¿Cuál es la importancia de la industria minera para Scania?
A nivel global para Scania, la industria minera es uno de nuestros segmentos foco. Entendemos que tenemos un producto, nosotros tenemos una gama llamada XT que es para off road, una gama sumamente interesante para operaciones mineras brindando soluciones que permitan que nuestros clientes sean eficientes y logren tener una buena productividad. Además, es un negocio muy interesante para Scania en materia de rentabilidad, no cabe duda. Al mismo tiempo, en la región tenemos mercados muy importantes, como lo son Perú y Chile, que son sumamente importantes a nivel global. A lo cual se está empezando a sumar Argentina, que en los próximos 5 o 10 años va a ser uno de los sectores más importantes de la economía local.
¿Qué soluciones están capacitados para aportarle al sector?
Tratamos de ofrecer una gama completa de no solo el producto, sino también los servicios necesarios para mantener dicho camión y eventualmente financiarlo también. Y creo que la minería justamente es uno de los sectores donde esto más se ve o donde es más nítido, porque las empresas mineras tienen una demanda de disponibilidad sumamente elevada comparado con los otros clientes. Entonces en vez de que el camión venga a nuestro concesionario (como haría un cliente, vamos a llamarlo, “normal”) nosotros instalamos nuestro taller en la operación minera. Eso desde ya permite que les podamos mantener los camiones de una forma mucho más inmediata sin tener que deslocarse. Además, ponemos ingenieros a disposición para monitorear la performance de dicha flota con varios indicadores para ver cómo puede mejorar desde la conducción de los conductores hasta el mantenimiento, midiendo todo tipo de indicador. El tiempo medio de reparación, la disponibilidad de la unidad, la conducción en sí, la eficiencia de cómo frena, cómo acelera el conductor, varios factores que hacen que podamos ayudarlo a optimizar su trayectoria, su productividad.
Ahora en el mundo está muy en boga la minería sustentable, incluso es una exigencia para poder acceder a determinados mercados. ¿Cuál es su granito de arena para hacer justamente esta reducción de la huella de carbono de la minería?
Justamente eso es parte de lo que es el propósito de Scania: liderar esta transición hacia un sistema de transporte más sustentable. La minería está yendo a la electrificación y la utilización de vehículos autónomos. La electrificación evidentemente para bajar las emisiones de los vehículos y la utilización de autónomos por un tema tal vez más humano, las operaciones mineras normalmente se dan en condiciones bastante desafiadoras para las personas que trabajan en los campamentos mineros y por ende si podés bajar la cantidad de personas que están ahí evidentemente podemos ayudar a la sociedad. Por ejemplo: tenemos conductores que trabajan en la minería subterránea donde el conductor trabaja el día entero abajo en la oscuridad. Si pudiesen hacerlo con un camión autónomo sería tal vez mejor. Eso a largo plazo. Pero si hablamos aquí y ahora en la Argentina, este año, tenemos también mucha eficiencia en materia de sustentabilidad que podemos ganar. El parque automotor que existe en Argentina es bastante antiguo, se utilizan vehículos con normas de emisiones y si sustituimos estos vehículos simplemente por los vehículos más modernos tenemos una ganancia de hasta 20% en las emisiones. Más eficiencia todavía se puede ganar si sustituimos en determinadas operaciones entre equipos de gran porte por camiones volcadores de nuestra gama XT, que solo con eso podés ganar hasta 75% de diferencia en los costos operativos y en las emisiones de todos esos vehículos.
Hoy el gran debate dentro de la industria minera es el RIGI. ¿Ustedes observan que el proyecto puede ser perfectible para no perjudicar a la cadena de proveedores?
Sí. Yo creo que sí. La verdad que no tengo la solución, pero no quisiera que, por beneficiar a inversiones gigantes para empresas internacionales, perjudiquemos lo que ya tenemos, que es un parque industrial instalado y una mano de obra cualificada. Por otro lado, también es evidente que necesitamos inversiones que no se han realizado durante todos estos años. Solamente si miramos en la minería efectivamente se han invertido más o menos 500 millones de dólares en los últimos 3 años, lo cual es muy poco relativamente al tamaño de dicha industria. Así que algo tenemos que hacer, simplemente creo que tenemos que encontrar este equilibrio que mencionaba para que no perjudiquemos en demasía a ciertos jugadores en beneficio de algunos pocos grandes.
¿Ustedes podrían ser perjudicados con el proyecto como está hoy en día?
No, la verdad que creo que no, porque somos una gran empresa y ya tenemos nuestra planta en Tucumán que produce a pleno.
Por un lado, vemos sectores muy pujantes como la minería y la energía y, por el otro, muchos que sufren una gran caída de producción. ¿Qué proyecciones hacen ustedes entre los clientes que pueden ganar y los que pueden perder?
La verdad que quisiera tener esa bola de cristal, porque hay una especie de dicotomía. Yo creo que efectivamente ha habido una contracción de la economía como un todo. Muchos de los clientes han sufrido una contracción bastante pronunciada. En abril fue un poco menos, así que eso creo que es positivo. Y si escucho al Gobierno la verdad que creo que el ajuste que hemos hecho ha sido necesario justamente para poder apostar un poquito a que vuelva un crecimiento más orgánico, más sano, más sincero. Y ahí es donde entran estos tres sectores tan importantes para la economía: el agro, que siempre fue el motor de Argentina; Vaca Muerta o el sector de Oil&Gas, que también empuja muchísimo y que ahí sí está habiendo más inversiones y está aumentando, y quién sabe quizás a más medio o largo plazo la minería también entre en ese nivel.
