Antes de la decisión, el presidente ruso dijo que el país reconocería formalmente a los estados rebeldes prorrusos en el este de Ucrania, lo que llevó a Estados Unidos a anunciar nuevas sanciones en la región.
El conflicto internacional presionaría sobre la inflación de EE.UU. y apuraría la política de la Fed sobre el endurecimiento de las tasas de interés. A su vez, el precio del petróleo podría seguir subiendo.
Este último enfrentamiento entre Rusia y Ucrania, el más grave desde el final de la Guerra Fría, ha estado en curso durante varias semanas tensas y muchos creen que Europa está al borde de un gran conflicto.