No es lo mismo trabajar bajo presión que bajo tensión: la diferencia entre rendir al máximo o quebrarse por dentro
Existen equipos que, ante la exigencia, se fortalecen. Otros, frente a las mismas demandas, se desgastan, se fragmentan y terminan apagándose. La diferencia no siempre está en los objetivos, los recursos o el contexto: está en cómo se experimenta el esfuerzo.