La Refinería La Plata cumplió 100 años. El complejo más grande del país, y uno de los más importantes de Sudamérica, reafirmó su lugar estratégico con cifras que lo colocan entre los mejores del mundo. Este año, fue reconocida como la mejor refinería de Latinoamérica por la Latin America Refining Technology Conference (LARTC) y ponderada por la consultora Solomon entre las más eficientes a nivel global.
El aniversario tuvo como protagonista al presidente de YPF, Horacio Marín, quien destacó el valor histórico del lugar, pero también el salto que representa para el futuro: "Hoy celebramos los 100 años de la Refinería La Plata. Recordamos al ingeniero Enrique Mosconi y a toda la gente que hizo posible este proyecto. Pero también reivindicamos los valores que guiaron aquella gestión, que son los cimientos sobre los que estamos construyendo el futuro de nuestra querida YPF".
El recuerdo personal de Marín, que creció en la zona, marcó un tono distinto: "Recuerdo ver la antorcha encendida cientos de veces, caminando desde mi casa al colegio por la calle 47. La Refinería La Plata ha sido la semilla del desarrollo de toda la región. Quienes nacimos en esta zona la llevamos como símbolo del progreso industrial".
Transformación e influencia en la comunidad
Desde su inauguración en 1925, bajo la visión del general Enrique Mosconi, la planta cambió la forma de producir combustibles en el país y generó un entramado productivo que se extendió por La Plata, Berisso y Ensenada, con impacto directo en el empleo, la formación técnica y el desarrollo de proveedores. @@FIGURE@@
Hoy, más de 4.000 personas trabajan a diario en el complejo. La articulación con universidades, escuelas técnicas y pymes construyó una red que trasciende la operación industrial. La refinería también es parte de la identidad local y, por eso, el centenario se vivió como una suerte de celebración compartida.
Producción, tecnología y su impacto en números
En términos de producción, los números marcan un nuevo ciclo. En agosto de este año, el complejo procesó más de un millón de metros cúbicos de crudo en un mes, una cifra récord dentro de su rica historia. Su capacidad actual supera los 210.000 barriles diarios, y más del 70% del crudo procesado proviene de Vaca Muerta. @@FIGURE@@
El salto tecnológico que atraviesa la refinería va más allá de la infraestructura. YPF impulsa una transformación operativa basada en la agilidad, la eficiencia y la mejora continua. Ese cambio cultural se apoya en decisiones colaborativas y en el uso intensivo de datos. En ese marco, la inauguración de la Real Time Operations Room (RTOR) funcionó como una señal de ruptura: todas las operaciones del complejo se centralizaron en un único espacio, conectado con el Real Time Intelligence Center (RTIC).
El sistema integrado permite reducir los tiempos de respuesta y alcanzar el punto óptimo de operación más rápido. Ingenieros y operadores trabajan de forma coordinada con información en tiempo real, utilizando simuladores, sensores y algoritmos para anticiparse a problemas y mejorar el desempeño.
La hoja de ruta para los próximos 100 años
Este nuevo corazón operativo no es una postal futurista, sino parte del Plan 4x4, la estrategia de YPF para cuadruplicar su valor en cuatro años. En ese plan, la Refinería La Plata se erige como el núcleo industrial sobre el que se apoya la meta.
El objetivo tiene tres ejes: aumentar el margen, maximizar la eficiencia y fortalecer los cimientos de la compañía. La digitalización cumple un rol central: herramientas de mantenimiento predictivo, gemelos digitales, simuladores dinámicos y sistemas de optimización permiten equilibrar la calidad, el consumo y el rendimiento.
La refinería también avanza con una inversión millonaria para incorporar nuevas unidades de proceso y actualizar tecnologías claves. Con una producción que no se detiene, el complejo busca consolidarse como proveedor regional. @@FIGURE@@
Sin embargo, en YPF aseguran que la competitividad futura no se limita a lo técnico. La seguridad, la formación del talento humano y la sostenibilidad forman parte del mismo camino. La eficiencia, remarcan, ya no se mide solo en barriles, sino también en impacto ambiental, uso racional de energía y capacidad de adaptación. Por eso, la refinería incorporó estándares de clase mundial en gestión ambiental y seguridad operativa. Además, avanza en la implementación de sistemas que permiten una trazabilidad completa de los procesos, desde la llegada del crudo hasta la distribución de combustibles.
Lejos de mirar al pasado como un punto de llegada, en YPF lo toman como un punto de partida. La historia, dicen, inspira. Pero la meta está puesta en lo que viene: competir en el mundo, con producción nacional, tecnología propia y una cultura que prioriza el trabajo en equipo. La Refinería La Plata se renueva, se actualiza y empuja el pulso productivo de toda una región.