Ricardo Arriazu, uno de los economistas más prestigiosos y escuchados por el Gobierno, detalló cuáles son los principales riesgos que se afrontan hoy en día. El economista se refirió a cierta euforia y falta de certezas en la economía argentina en el contexto actual.
Fue en el marco de la tercera edición del Perspectivas Summit de Cohen Aliados Financieros, que reunió a expertos en finanzas, economía y negocios, En concreto, Arriazu sostuvo que el país se encuentra en una "situación sólida" a pesar de que "faltan un montón de reformas". No obstante, aclaró que "el peligro más grande" que existe es "una crisis internacional o la política en Argentina".
"Si mantenemos los equilibrios macroeconómicos, solamente evitando los daños negativos, Argentina duplica la tasa de crecimiento", concluyó Arriazu, socio fundador del Estudio Arriazu Macroanalistas, durante el panel Decisiones en momentos de incertidumbre.
Por otro lado, Adrián Rozanski, director de la consultora 1816, opinó en el panel Fase 3 de la política económica: oportunidades y riesgos sobre la estrategia del gobierno argentino respecto a la política económica presente, centrada principalmente en la desinflación más que en la acumulación de reservas.
A pesar de que el Fondo Monetario Internacional (FMI) exige metas específicas, comentó que Javier Milei y su equipo se encargaron de alcanzar rápidamente el éxito político. "Me da la impresión de que no es la decisión que hubieran tomado otros, pero si el gobierno cree que lo único que importa es desinflar, hasta acá les está yendo bien", valoró en cuanto a la eliminación del déficit fiscal y otros índices.
Sin embargo, el ejecutivo señaló que la verdadera preocupación radica en cómo el mercado internacional percibe esta política y las posibles tensiones con los objetivos del FMI, que podrían generar incertidumbre.
Por su parte, el economista José Siaba Serrate, titular del Estudio Siaba Serrate, meditó sobre el escenario global, que podría impactar directa o indirectamente en la economía argentina y arruinar algunos planes de la actual administración.
Puntualmente, hizo referencia a la guerra arancelaria iniciada por el presidente estadounidense Donald Trump, quien "vino dispuesto a instalar un nuevo orden internacional, pero lo único que logró fue un gran desorden".
En esta línea, se mostró preocupado por el deterioro de la confianza global y advirtió sobre la fragilidad del sistema si se produce una nueva crisis. Aún así, destacó: "A Trump le encantaría aplicar nuevos aranceles, pero eso ya no es viable. No lo van a frenar las instituciones, lo va a hacer el mercado".
