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Innovacion

Una IA publicó un paper científico y la investigación autónoma entra en escena

Juan Romero

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La startup se posiciona como un nuevo jugador clave en la inteligencia artificial con un enfoque centrado en la investigación autónoma. Zochi, su agente científico artificial, logró un hito inédito: publicar en solitario un paper en una de las conferencias más prestigiosas del mundo.

19 Junio de 2025 21.00

La escena global de la inteligencia artificial se encuentra dominada por gigantes como OpenAI, Google DeepMind y Anthropic. Sin embargo, una joven compañía llamada Intology está trazando un camino radicalmente diferente: el de la ciencia autónoma. Y lo hace con resultados concretos. Su agente de inteligencia artificial, Zochi, se convirtió en el primer sistema autónomo en lograr que un paper fuese aceptado por el comité principal de la conferencia ACL 2025, la cumbre más reconocida del mundo en procesamiento del lenguaje natural.

Un hito sin precedentes

El artículo, titulado Tempest: Jailbreaking Automático Multi-Turno de Grandes Modelos de Lenguaje con Búsqueda de Árbol, fue producido íntegramente por Zochi sin intervención humana significativa. No se trata de un aporte menor ni de un simple experimento: el trabajo superó la rigurosa revisión por pares de la ACL, que en su última edición tuvo una tasa de aceptación de apenas el 21,3%. No solo eso: recibió una puntuación final de 4 en la metarevisión, ubicándose en el 8,2% superior de todas las presentaciones.

"El sistema no solo identificó un área de investigación relevante —los ataques multiturno a modelos de lenguaje—, sino que diseñó e implementó un método superador, condujo todos los experimentos y redactó el paper final", explicaron desde Intology.

Zochi, el científico artificial con "PhD"

Zochi es mucho más que un modelo de lenguaje. Se trata de un agente de investigación autónomo que emula todo el ciclo del método científico: desde el análisis de literatura académica hasta la redacción de artículos revisados por pares. Puede identificar vacíos en el conocimiento, proponer hipótesis innovadoras y realizar experimentación rigurosa en cuestión de horas, un proceso que suele tomar meses en entornos humanos.

Su sistema paraleliza ensayos, automatiza la validación con datasets estandarizados y genera artículos con mínima asistencia humana. De hecho, en este caso, los investigadores solo aportaron algunas figuras y correcciones de estilo. Zochi hizo el resto.

Diferencias clave con otras empresas del sector

Mientras la mayoría de las compañías líderes en IA centran sus esfuerzos en modelos fundacionales, chatbots comerciales o aplicaciones corporativas, Intology apuesta por un enfoque casi académico. "Nuestro objetivo no es solo crear herramientas útiles, sino expandir las fronteras mismas del conocimiento", aseguran desde la firma.

Este posicionamiento convierte a Intology en una rara avis dentro del ecosistema. Su foco está en generar ciencia, no en capturar mercado. Y eso se refleja tanto en el diseño de Zochi como en los desafíos que aborda: problemas complejos de seguridad, mecanismos de jailbreaking, y propuestas técnicas innovadoras que podrían redefinir el modo en que se concibe la IA autónoma.

Tempest: una amenaza (y solución) para la seguridad de los modelos

El primer trabajo relevante de Zochi se centró en el fenómeno del jailbreaking en modelos de lenguaje, una técnica que busca vulnerar las políticas de seguridad de estos sistemas a través de múltiples interacciones encadenadas. Su método, bautizado como Tempest, logró una tasa de éxito del 100% en GPT-3.5-turbo y del 97% en GPT-4, superando ampliamente a métodos anteriores. Lo más relevante: lo hizo utilizando menos prompts, lo que muestra una mayor eficiencia y sofisticación.

"El trabajo revela cómo los límites de seguridad pueden erosionarse mediante conversaciones aparentemente inofensivas. Esto aporta información crítica para mejorar los sistemas defensivos", concluyen en Intology.

Lo que viene: Zochi en versión beta

Tras este logro, Intology anunció el lanzamiento de un programa beta para Zochi. En su primera etapa, se ofrecerá como copiloto de investigación, trabajando junto a humanos en tareas como exploración de líneas teóricas, redacción de papers y diseño experimental.

El plan es ambicioso: convertir a Zochi en un verdadero colega para los científicos, capaz de acelerar el descubrimiento en áreas como biomedicina, física, economía y más. La promesa es tan potente como el riesgo que plantea: una inteligencia artificial que no solo responde preguntas, sino que las formula con autonomía y criterio.

Una nueva era para la ciencia

La publicación de Zochi marca un antes y un después. En un mundo donde la IA suele asociarse a asistentes conversacionales o herramientas empresariales, Intology pone el foco en la creatividad científica. Y lo hace con un mensaje claro: el conocimiento no tiene por qué ser exclusivamente humano.

Con un perfil más cercano al de una startup académica que al de una tech tradicional, Intology empieza a escribir su propia historia. Y Zochi, su creación estrella, ya tiene un lugar ganado en los libros de historia de la inteligencia artificial.

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