Las palabras de Diana Mondino en la Unión Industrial Argentina causaron sorpresa entre los empresarios, a quienes recomendó comprar generadores eléctricos para evitar cortes de luz durante este verano, y desató una ola de consultas a los proveedores de estos equipos.
"En enero y febrero, el que no tenga un generador vaya comprándolo. Si se llega a reactivar un poquito la industria, no va a haber para todos", dijo la futura canciller.
Forbes consultó a diversas fuentes de toda la cadena energética y el análisis general es que los problemas a corto plazo no pasan por la generación eléctrica, como sugirió Mondino, sino en el segmento de distribución.
“Lo de Mondino es una total exageración desde el total desconocimiento. No hay problemas de oferta de generación en el corto plazo. Sí podría ser en el mediano o largo plazo. Este verano vamos a tener problemas de distribución, como todos los años, por la escasa inversión realizada en los últimos 4 años. Ahí sí podrían servir los grupos electrógenos instalados en las calles y pagados por el Estado, pero se ve que esta nueva gestión no va a pagar un dólar para eso y pide que las industrias compren sus propios equipos”, indicó el consultor y docente de la Universidad Austral, Oscar Medina.
De hecho, el clima está jugando de manera favorable y empuja la generación hidroeléctrica a partir de la llegada del fenómeno de El Niño que desencadena una cantidad de lluvias superior al promedio habitual.
“Hay bastante agua, no pareciera haber un problema de generación. Y como está lloviendo mucho, puede que los calores no sean tan extremos ni de tantos días seguidos. Eso puede ayudar”, dice el consultor de LPS Energy, Sergio Falzone.
Por otro lado, las declaraciones de Mondino trazaban un escenario de reactivación de la demanda industrial, algo que no parece que vaya a suceder en estos primeros meses de gestión donde el propio Javier Milei anticipó un ciclo de estanflación.
De todos modos, la fragilidad del sistema de distribución hace pensar que en algún momento se puedan repetir los cortes frente a picos de calor. En ese sentido, fuentes del sector celebraron las palabras de Mondino para sincerar el fenómeno.
“Lo que dijo Mondino no es ni más ni menos que blanquear la situación por la que atraviesa desde hace muchos años el sector. No es una noticia que el sector está al límite de su capacidad y nos parece que está bien blanquearlo. Si uno admite la realidad y busca resolverlo, es positivo. Hay muchas cuestiones regulatorias que se tienen que resolver para que se hagan las inversiones que se necesitan”, subrayaron a este medio.
Desde Cammesa marcan un panorama similar, con el agregado de una tendencia de los últimos años que trasladó la mayor cantidad de problemas para el mes de marzo. “Últimamente, las demandas máximas de verano se registran en marzo porque se mantiene alta la temperatura y la gente vuelve de vacaciones”, explican.
Si bien las grandes empresas ya cuentan con este tipo de artefactos por la importancia de no frenar los procesos de producción, los especialistas no recomiendan su compra para la mayoría de las pymes.
“En general, si las situaciones de corte de abastecimiento son sólo circunstanciales, como sería el caso, el invertir en unidades generadoras de emergencia, con el costo de inversión que ello significa, la compra de los equipos, vinculación a las instalaciones existentes y su mantenimiento, no debería cerrarles el número. Eso sí, de tratarse de un proceso productivo continuo y que no puede suspenderse por las consecuencias que ello trae, la evaluación es muy distinta. Ahí se debe comparar el costo de la parada y el rearranque de la producción (esto puede ser altamente oneroso según la industria), frente al costo de la generación de emergencia. Estos casos son contados y no se trata de la generalidad de la industria”, justifican desde Cammesa.
“Un generador solo se justifica para muy grandes empresas que pasan a ser autogeneradores como YPF, Siderca, Aluar o Acindar. Son muy costosos, se calcula entre medio millón a cinco millones de dólares para tamaño industrial. Son unos 1.000 a 1.200 dólares por kw más unos 205 litros de gasoil por hora en equipos de 1.000 kw”, concuerda Medina.