Trump lo indultó: ahora vendió su negocio cibernético por US$ 200 millones
Chris Wade, fundador de Corellium, decidió vender su startup a Cellebrite, la empresa de análisis forense de teléfonos celulares preferida por las fuerzas de seguridad.

Thomas Brewster Columnista de Forbes

Muchos investigadores en ciberseguridad usan una herramienta desarrollada por Corellium, con sede en Florida, para buscar vulnerabilidades en iPhones de Apple o en dispositivos Android. En vez de correr el riesgo de arruinar un equipo físico durante un hackeo y tener que reemplazarlo, pueden crear una réplica virtual del celular con la plataforma de Corellium.

Ahora Cellebrite, uno de los mayores proveedores de tecnología forense para celulares, compró Corellium por US$ 200 millones. Se trata de una adquisición importante que le da a las agencias de seguridad nuevas herramientas para sacar información de dispositivos electrónicos incautados.

El acuerdo es un gran logro para el fundador y director de tecnología, Chris Wade, quien en los últimos cinco años cerró un juicio por derechos de autor iniciado por Apple y recibió el perdón presidencial de Donald Trump. El indulto tuvo que ver con su participación en el suministro de servidores proxy a dos spammers condenados por delitos informáticos en los 2000. Wade zafó de la cárcel después de colaborar de manera encubierta con el Departamento de Justicia.

"El hecho de que el gobierno de Estados Unidos, el FBI y el Departamento de Justicia recurrieran a él para ayudar a proteger a Estados Unidos es un testimonio bastante contundente"

Tom Hogan, director ejecutivo de Cellebrite.

Wade asumirá un nuevo rol como director de tecnología en Cellebrite, que cotiza en el Nasdaq y tiene una capitalización bursátil de US$ 4.000 millones. En 2024, la empresa facturó más de US$ 400 millones. El acuerdo por Corellium se cerró por US$ 200 millones: US$ 150 millones en efectivo, US$ 20 millones en acciones restringidas y otros US$ 30 millones en efectivo, que dependerán de objetivos de rendimiento todavía no detallados para los próximos dos años.

"Fuimos clientes de Corellium durante muchos años", aseguró Tom Hogan, director ejecutivo de Cellebrite. Cuando supo que Wade buscaba un comprador a comienzos de este año, Cellebrite "aprovechó la oportunidad de inmediato y se propuso ser su hogar ideal", agregó.

Wade le dijo a Forbes que se sentía entusiasmado por trabajar en una empresa cuya tecnología se aplica en 1,5 millones de investigaciones policiales al año. "Es una estadística fenomenal", afirmó. "Imaginen el impacto real que esto tendrá. Era algo en lo que quería participar", añadió.

Cellebrite y Corellium encajan bien. Cellebrite ofrece una serie de herramientas que permiten acceder a datos en teléfonos y computadoras, incluso si están bloqueados. Según registros públicos, su mayor contrato con un organismo federal fue con el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), por US$ 9,6 millones en agosto del año pasado.

Sin embargo, con dispositivos como el iPhone que suman cada vez más medidas de seguridad, Cellebrite y empresas como Grayshift, con sede en Atlanta, necesitan encontrar fallas en el sistema operativo que les permitan superar esas barreras y acceder a la información.

El software de Corellium facilita ese trabajo. Permite ejecutar cualquier marca o modelo de celular desde una app en computadora y probar un hack puntual. Para las fuerzas de seguridad, es una alternativa más barata y rápida para detectar exploits que pueden servir como prueba en una investigación. También lo usan investigadores de ciberseguridad, tanto defensivos como ofensivos, que buscan vulnerabilidades en software.

El software de Cellebrite permite ejecutar cualquier marca o modelo de celular desde una app en computadora y probar un hack puntual.

Aunque Corellium se vende de forma directa a agencias policiales, seguirá disponible para clientes privados como el banco Santander y el contratista de defensa L3Harris.

La empresa fusionada planea lanzar un nuevo producto en versión beta: Mirror. Esta herramienta le permitirá a la policía generar una copia virtual de un dispositivo incautado, con todos los datos que contiene. Wade cree que servirá para que los fiscales puedan mostrarle al jurado exactamente qué había en el celular de un acusado, con pruebas más claras que una captura de pantalla de una herramienta forense técnica.

Los dispositivos virtuales de Corellium suman otra ventaja. A veces, las herramientas forenses como las de Cellebrite no funcionan con ciertas apps, lo que impide recuperar información. Mirror permitirá que la policía acceda a esas apps, según Wade, y así tendrá una visión más completa del contenido del celular.

Incluso antes del acuerdo, Cellebrite y Corellium ya trabajaban juntos en un servicio con inteligencia artificial para detectar software espía desarrollado por gobiernos en teléfonos celulares. La IA analiza una copia del sistema operativo y detecta "desviaciones o cualquier ejecución de código externo en el dispositivo", explicó Wade.

"Esto es algo inédito", dijo. "Facilitará enormemente la detección de este tipo de ataques de malware patrocinados por estados", compartió Wade.

Aunque la relación de Wade con Trump y el Departamento de Justicia podría generar ruido, el CEO de Cellebrite, Tom Hogan, dijo que no le preocupa la imagen que transmite. "El hecho de que el gobierno de Estados Unidos, el FBI y el Departamento de Justicia recurrieran a él para ayudar a proteger a Estados Unidos es un testimonio bastante contundente", sostuvo.

Con información de Forbes US.