"En materia de importaciones estamos en una etapa difícil"
Fernando Furci, Gerente General de la Cámara de Importadores de la República Argentina (CIRA), Carlos Restaino, Director de la CAC y Patricia Viana, Directora de Bessia Center SA, expusieron las problemáticas que afrontan las importaciones frente al modelo proteccionista imperante.

Poco se sabe de que el 80% de las importaciones argentinas se destina a procesos productivos de la industria nacional, ya sea para tecnificarla o hacerla más competitiva. De todos modos, siempre se las ve como una amenaza para la industria nacional y el mercado laboral. 

A propósito Furci desmitificó: "Es imposible que se produzca y exporte más si no importamos. Acá hay una relación directa que no se puede evitar y hay que terminar con este estigma respecto de las importaciones. Ellas se podrán sustituir, pero siempre las vamos a necesitar para producir, exportar y consumir. Además el comercio exterior es de doble vía, ya que venderle al mundo significa también comprarle a él. Cuando en la balanza comercial exportaciones e importaciones son altas, se generan más productos, más empleo y más actividad económica porque no todo se fabrica acá. Es clave que podamos tener más importaciones para poder crecer". 

Pese a eso, el gerente de CIRA reveló que "es un momento donde proyectar y poner en perspectiva el negocio es difícil. Hay un contexto internacional atípico y complejo que sube costos y extiende tiempos, entonces tenemos que estar muy involucrados en todas las operaciones de comercio exterior para tratar de sacar el mejor rendimiento posible". 

Pero hay más. "No saber es lo que hoy más desvela a los empresarios argentinos, pese a que están capacitados y entrenados para planificar su tarea en un mínimo de tiempo. Pero en este país planificar la tarea en un mes ya es muy complicado. ¿Por qué? Porque para importar se necesita un mínimo de dos o tres trámites, y acá uno nunca sabe en qué estados están cada uno de ellos y no se puede prever lo que pasará. Son procedimientos que en otros países no existen y que acá dependen del funcionario de turno", detalló Restaino. 

Tanto es así que "la carga administrativa que tenemos cuando hacemos una importación es cada vez mayor. En todos los ámbitos, desde cuando debemos pagarle a un proveedor del exterior hasta cuando debemos pedir autorización al Banco Central para girar divisas. Hasta lidiamos con problemas gremiales en el puerto a la hora de transnacionalizar la mercadería. Toda esta carga de trabajo administrativo le quita al empresario esa creatividad e inspiración que otros países promueven. No sólo somos importadores, también somos empresarios con otras áreas para gestionar", amplió Viana. 

En este marco, los ejecutivos coincidieron que las medidas proteccionistas vigentes no hacen más que generar desabastecimiento y aumento de precios frente a la alta demanda de productos que escasean en el territorio. "Argentina tiene que terminar con las discusiones binarias. Más bien debemos enfocarnos en cómo hacer para que el país sea más productivo y las empresas quieran invertir acá", reclamó Viana. 

"En lugar de proteccionismo hay que hablar de incentivos para las empresas. Darles el conocimiento, las condiciones de competitividad  y los costos e impuestos razonables para que puedan salir al mundo", concluyó Furci.