En el reciente evento "Made by Google", la compañía presentó su línea Pixel —ya filtrada con antelación— con la participación de Jimmy Fallon y otras celebridades, tanto en el escenario como en videos pregrabados. Durante toda la jornada, quedó claro que Google busca que los teléfonos Pixel ganen terreno y se vuelvan más populares, mientras destaca su liderazgo en innovaciones en inteligencia artificial y recurre a famosos para ponerlas en primer plano.
La lista de celebridades que formaron parte de la presentación fue extensa. Entre ellas estuvieron Steph Curry, Lando Norris, Alex Cooper, Giannis Antetokounmpo, Cody Rigsby, Bryson DeChambeau, Trinity Rodman, A'ja Wilson, Jeremy Lin y los Jonas Brothers.
(Nota: Google es cliente asesor de mi empresa, Moor Insights & Strategy, aunque no intervino en la realización de este artículo).

Todo el evento, conducido por Jimmy Fallon, pareció más una producción de su propio programa que una presentación típica de Google Pixel. Quedó claro que el público objetivo no era el usuario habitual de Pixel, sobre todo porque pasaron más de 20 minutos sin que se anunciara un solo producto nuevo. Cuando finalmente lo hicieron, los detalles fueron escuetos y se enfocaron en destacar las características clave para el consumidor promedio de cada dispositivo.
Llamó la atención que entre los asistentes predominara la prensa y los influencers. No creo que buena parte del público habitual de Google se haya sentido convocado por este nuevo formato orientado al consumidor. A mi entender, estos eventos deberían estar pensados para los entusiastas de la tecnología, mientras que el marketing y las colaboraciones pueden apuntar al público general.
En lo personal, me resultó más claro y útil el formato del evento Google I/O, donde los aspectos técnicos se explicaban previamente en otro canal, y los anuncios más relevantes se reservaban para el evento en vivo. En esta ocasión, muchos de los periodistas presentes parecían no entender del todo las intenciones de Google, ni por qué estaban allí.
Mensajes detrás de la nueva línea de productos Pixel
La presentación de los nuevos Pixel 10, Pixel Watch 4 y Pixel Buds 2a dejó en claro la intención de mostrar un ecosistema más amplio, con productos en distintos colores y tamaños. Google también repasó su recorrido de diez años con la línea Pixel, haciendo foco en sus semiconductores Tensor, una de las claves del desarrollo propio de la compañía.
El lenguaje de diseño de los nuevos dispositivos se mantiene prácticamente igual al del año pasado. Desde mi punto de vista, eso juega a favor: el diseño sigue siendo distintivo y transmite una sensación de producto premium.
Durante el evento, Google intentó marcar distancia con Apple en materia de inteligencia artificial, pero el mensaje no tuvo el impacto esperado. Esa crítica directa habría funcionado mejor como parte de una campaña publicitaria bien enfocada. Lo mismo sucede con el RCS, el protocolo de mensajería que mejora la experiencia entre plataformas gracias a imágenes de mayor calidad y confirmaciones de lectura. Aunque la mención fue positiva, la mayoría de los usuarios todavía no sabe qué es ni por qué debería importarle. En ese sentido, Google necesita una campaña clara y contundente que explique su valor.
También se mencionó que cambiarse a un Pixel ahora es más fácil que nunca, pero creo que ese tipo de preocupación aparece recién después de que alguien se entusiasma con un dispositivo. Primero hay que despertar el deseo.
Las especificaciones del nuevo Pixel: IA al servicio del usuario
Durante el evento, Google presentó exactamente lo que se esperaba en materia de teléfonos: los nuevos Pixel 10, Pixel 10 Pro, Pixel 10 Pro XL y Pixel 10 Pro Fold. Los precios van desde US$ 799 hasta US$ 1.799, y todos los modelos están disponibles desde el 28 de agosto.
Toda la línea recibió mejoras, principalmente gracias al nuevo procesador Tensor G5. Según la compañía, este chip incorpora una TPU un 64% más rápida y una CPU hasta un 34% más rápida que la generación anterior. Esto convierte al Pixel en el primer dispositivo capaz de ejecutar Gemini Nano, el modelo de inteligencia artificial más reciente de Google.
Una de las herramientas de IA más destacadas del evento fue Magic Cue, una función que apunta directamente a lo que muchos usuarios buscan hoy en una asistencia inteligente. Magic Cue toma el contexto del correo electrónico y del calendario para facilitar respuestas con información útil y precisa, sin necesidad de buscar esos datos manualmente. Además, Google aseguró que se trata de una función local habilitada por Tensor G5, y que el usuario puede decidir qué información se comparte y si desea activar o no la herramienta.
También se incorporó Voice Translate, una tecnología que proviene de los desarrollos en Project Starline y Google Meet, y que permite traducir conversaciones a otro idioma manteniendo el tono y el acento originales del usuario.
La nueva línea Pixel también se beneficia de un procesador de señal de imagen renovado dentro del Tensor G5, que mejora tanto el rendimiento como la calidad de las cámaras. Además, estos modelos son los primeros en incorporar credenciales de contenido C2PA de forma nativa, un avance en seguridad y autenticidad digital.
Google asegura que la batería ahora ofrece hasta 30 horas de autonomía, frente a las 24 horas del Pixel 9. Otro cambio clave es el traslado de la producción de sus chips fuera de Samsung. El nuevo Tensor G5 se fabrica con el proceso de 3 nanómetros de TSMC, lo que debería traducirse en mejor eficiencia energética y menor generación de calor.
Aun así, la compañía decidió mantener el módem Exynos 5400 5G de la generación anterior, por lo que sigue trabajando con Samsung en ese componente, mientras el resto del chip se desarrolla con silicio propio de Google.
Otra novedad destacada es la incorporación de carga inalámbrica Qi2 "Pixel Snap", que permite 15 vatios de potencia en todos los modelos compatibles con cargadores magnéticos. En el caso del Pixel 10 Pro XL, también se suma la carga Qi2.2 de 25 vatios.
Por último, Google se convirtió en la primera marca en ofrecer certificación IP68 de resistencia al agua y al polvo en toda su línea, incluyendo el Pixel 10 Pro Fold, el primer teléfono plegable con esa certificación.
En comparación con la generación anterior, el Pixel 10 base incorpora una pantalla apenas más grande y suma un teleobjetivo 5x, lo que le permite a toda la línea contar ahora con una configuración de tres cámaras. Desde mi punto de vista, eso convierte al Pixel 10 en una de las mejores opciones en relación calidad-precio en lo que respecta a capacidades fotográficas y rendimiento general.
Sin embargo, vale aclarar que los sensores del modelo base no están al nivel de los que incluyen el Pixel 10 Pro y el Pro XL. Lo que se mantiene constante entre las líneas Pixel 9 y 10 es el sensor principal de 50 MP, un detalle que, creo, facilita el desarrollo y la integración de muchas de las funciones de cámara basadas en inteligencia artificial que ofrece Google.
La batería también recibió mejoras en todos los modelos. El Pixel 10 base pasó de 4700 a 4970 mAh, mientras que el Pixel 10 Pro Fold subió de 4650 a 5015 mAh. A pesar de estas actualizaciones en rendimiento y autonomía, los precios se mantuvieron, lo que refuerza la idea de que esta generación ofrece más valor sin aumentar el costo. Incluso el modelo más básico eleva la experiencia del usuario, especialmente gracias a la nueva cámara.
Google reservó algunas de sus mejores funciones para los Pixel 10 Pro y Pro XL, como el zoom de 100x, que utiliza un modelo de inteligencia artificial generativa en el propio dispositivo para mejorar la calidad de las imágenes.
El Pixel 10 Pro XL también incorpora carga por cable de 45 vatios, al nivel del Samsung Galaxy S25 Ultra, mientras que el resto de los modelos se queda en 30 vatios. Esta diferencia resulta algo decepcionante si se tiene en cuenta que plegables como el Motorola Razr Ultra, que analicé recientemente, ya ofrecen carga de 68 vatios, incluso con limitaciones de espacio y refrigeración mucho más exigentes.
De todos modos, si la autonomía que promete Google se cumple, la necesidad de una carga más rápida pierde relevancia. En mi experiencia con el Razr Ultra, la batería parecía no agotarse nunca, y se recargaba en apenas unos minutos.
¿Qué está haciendo la línea Pixel con los plegables?
Google dejó pasar la chance de lanzar un teléfono plegable este año para completar su línea de dispositivos Pixel. No queda claro si evitó hacerlo porque la línea Razr de Motorola convirtió con éxito a usuarios de iPhone en nuevos usuarios de Android, o si simplemente todavía no tomó la decisión de presentar un Pixel Flip. Pero si la compañía quiere llegar a un público más amplio, un teléfono plegable parece una jugada clave. Este formato es el preferido por un segmento más joven y femenino que hoy elige iPhone. Motorola ya lo demostró.
El Pixel 10 Pro Fold incluye mejoras importantes en el diseño de la bisagra y suma la certificación IP68, que garantiza resistencia al agua y al polvo. Esta nueva bisagra no solo mejora la durabilidad, sino que además permite una pantalla externa más grande, de 6,4 pulgadas (en lugar de las 6,3 anteriores), y mantiene la misma pantalla interna de 8 pulgadas, con bordes más delgados y un brillo máximo de 3000 nits.
Google también actualizó la carga inalámbrica a Qi2 y aumentó la carga por cable del Pro Fold, que pasó de 27 vatios a 30 vatios. La memoria RAM se mantiene en 16 GB, el mismo valor que en todos los modelos Pixel 10 Pro y también en la serie Pixel 9 Pro.
Tenía muchas ganas de ver una mejora en la cámara del Pixel 10 Pro Fold, tanto para que estuviera a la altura del resto de la línea Pro como para acompañar el diseño tipo visera. Google también aseguró que el nuevo Pro Fold es ligeramente más grueso que el modelo anterior. Esto no representa un problema, sobre todo si se tiene en cuenta lo delgado que resultó el Pixel 9 Pro Fold, que venía con una batería más chica y sin certificación IP68. En términos generales, las mejoras del Pixel 10 Pro Fold son positivas, aunque en su mayoría graduales. A pesar de eso, la configuración de la cámara sigue estando por debajo del resto de los modelos de la línea Pixel Pro.
Google apuesta más fuerte a la salud y el fitness con el Pixel Watch 4
Google no solo subió al escenario al reconocido instructor de Peloton, Cody Rigsby, sino que además anunció su propia función de entrenador de fitness, que estará disponible a fin de año para usuarios de Fitbit Premium en dispositivos Fitbit y Pixel. Se trata de un entrenador personal de salud potenciado por Gemini, que ofrecerá puntuaciones de preparación basadas en métricas de sueño y actividad física.
Gran parte de la información se verá potenciada por el nuevo Pixel Watch 4, que volverá a estar disponible en dos tamaños: 41 mm y 45 mm. El reloj suma un sensor de frecuencia cardíaca mejorado que, según Google, ofrece una precisión comparable a la de un sensor de banda pectoral. Este nuevo componente permite calcular la carga cardiovascular, una función clave para que cada persona pueda entrenar dentro de su propio rango de esfuerzo.
También se incorporan novedades como "levantar para hablar", que mejora la interacción al permitir activar Gemini sin apretar botones ni usar una palabra clave: alcanza con acercar la muñeca a la boca.
Google también anunció una colaboración con Peloton para integrar los entrenamientos de la plataforma en la app de Fitbit desde este otoño. El Pixel Watch 4 incorporará un reconocimiento de actividad más inteligente, capaz de aprender las rutinas y el estado físico de cada usuario para detectar y monitorear de forma automática los entrenamientos.
El reloj llega con el nuevo procesador W5 Gen 2 de Qualcomm, el último chip de 4 nanómetros de la compañía. Este componente habilita un GPS de doble frecuencia mejorado y nuevas funciones de mensajería satelital, disponibles solo en el modelo con conectividad LTE.
Se trata del primer reloj inteligente con conectividad satelital NB-NTN integrada, lo que permite una comunicación más segura fuera de la red. Este nuevo servicio funcionará sobre la red satelital de Skylo. Además, Google rediseñó la pantalla del Pixel Watch 4: ahora es abovedada, lo que le da un aspecto más cuidado y una sensación aún más premium. Si bien la pantalla del Pixel Watch 3 ya ofrecía una excelente experiencia, queda por ver cómo se sentirá este nuevo diseño en el uso diario.
El Pixel Watch 4 estará disponible a partir del 9 de octubre por US$ 349. Por su parte, los Pixel Buds 2a ofrecerán una versión más simple, con cancelación activa de ruido (ANC) y funciones de audio espacial limitadas, por US$ 100 menos que los Pixel Buds Pro 2 del año pasado.
Nota publicada en Forbes US.