La startup uruguaya Ahorra Fácil opera con una idea clara: ayudar a las personas a ahorrar en sus compras diarias y acercar a las grandes marcas a sus consumidores reales, usando la tecnología como puente entre ambos mundos. El sistema es sencillo, las marcas activan descuentos en determinados productos y cualquier persona puede aprovecharlos comprando en el comercio que prefiera. Luego, basta con enviar una foto del ticket de compra para acumular un monto que —al llegar a $100— se convierte en cashback directo a su cuenta bancaria.
A diferencia de otros programas de beneficios, Ahorra Fácil no entrega puntos ni descuentos indirectos: devuelve dinero real al bolsillo del consumidor. En promedio, los usuarios logran ahorrar unos $200 por mes, aunque algunos han superado los $3.000 acumulados. "Es una forma de democratizar los descuentos. Queremos que cualquier persona, esté donde esté, pueda acceder a promociones y que ese beneficio le llegue de verdad", explicó Josemaría Motta, cofundador de la empresa.
Todo comenzó en España, cuando Motta y Luis Estrada se conocieron cursando un MBA que los impulsaba a emprender. Allí observaron cómo funcionaban los modelos de cashback en Europa y notaron que en Latinoamérica había una oportunidad: el sistema apenas existía o estaba poco desarrollado. Entonces —con la incorporación de Guillermo Jude como tercer cofundador—, pusieron en marcha Ahorra Fácil.
La primera versión fue simple pero efectiva. Los usuarios enviaban fotos de sus tickets por WhatsApp, y el equipo procesaba toda la información en una hoja de cálculo. Esa validación temprana les permitió confirmar que la propuesta funcionaba y lo que empezó como una prueba fue creciendo con fuerza: ya cuenta con unos 50.000 usuarios registrados y más de 500 productos con promociones activas. Además, cerró una ronda de inversión por US$ 400.000.
De los descuentos al valor de los datos
Con el modelo de cashback en funcionamiento, los fundadores de Ahorra Fácil identificaron una segunda oportunidad de negocio: convertir los tickets enviados por los usuarios en una fuente rica de información sobre hábitos de consumo. "Cada ticket nos dice mucho más que si un producto se compró o no. Nos muestra patrones de consumo, nos permite entender perfiles y dar valor comercial a las marcas", explicó Motta.
A partir de esa información —hasta entonces poco accesible para las marcas de consumo masivo, acostumbradas a operar a través de intermediarios— Ahorra Fácil piensa en generar reportes que permiten tomar mejores decisiones de marketing, como qué productos se compran juntos, en qué momentos del mes o en qué zonas del país. "Por ejemplo, sabemos que las personas que compran asado los fines de semana tienen tendencia a comprar helado", agregó.
Hoy, con un equipo de apenas siete personas —incluyendo a los tres cofundadores, dos encargados de atención al cliente, un desarrollador y un analista de datos— Ahorra Fácil se encuentra en una etapa clave: escalar sin perder precisión. Parte de los fondos de la reciente ronda de inversión, que ascendió a US$ 400.000, se destinan justamente a ese objetivo. Ya automatizaron la lectura de tickets mediante inteligencia artificial, y ahora avanzan en aplicar machine learning al análisis de datos. También están desarrollando una app que complementará el canal de WhatsApp y permitirá a los usuarios visualizar más fácilmente las promociones activas. La meta es clara: consolidar Ahorra Fácil no solo como una herramienta de ahorro, sino también como una plataforma de insights estratégicos para marcas de consumo masivo.
Actualmente, la plataforma trabaja con 18 marcas como Danone, El Emigrante, Ottonello, Sarubbi y Schneck y más de 500 productos con promociones activas.
Planes de crecimiento y foco regional
Aunque el foco actual está puesto en consolidar la operación local, Ahorra Fácil ya mira con atención a nuevos mercados. Chile aparece como el primer destino natural para expandirse, debido a su madurez digital y la familiaridad de sus consumidores con modelos similares. "Es un país moderno, con un consumidor muy parecido al uruguayo y con una cultura desarrollada de cashback", afirmó Motta.
La meta es comenzar ese desembarco hacia fines de 2025, siempre que el crecimiento local continúe firme. Hoy, Ahorra Fácil ya tiene usuarios en todo el país y apunta a ampliar su base hasta alcanzar al menos medio millón de personas activas este año. "Apuntamos a ese millón de uruguayos que usan tecnología y estarían dispuestos a usar Ahorra Fácil", explicó.
A cinco años, el objetivo es más ambicioso: convertirse en una empresa de referencia en Latinoamérica en materia de ahorro directo para consumidores y análisis de datos para marcas. "Queremos ser el puente entre las grandes marcas y sus consumidores reales", concluyó Motta.