La apertura de importaciones que impulsa el gobierno nacional empieza a mostrar resultados concretos en el sector textil. La última novedad es el regreso al mercado argentino de Hunter, la marca británica de botas de lluvia fundada en Inglaterra por Henry Lee Norris en 1856, tras un acuerdo comercial con la firma centenaria Perramus, según confirmó Diego Meischenguiser, presidente de la empresa familiar que emplea a 180 personas.
La alianza convierte a Perramus,especializada en outerwear, en el distribuidor oficial de Hunter en Argentina, en un contexto donde la mayor facilidad para importar productos está permitiendo el retorno de marcas internacionales que habían abandonado el mercado local. Además, la empresa argentina tendrá la facultad de fabricar localmente indumentaria y accesorios con la marca Hunter, y evalúa abrir un local exclusivo de la firma británica en el tercer año del contrato. "Ya tengo 35 años en la empresa, con lo cual ya transito la industria textil en este país. Igual ya tenemos estos recorridos de economía cerrada, economía abierta", explicó Meischenguiser, tercera generación al frente de Perramus, durante una conferencia de prensa frente a un grupo reducido de periodistas.
El ejecutivo destacó que la apertura económica representa tanto oportunidades como desafíos para las empresas locales. "Se empieza a tener una oferta de marcas y el producto enorme. Ya se hace más difícil competir. Ya empiezan a ganar los que hacen las cosas bien", señaló Meischenguiser.

Para Perramus, la compañía creada por Marcos Meischenguiser en 1922, la apertura facilita la incorporación de nuevas líneas de producto y mejora el abastecimiento de materias primas. "Obviamente, con Perramus en economía abierta nos ayuda a incorporar nuevas líneas de producto, a mejorar el abastecimiento de materias primas y el abastecimiento de los productos", explicó Meischenguiser.
Hunter, especializada en botas de lluvia fabricadas con caucho natural, había tenido una breve presencia en Argentina hace algunos años a través de otro distribuidor.
Condiciones del acuerdo
El contrato, firmado por seis años tras una compleja negociación, incluye cláusulas específicas para el contexto argentino. "Fue largo porque al ser la bota de lluvia que te exigen ser importadas, estábamos de acuerdo que así sucediera, pero bueno, ya conocemos la Argentina que hoy puede ser importar, mañana no puede importar", explicó Meischenguiser.
La negociación incluyó una cláusula de fuerza mayor que contempla las particularidades del mercado argentino. "Nosotros decíamos que en el caso fuerza mayor que era que no pudiéramos importar o no pudiéramos pagar, el contrato se puede extinguir. Y ellos no entendían el concepto", recordó. La alianza implica una inversión de aproximadamente US$ 200.000, que incluye regalías, desarrollo de campañas y publicidad. El primer envío de productos fue de US$ 500.000 para cubrir un semestre, con un plan de crecimiento del 30% anual.
Mientras las icónicas botas de lluvia deben importarse obligatoriamente, la empresa tiene libertad para fabricar localmente indumentaria y accesorios con la marca Hunter, previa aprobación de la casa matriz. "En el caso de la indumentaria y en el caso de la marroquinería y de los accesorios tenemos libertad, en la medida que obviamente sea aprobado por Hunter internacional, a fabricar productos", explicó.
Los productos Hunter en Argentina tendrán un sobreprecio del 20% respecto al mercado internacional, debido a la estructura impositiva local. "En otro lugar del mundo no hay un 5% de ingresos brutos, no hay un 21% de IVA. El arancel por ejemplo en Chile de importación es un 6%, y acá en la Argentina es del 20%", justificó Meischenguiser.
El empresario reconoció que la apertura trae mayor competencia, especialmente de productos asiáticos a través de plataformas como Shein y Temu. "Yo creo que hay al principio como todas las modas es lo nuevo, lo lindo, lo distinto, me sumo y bueno y después va a haber que diferenciarse", analizó.
Perramus, que cuenta con 18 locales en todo el país (11 propios y 7 franquiciados), además de vender en multimarcas en distintos puntos del país, está reconfigurando su modelo de negocio. Históricamente fabricaba el 80% de sus productos localmente, pero ahora apunta a una distribución 50%-50% entre producción local e importada. Anualmente, produce unos 200 modelos.
Las botas Hunter ya están disponibles en los locales de Perramus y su tienda online, con planes de ampliar la oferta a accesorios e indumentaria en los próximos meses. Para el invierno 2026, la empresa comenzará a producir localmente prendas de abrigo con la marca británica.