Pro Mujer, una organización sin fines de lucro que brinda servicios y herramientas para mujeres en América Latina, acaba de anunciar que trabaja en el lanzamiento de la Serie II de la Obligación Negociable (ON) de género. “Para llegar a miles de mujeres más tenemos que seguir avanzando y trabajando en forma conjunta. Queremos impactar en más mujeres argentinas. Esto es un hito para Pro Mujer y nos permite financiar mujeres para que puedan mejorar sus condiciones de vida”, compartió Carmen Correa, CEO de Pro Mujer, en el marco de un evento.
La ON de género Serie I, emitida en febrero de 2023 bajo el régimen 940 de la Comisión Nacional de Valores (CNV), les permitió a 1.429 mujeres emprendedoras de bajos recursos –la mayoría, del norte del país- acceder a capital para potenciar sus negocios y proyectos. Las entidades que garantizaron y colocaron la emisión de Pro Mujer fueron el Banco Galicia, Banco Hipotecario, Banco Comafi y Banco Supervielle, siendo Allaria Ledesma & Cia quien participa como colocador. En tanto, el estudio Mitrani, Caballero & Ruiz Moreno brindó la asesoría legal para la estructuración de la ON bajo el nuevo régimen, y el estudio Beccar Varela brindó asesoría a las entidades de garantía.
“El régimen 940 se crea para entidades que no son consideradas pymes y que no estaban pudiendo acceder a ese pool de potenciales inversores interesados en productos pymes y que estén etiquetados dentro de las finanzas sociales. El lanzamiento de una segunda emisión bajo el régimen podrá computar hasta un 5% del 75% de inversión como productos pyme de la cartera de los FCI”, detalló María Laura Tinelli, Asesora Estratégica de Pro Mujer y Fundadora de Acrux Partners.
Para la serie I, el crédito fue entregado bajo la modalidad de banca comunal, por un promedio de $ 140.000 en el momento en que se otorgó y se tardó unos 15 días en colocar los $ 200 millones que se recaudaron. Más de la mitad de los créditos entregados se enfocaron en el rubro de comercio.
En la serie II, que se estima que podría lanzarse en agosto, es la segunda de las tres que Pro Mujer tiene en un principio previstas para 2023. Para ella, la amortización se va a dar en 4 cuotas. La primera, equivalente al 7,5% de capital; la segunda, equivalente al 7,5% del capital, la tercera, equivalente al 40% del capital y la cuarta, equivalente al 4% restante del capital. El objetivo es poder alcanzar a unas 2.000-2.500 mujeres con créditos de unos $ 200.000.
Con presencia en la Argentina desde 2005, Pro Mujer se fundó en 1990 en Bolivia y opera a través de un modelo holístico e integral que busca ampliar el acceso de las mujeres de la región a los servicios de salud, aumentar su inclusión financiera y brindarles oportunidades de capacitación. A lo largo de su historia, otorgó US$ 4,4 millones en microcréditos y 10 millones de controles y cuidados médicos preventivos, impactando en las vidas de 2 millones de mujeres. También está presente en México, Nicaragua y Guatemala.
Pro Mujer entrega diferentes tipos de créditos: banca comunal y banca individual. Dentro de las modalidades, hay créditos productivos (para compra de maquinarias, por ejemplo), de corte hipotecario (para invertir en la mejora o expansión de vivienda porque muchas veces son viviendas talleres), con un enfoque más en lo rural y en la producción agropecuaria pequeña y de consumo.
Las Obligaciones Negociables son activos de renta fija -al representar una promesa de pago futuro de su capital y de su interés-, que se comercializan en el mercado de capitales local bajo un régimen de oferta pública transparente y regulado en el cual las empresas u organizaciones que las emiten son previamente evaluadas, calificadas y -en este caso- garantizadas por entidades registradas ante CNV.
