentes en diversos sectores empresariales, abriendo barreras en industria, energía, tecnología, sectores donde cada vez hay más mujeres.

Nos sigue faltando mostrar ejemplos clave, referentes femeninos que impulsen a las mujeres a emprender, y nos permita derribar las barreras que nos autoimponemos, confiar en nuestras capacidades y dar ese paso hacia nuestro liderazgo.


-¿Qué tipo de políticas, tanto públicas como privadas, se requerirían para impulsar la participación de las mujeres en el ecosistema emprendedor?


Son muchas las medidas que necesitamos para impulsar la participación de las mujeres en el ecosistema emprendedor, desde un programa de fomento de talento de las mujeres, atracción de inversión público - privada para las empresas creadas por mujeres, impulso a la innovación abierta, actualización del régimen especial de trabajadores autónomos, mujer, impacto social y medioambiental como criterio de valoración de inversiones públicas en sartups, fomento del emprendimiento femenino desde el colegio, seguimiento de la brecha de género en el emprendimiento innovador a través del INE para realizar ajustes periódicos, o fomento de vocaciones STEAM entre las niñas, entre otras muchas medidas.

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