José Antonio Kast lo sabía desde antes de ganar las elecciones: su primer viaje sería a Argentina. La decisión, que podría y puede ser leída en clave ideológica, está impulsada además por algo que hasta hace poco era inimaginable: en Chile crece la admiración por la forma en que Argentina está reformando su economía. A tal punto, que un hombre clave de Luis Caputo podría convertirse en el nuevo "zar" de la economía chilena.
Kast no viajará solo a Buenos Aires, sino que lo hará acompañado por su principal asesor económico, Jorge Quiroz, por la presidenta de la Sociedad de Fomento Fabril (SOFOFA, la UIA chilena), Rosario Navarro, y por la presidenta de la Confederación de la Producción y del Comercio (CPC), Susana Jiménez. Y en la cabeza de todos, una serie de proyectos para dinamizar la relación económica y comercial entre ambos países, que comparten la tercera frontera más extensa del mundo: 6.691 kilómetros.
"Lo que se está haciendo en Argentina nos causa bastante admiración, y esperamos que le vaya bien, porque tener a un vecino y socio histórico como Argentina yéndole bien sería no solo interesante para Chile, sino que sería un caso bien de estudio para el resto del mundo", dijo Jiménez durante una entrevista con Forbes Argentina en Santiago de Chile.
La reflexión de Jiménez coincide con lo dicho por Mara Sedini, vocera de Kast, en la previa del viaje a Buenos Aires y la cumbre con Milei, en la que se discutirán "dos temas principalmente".

"El primero tiene que ver con los temas de seguridad y migración. El segundo tiene que ver con el eje económico. Necesitamos seguir profundizando relaciones que permitan a ambas naciones seguir creciendo. Tenemos desafíos de crecimiento en nuestro país. Argentina ha levantado esas banderas en el último periodo en que el presidente Javier Milei ha estado", añadió.
Tras la reunión a solas entre los dos presidentes, las comitivas ampliadas mantendrán conversaciones, a lo que se sumará un foro de empresarios de ambos países.
Ya el año pasado, Cristián Larroulet, exsecretario general de la Presidencia de Chile y profesor hoy de la Universidad del Desarrollo e investigador del Centro de la Empresa y Sociedad (CIES), planteaba su admiración por lo que se está haciendo en Argentina.
"El contraste entre Chile y Argentina es claro y francamente preocupante. En Chile estamos atrapados en discusiones menores, como si el crecimiento será de 2,2% o 2,4%. Es penoso. Tendríamos que estar discutiendo de las medidas de política para crecer al 4%", dijo durante una entrevista con el sitio Ex-Ante.
"¿Qué medida estamos discutiendo salvo el tema de la permisología? Mientras, Argentina está tomando decisiones audaces, sacando adelante el proceso de inversión se puede hacer. Esto nos muestra que, con políticas económicas bien diseñadas, es posible movilizar la economía incluso en circunstancias adversas".
Al gobierno de izquierda de Gabriel Boric le quedan pocas semanas, y desde el 11 de marzo de 2026, Chile será gobernado por una confluencia de todas las derechas y un presidente, Kast, que propone "respeto" y "diálogo", aunque también mano dura contra la delincuencia y en el tema de la inmigración irregular.
Jiménez recuerda "la seguidilla de políticas públicas no tan afortunadas que ha tenido la Argentina" y "el cambio de impronta" que plantea el gobierno de Milei.

"Volver a un equilibrio macroeconómico es sin duda un desafío grande, y un resultado positivo no solo va a generar admiración desde Chile, sino que es un caso que podría ser caso estudio en el mundo: cómo se revienten políticas económicas que han sido desafortunadas para el desarrollo del país, para el progreso del país. Nosotros, desde Chile, lo miramos con mucho interés. Y ciertamente también el hecho de que parte del equipo cercano del presidente Milei sea precisamente un chileno, hace que el seguimiento que se le ha hecho a esas políticas económicas genera harta (mucha) atracción e interés en Chile".
El chileno al que se refiere Jiménez es José Luis Daza, "número dos" en el Ministerio de Economía que conduce Luis Caputo, y dueño de las dos nacionalidades. En Chile se menciona insistentemente a Daza como posible ministro de Economía de Kast. Sería un salto sin precedentes, un hombre en la cima de la conducción económica de Argentina que pasa a hacer lo mismo en Chile.
¿Dónde están las oportunidades para Chile y Argentina en esta nueva etapa política y económica?
"Hay muchos espacios de oportunidades, porque Chile tiene capacidades complementarias con Argentina. Partiendo porque nosotros tenemos la salida al Pacífico, Argentina la salida al Atlántico. Tenemos bastante infraestructura desarrollada, pero que todavía tiene mucho potencial de crecimiento. Y yo diría que más allá del intercambio comercial hoy día existente ,y que ha ido aumentando en el último tiempo, hay también algunos sectores que son muy interesantes, partiendo por energía, donde el poder acceder a recursos argentinos que son de bajo costo, como es las reservas de gas que tienen, o las reservas de petróleo".
"Se han hecho acuerdos ya en tiempos recientes para aumentar ese intercambio y todo lo que tiene relación con la interconexión energética son espacios grandes de oportunidades. Conectar justamente desde una costa a la otra a través de un corredor que facilite la logística y la exportación de los productos de ambas partes es muy interesante. Y, por cierto, también en minería hay proyectos conjuntos, hay proveedores chilenos que tienen expertise y donde hay oportunidades de cara a todo lo que es la transición energética. Todo lo que tiene relación con el cobre, con el litio, con las tierras raras".
Jiménez no quiere dejar de destacar el potencial de "la agroindustria, otro de los sectores importantes donde existe hoy día intercambio pero puede haber mucho más en el futuro".
La minería, donde Chile es líder mundial, es también una muy interesante oportunidad para Argentina. "A mí no me cabe duda que en Chile hay mucho know-how en el tema minero. Chile es el principal productor de cobre en el mundo y el segundo en litio, donde Argentina tiene un tremendo potencial también y donde puede haber un aprendizaje mutuo, bilateral, porque también acá se pueden intercambiar conocimientos, servicios asociados a esta actividad minera".
El expertise en tecnología que existe en Argentina y un marco regulatorio superior al chileno equilibra sin embargo la relación de ambos países en la minería.

"Hay regulaciones que en algunos casos son mejores en Argentina que en Chile. Es el caso del litio, donde Argentina probablemente va a estar superando a Chile en los próximos años. Y nosotros hemos desarrollado una larga historia de la minería del cobre, de la minería de otros materiales importantes y que también pueden generar un aprendizaje mutuo".
Las empresas en el área del comercio y los servicios serán también protagonistas, destaca Jiménez. "Por una parte nosotros tenemos grandes empresas argentinas operando en Chile, como Mercado Libre, como el Grupo Arcor, etcétera. Y a su vez, empresas chilenas que han buscado expandirse en Argentina, eso incluye a Cencosud, las forestales, las viñas... Hay mucho intercambio histórico, y a medida que a los dos países les vaya bien y tengan una mirada compartida acerca de la importancia de generar condiciones habilitantes para el crecimiento y la atracción de inversiones, las oportunidades son exponenciales".
¿Serán los Andes alguna vez como los Alpes, una cadena montañosa que se cruza con sencillez, con túneles modernos y pasos fronterizos ágiles? Jiménez cree que sí.
"Hay proyecciones que marcan que, si hay estabilidad suficiente en ambos países, como te decía, uno de los proyectos es el corredor bioceánico. Necesitamos una integración mucho más profunda, mucho más ágil y con mucha oportunidad de mayor intercambio hacia adelante. En los últimos meses, el turismo argentino ha sido clave para apuntalar el comercio en Chile. Eso requiere de flujos de movimiento a través de los pasos fronterizos, de las aduanas, etcétera, que pueden mejorar muchísimo en la medida que haya una buena coordinación y colaboración entre ambos gobiernos y autoridades".