En el complejo contexto del emprendedorismo de América Latina, Adriana Barbosa se destaca como una figura clave en la lucha por la inclusión y equidad racial en el ámbito laboral. Directora ejecutiva del Instituto Feira Preta, esta brasileña fue reconocida por la revista TIME entre las 18 líderes globales que están transformando el mercado laboral racial. Su participación en el Foro Económico Mundial como la primera mujer negra en ser nombrada Innovadora Social del Año en 2020 y su rol en la Red Schwab como emprendedora social reflejan su compromiso con la promoción del impacto social y la economía creativa en Brasil y toda América Latina.
Recientemente, el Instituto Feira Preta, en conjunto con CAF, presentó un estudio innovador sobre el afroemprendimiento en Latinoamérica, revelando datos significativos sobre la situación de los emprendedores afrodescendientes. Entre sus hallazgos más destacados, el estudio señala que, en Argentina, donde apenas el 0,7% de la población se reconoce afrodescendiente, el 62% de los afroemprendedores consideran que los negocios deben abordar temas raciales, mientras que un notable 90% cree que las empresas deberían involucrarse activamente en estas cuestiones. A pesar de la riqueza de creatividad y resiliencia presentes en estos emprendedores, las barreras financieras siguen siendo un obstáculo considerable, especialmente para las mujeres, que representan el 80% del ecosistema afroemprendedor y enfrentan desafíos significativos en términos de ingresos. En esta entrevista, Barbosa analiza el presente y el futuro del afroemprendimiento en la región.
-Como directora ejecutiva del Instituto Feira Preta, ¿cuáles fueron los logros más significativos que lideró hasta ahora?
Han sido innumerables, pero quiero destacar la oportunidad de llevar la tecnología social de Feira Preta a otros países. Sólo este año hemos estado en Estados Unidos, Reino Unido, Francia, Argentina, Colombia, Bolivia, Burkina Faso, Ruanda, Panamá y Perú. Y queremos ampliar aún más este impacto en los próximos años, especialmente a países con presencia de la diáspora africana.
También quiero mencionar la creación de Feira Preta Cria, antes conocida como Afrolab, que ha permitido la formación creativa y empresarial de personas negras y otras minorías de la sociedad. De este modo, estamos creando un ciclo de formación que termina en una experiencia práctica enriquecedora, ya sea en el Festival Feira Preta o en los eventos de Feira Preta Pocket.
-Según el reciente estudio de CAF, Feira Preta y Plano CDE, ¿qué desafíos específicos enfrenta el afroemprendimiento en Argentina?
El afroemprendimiento en Argentina enfrenta desafíos únicos. Una de las principales barreras es el acceso al crédito formal: según el estudio, más del 60% de los emprendedores afro se financian a través de recursos propios o informales, como familiares y amigos. Esto refleja una exclusión sistemática de los sistemas financieros tradicionales. Además, la informalidad afecta a una gran mayoría, limitando su acceso a beneficios fiscales y protecciones legales. Otro reto crítico es la discriminación racial: el 36% de los emprendedores afro reportan haber sufrido prejuicios por parte de clientes. A esto se suma la falta de políticas públicas específicas y la escasa visibilidad de esta comunidad en el ecosistema empresarial del país
- ¿Qué diferencias observa entre las experiencias de afroemprendedores en Brasil y Argentina?
La principal diferencia radica en el reconocimiento social y las políticas de apoyo. En Brasil, el movimiento afroemprendedor está más consolidado gracias a iniciativas como el Instituto Feira Preta, que han fortalecido la identidad afro en el mercado y fomentado redes de apoyo. Por otro lado, en Argentina, aunque los afroemprendedores están creciendo, aún enfrentan una mayor informalidad y desconocimiento de sus derechos. Además, la autoidentificación como afrodescendiente es menos común en Argentina debido a años de invisibilización histórica, lo que dificulta la construcción de comunidades empresariales unificadas y el acceso a recursos específicos.
-El informe señala que las mujeres son protagonistas del ecosistema afroempresarial. ¿Qué políticas o programas considera necesarios para cerrar las brechas de ingresos que enfrentan?
Las mujeres afroemprendedoras necesitan programas que aborden su doble vulnerabilidad: la discriminación racial y de género. Es fundamental implementar políticas de microcréditos específicos para mujeres, acompañados de mentorías y capacitaciones técnicas. También es clave promover campañas que reconozcan y visibilicen el valor de sus negocios en sectores como moda, belleza y gastronomía, donde predominan. Además, se deben crear redes de apoyo que faciliten el networking y den acceso a mercados más amplios.
- ¿Qué importancia tiene la autoidentificación como afrodescendiente en la construcción de un negocio exitoso?
La autoidentificación es clave para empoderar a los afroemprendedores. En Argentina, donde la identidad afro ha sido históricamente marginada, reconocer y valorar esta herencia cultural permite a los emprendedores diferenciarse en el mercado. Además, fortalece su conexión con comunidades afines y atrae a consumidores interesados en productos auténticos y éticos. Más que un acto individual, es un movimiento colectivo que redefine el lugar de los afrodescendientes en la sociedad y abre puertas a nuevas oportunidades.
- El acceso al crédito sigue siendo un reto importante. ¿Qué soluciones estructurales propone para mejorar esta situación?
Se necesitan programas de microcréditos específicos para afroemprendedores, además de la simplificación de trámites y requisitos para acceder a financiamiento formal. También es fundamental fomentar la inclusión financiera a través de talleres de educación financiera y alianzas con entidades bancarias que reconozcan las necesidades de esta población. Estas acciones deben integrarse en una estrategia más amplia que combata la exclusión sistemática
-¿Cómo influye la identidad cultural afro en los productos y servicios ofrecidos por las personas emprendedoras afrodescendientes?
-La identidad afro se manifiesta de manera vibrante en productos y servicios. En sectores como la moda, la gastronomía y el arte, los afroemprendedores traen una autenticidad que conecta con sus raíces culturales. Este enfoque no solo celebra su herencia, sino que también añade valor único en el mercado, atrayendo a consumidores interesados en experiencias auténticas y diversas.
-¿Qué rol juega el emprendimiento en la preservación y difusión de las prácticas culturales afro?
El emprendimiento es un vehículo poderoso para preservar y difundir la cultura afro. A través de sus negocios, los afroemprendedores revitalizan tradiciones como el uso de textiles, recetas ancestrales y prácticas artísticas que podrían haberse perdido. En Argentina, donde la cultura afro ha sido históricamente invisibilizada, estas iniciativas son cruciales para mantener viva la memoria y el orgullo de esta comunidad.
-En el estudio, el 36% de los afroemprendedores en Argentina reporta haber sufrido discriminación racial por parte de clientes. ¿Cómo cree que se puede educar al mercado para reducir esta problemática?
Combatir la discriminación racial hacia los afroemprendedores requiere un enfoque integral que combine educación, visibilización y acción desde diferentes sectores de la sociedad. Desde una perspectiva educativa, se debe incluir en currículos escolares y en programas de formación corporativa contenidos sobre historia afroargentina, racismo estructural y la importancia del respeto por las diferencias culturales. Esto ayuda a construir una base de respeto mutuo desde una edad temprana y refuerza la empatía en espacios laborales y comerciales.
Por otro lado, los clientes y consumidores deben estar expuestos a experiencias que resalten la calidad y autenticidad de los productos y servicios afrodescendientes. Espacios como ferias, mercados culturales o campañas de marcas grandes aliadas con emprendedores afro pueden ser vehículos efectivos para crear conexiones positivas. Por último, es vital que las instituciones públicas y privadas asuman un rol activo en la regulación de prácticas discriminatorias. Implementar protocolos claros para denunciar y sancionar casos de racismo en contextos comerciales es un paso necesario hacia una sociedad más inclusiva y equitativa.
-¿Cómo pueden los negocios liderados por afroemprendedores convertirse en agentes más visibles de transformación social?
Las empresas lideradas por afroemprendedores tienen en común la capacidad de reinventarse e innovar a través de la valorización cultural. Para que se conviertan en agentes más visibles de transformación social, necesitamos políticas públicas que valoren al afroemprendedor y toda la red de apoyo que ya existe en la comunidad, con el objetivo de dar visibilidad a las personas, demandas e iniciativas negras.
-¿Qué estrategias recomienda para que las personas afroemprendedoras puedan acceder a redes de socios y alianzas estratégicas?
La creación de una red de apoyo se produce gradualmente y es fundamental para el crecimiento empresarial, especialmente cuando pensamos en la comunidad negra, ya que permite el intercambio de experiencias y conocimientos. Una estrategia importante es participar en programas y eventos dirigidos a los afroempresarios y estar abierto a conocer gente nueva.
-La formalización de negocios es un desafío importante en Argentina. ¿Qué incentivos o políticas podrían fomentar este proceso entre los afroemprendedores?
La tasa de formalización empresarial en Argentina (45%, según la encuesta) refleja directamente los retos a los que se enfrenta la población negra, especialmente la falta de acceso a recursos y oportunidades. A menudo, emprender es una necesidad para mantener el hogar y el camino para crear una empresa se acelera por la urgencia de ingresos, por lo que factores como la formalización acaban dejándose para más adelante para priorizar la parte operativa. Para superar este reto, creo que es importante desburocratizar los procesos, para que sean más accesibles y sencillos de llevar a cabo en el día a día.
-¿Qué rol deberían jugar las grandes empresas y las instituciones financieras para apoyar a los afroemprendedores?
Pueden desempeñar un papel importante cuando pensamos en la prosperidad económica de la población negra, sobre todo donando recursos a iniciativas dirigidas al empresariado negro y también valorando los productos y servicios creados por los afroempresarios.
- ¿Cómo ve el futuro del afroemprendimiento en América Latina, considerando los datos y desafíos expuestos en el estudio?
A pesar de enfrentar aún desafíos como el difícil acceso al crédito, la desigualdad racial y la falta de acceso a oportunidades, el afroemprendimiento en América Latina tiene mucho potencial para crecer y desarrollarse, especialmente si pensamos en el consumo de la población negra, que valora la cultura, la innovación y los productos y servicios de los afroemprendedores. A medida que esta conciencia crece, también lo hace el impacto del afroemprendimiento en la economía a escala global y el reconocimiento de su importancia.
-Si tuviera que priorizar una única política pública para promover el afroemprendimiento en Argentina, ¿cuál sería?
La creación de una política pública para promover específicamente el empresariado negro en Argentina en varios frentes, como el acceso al crédito, la educación empresarial y la formalización de las empresas. Aunque ya existen iniciativas dirigidas al emprendimiento, la falta de visibilidad y apoyo a la población negra dificulta el crecimiento de los emprendimientos liderados por personas negras.
-¿Qué mensaje le gustaría transmitir a los jóvenes afrodescendientes que buscan emprender en un entorno lleno de barreras estructurales?
Sueña en grande y no te rindas a pesar de las barreras que encuentres en el camino. Aunque sea un camino aún más difícil para los afroempresarios, tenemos que valorar nuestras raíces a través de la cultura, la creatividad y la innovación y fortalecer nuestra comunidad. Crea redes de apoyo que puedan ayudarte en las distintas etapas de la iniciativa empresarial y no tengas miedo de pedir ayuda.