Bowen revela su plan de los $ 100 millones para crecer un 45% y expandirse
La marca de indumentaria tiene presencia en todo el país y fabrica más de medio millón de prendas al año. En diálogo con Forbes, uno de sus fundadores, Pedro Chirou cuenta los desafíos de la marca y sus deseos de llegar al exterior.

La marca de indumentaria argentina Bowen anunció una inversión de más de $ 100 millones para potenciar el volumen de su producción nacional y digitalizar la operación. La inversión forma parte de un plan de crecimiento que se centra, en una fuerte inversión en tecnología, apuntando a una reforma estructural de los sistemas con el foco puesto en la omnicanalidad y complementar la experiencia física con una experiencia digital genuina y efectiva. 

Parte de la inversión perseguirá el objetivo de hacer crecer en un 45% el volumen de prendas para satisfacer una demanda creciente. “Por la pandemia, hubo mucha demanda contenida. Por otro lado, este auge se debe también a que la gente está viajando menos al exterior e invierte ese dinero en consumo”, sostiene Pedro Chirou.

Textil

Hoy la marca produce 95% de su colección en Argentina a través de una aceitada red de proveedores textiles, de calzado y accesorios, desde puntos tan diversos como Olavarría, Arrecifes, Pergamino o Rosario. Emplean de manera directa a 120 colaboradores -más del 50% son mujeres--, tanto en oficinas como en tiendas y generan aproximadamente 1300 empleos indirectos en todo el país, incluyendo los relativos a comercio, servicios, insumos y demás. 

Bowen opera mediante 11 locales propios, 12 franquicias, 4 outlets manejados por la marca y más de 65 tiendas multimarca, donde venden sus productos. Poseen también una tienda de e-commerce propia, que ya concentra más del 10% de sus ventas y está en sólido crecimiento luego de la pandemia.

La marca apalancó su crecimiento de la mano de socios industriales estratégicos en cada rubro, con una relación de más de 20 años con proveedores como Alpargatas, Santista, YKK; Apholos, Procesadora Virasoro, Amesud, Tavex o Ricoltex, entre otras, aportando de manera sostenida al desarrollo de la industria nacional, la promoción y capacitación del oficio textil y la generación de empleo genuino.

 

“Estamos preparando la empresa para las nuevas épocas. Vemos una oportunidad de crecer y consolidar los casi 30 años de la marca. Hemos enfrentado desafíos, pero nos gratifica saber que logramos desarrollar una marca bien establecida y con potencial de crecer aun más. Apostamos al país, queremos exportar y seguir creciendo”, comentaron Pedro Chirou y Martín Stok, los socios fundadores. 

El recorrido de Bowen

La marca surgió a fines de los 80s pero se consolida a mediados de los 90s, asociada a nombres emblemáticos del sector como Federico Alvarez Castillo, uno de los socios del emprendimiento original. Luego de un año, dos de sus socios, Pedro Chirou y Martín Stok, compraron las acciones al resto de los 7 integrantes originales de Bowen y continuaron con la marca hasta hoy. 

Al compás de los vaivenes de una Argentina pendular, el próximo paso de la marca fue la presencia en shoppings, y así en el año 1995 abren su primer local en Alto Palermo, un segundo en Alto Avellaneda y un tercero en Unicenter, que actualmente sigue siendo de los más elegidos y uno los que registra mayores ventas dentro de su red comercial.

Hoy, 27 años más tarde y con un concurso de acreedores que los marcó fuerte pero que superaron en el 2002, Bowen se consolidó como una marca líder del mercado local, con presencia en las principales plazas de Argentina. El próximo paso es exportar, tarea para la cual ya hay algunos proyectos en carpeta, para comenzar en Uruguay, Paraguay y Chile, pero con la aspiración de llegar a toda la región.

Bowen busca plasmar el espíritu industrial con fuertes influencias urbanas y del rock y con algunos toques de inspiración londinense. Hoy la colección incluye una línea casual (de básicos atemporales), una Smart (más fashion) una llamada Rock (con el ADN puro urbano), las recientes incorporaciones de underwear (como segunda piel en productos como remeras, boxers, medias) y la línea Relax, con productos cómodos y versátiles.

La marca apunta a un espectro sin género -for everyone-, como lo define uno de sus socios, con prendas para uso genérico, que invitan a todos a sumarse. La marca supo tener a través de los años embajadores emblemáticos como el Chino Darín, pasando por modelos e influencers europeos e internacionales. Sus dos ejes de posicionamiento de marca hacia delante pivotan sobre la diversidad y la sustentabilidad. 

Aumento de precios

El empresario se refirió también a los dichos del presidente Alberto Fernández de los últimos días, en los que atacó a los empresarios del rubro textil. En una entrevista radial, se refirió a los aumentos de prendas de vestir y calzado, el rubro del INDEC que más subió en el último año (73,4%): “Hay un desmadre de los precios, los protejo, no dejo entrar productos de China y los precios no paran de subir, se vuelven en contra de la gente”.

“En la último mes está muy en boga el tema textil porque fue uno de los rubros que más aumentó”, dice Chirou, quien reconoce que desde Bowen vienen de hacer un aumento interanual cercano al 70%. La razón del incremento es multicausal, según el empresario.

Por un lado -introduce- el aumento de los commodities. “Nuestra principal materia prima es el algodón, que subió en el mundo un 80% en dólares. El resto de las que usamos tuvo un 40% en dólares. Por otro lado, hay que ir un poco más atrás. Allá por 2018 funcionamos de materia deficitaria y toda la parte salarial en la industria se atrasó. Entonces, post pandemia estamos en un nivel de actividad muy buena y se están recomponiendo esos salarios”.

También hubo tiempo para hablar de la inflación, a la que definió como un “problema mundial”. “En las actividades como la nuestra, en la que que tenemos mucha incidencia de commodities, hace que sea un combo demasiado fuerte”, refuerza.