Cuáles serán las apuestas de las energías renovables para el 2026
Con la dificultad de superar los cuellos de botella en infraestructura, las empresas exploran nuevos drivers de crecimiento.

Tras diez años desde la sanción de la ley de promoción de energías renovables, la industria cumplió con casi todas las metas previstas, pero se enfrenta a un duro desafío sobre cómo continuar con su crecimiento.

De un peso en la matriz energética inexistente en torno al 1%, las renovables ya alcanzaron una cobertura eléctrica del 22% en los últimos datos de septiembre y tocaron un pico récord del 44,28% el 19 de octubre al mediodía. Aunque, es esperable que en el promedio de todo el 2025 este número termine levemente debajo del objetivo del 20% trazado en la ley.

Mientras se discute una nueva normativa en el Congreso para garantizar la estabilidad tributaria del sector, pero sin metas de cara al futuro, el interrogante pasa por cómo continuar con el sendero de expansión, con un sistema de transporte completamente saturado.

"Hoy las empresas no buscan la mejor zona, sino las pocas áreas que todavía tienen capacidad de transporte disponible, aunque el recurso sea peor. Eso te baja fuertemente la rentabilidad de los proyectos", explican desde una generadora.

La solución lógica lleva tiempo y es muy costosa: encarar una serie de obras que ya fueron declaradas como prioritarias por la Secretaría de Energía, pero que todavía sus pliegos licitatorios no se lanzaron al no estar cerrado es esquema financiero.

"Nos hemos demorado un poco porque queremos definir cómo podemos mejorar la financiación de esos proyectos con ayuda del BID. Esas inversiones tienen que ser pagadas por la demanda a través de un cargo tarifario que, si lo empezás a cobrar después de que terminaste la obra, tiene costos financieros altos", dijo la secretaria de Energía, María Tettamanti, en el reciente Forbes Energy Summit. 

Para eso, más allá de la esperanza de abastecer energéticamente el boom de la minería y Vaca Muerta, la industria está pensando en una serie de paliativos a corto plazo que puedan ir mejorando sus números.

"Lo que vemos en Argentina es el desarrollo de parques híbridos, cómo combinar esa ventaja de eólico y solar. Hay una tendencia hacia ahí por la gran ventaja en la complementariedad de las fuentes. Es un momento donde se necesita pensar muy bien cómo hacer la inversión y la distribución que tendrá la energía a lo largo del día, por eso la complementariedad es súper importante", afirmaron desde una firma especializada en energía eólica a este medio.

"Hace 5 años se empezó a discutir mucho el tamaño de los aerogeneradores, pero hoy pasa más por aprovechar la mejor tecnología para que la turbina sea más eficiente y atender específicamente la calidad de viento que hay en esa zona", agregaron.

Para esta empresa, el offshore -la instalación de aerogeneradores en el medio del mar- todavía está lejos de ser una realidad en el país, a diferencia de Europa. "Lo vemos para después del 2030, por ahora sobra tierra en continente para seguir instalando parques. Además, hay una situación regulatoria que no está tan desarrollada en Latinoamérica en ese sentido. Hace falta pensar una forma muy robusta en la necesidad de leyes y reglas". 

Finalmente, también observan un vector de crecimiento por el lado de la instalación de baterías de almacenamiento que regulen la intermitencia de los parques, una iniciativa que ya se empezó a adoptar paulatinamente.