Entrevistado por Florencia Radici, Lucas Salvatore, Director de IDERO, Real Steel y del Grupo Salvatore, fue protagonista del spot “Construcción industrializada: certezas en un país de incertidumbres” en donde profundizó sobre las ventajas de esta modalidad. 

Según el ejecutivo la construcción industrializada tiene varias ventajas. “Una de las más conocidas es la sustentabilidad. Nosotros construimos con estructura de hacer que tiene menor huella de carbono que la de hormigón, es 100% reciclable y es infinitamente reciclable”. 

Por otro lado, reduce al 50% el tiempo de obra y ofrece una ventaja de precisión que permite industrializar el resto de la construcción. Sin embargo, destacó como principal ventaja la certidumbre del sistema: “Certeza de costos y certeza de tiempos, algo que en momentos de alta inflación, es un gran valor”, destacó.

Salvatore comentó que tienen desarrollos en Palermo y en Villa Crespo, en Ciudad de Buenos Aires, pero el foco de la compañía está puesto en desarrollos de renta, en este caso, en Añelo, una localidad cerca de Neuquén, hub principal de Vaca Muerta. “El país tiene una gran oportunidad al dejar de importar gas y empezar a exportar y en Añelo hoy viven 12 mil personas y entran y salen 15 mil personas más por una ruta porque no hay oferta suficiente de buenas locaciones. Hay un déficit de diez mil camas, pero la proyección es que se llegue a un número de 40 mil personas de acá a 10 años”, detalló. 

En la ciudad, la empresa que construye para terceros también, es decir, ofrece una inversión de renta, cuenta con dos edificios en operación con 72 departamentos; está terminando otro de 24 departamentos; empezando seis edificios más y un plan de viviendas modulares. “Nosotros al inversor le garantizamos alquiler con contrato a diez años en dólares”, enfatizó. “Algo poco normal para el mercado”. El ejecutivo destacó también que su propuesta incluirá un modelo certificado Edge, lo que lo posiciona por delante de otro tipo de desarrollos en términos de sustentabilidad. 

Salvatore aprovechó el espacio para desterrar ciertos mitos que existen alrededor de la construcción industrializada. “Uno de ellos es pensar que no se puede hacer en Argentina por tratarse de algo caro, por no haber empresas capacitadas para hacerlo, o que se trata de un modelo cuyo diseño es poco innovador, entre otros”. 

Sobre ello, el ejecutivo mencionó que lo que ellos ofrecen es un producto llave en mano que integra la industria con la arquitectura, con un mayor grado de diseño y, dado el avance de tecnología, con costos similares. 

Por último, hizo hincapié sobre los valores de los sistemas modulares. Además de la reducción de tiempos de la puesta en uso, permite reubicar lo edificado en otro sitio si fuera necesario y también adaptarlo a distintos usos.