Del aula a la realidad: la historia de cuatro amigos que fundaron la fintech que busca revolucionar las finanzas de las pymes
Con una inversión inicial de más de US$ 300.000, Lorenzo Sacerdoti, Benjamín Durruty y Maximiliano Sánchez fundaron Cresium en 2024, con el objetivo de convertirse en un neobanco en el corto plazo. Proyectan cerrar el año con 500 clientes activos y US$ 1 millón de facturación.

Cecilia Valleboni Forbes Staff

Lo que comenzó como un proyecto universitario en las aulas del Instituto Tecnológico de Buenos Aires (ITBA) y una amistad cimentada en horas de videojuegos, hoy es Cresium, la fintech que está redefiniendo la gestión financiera de las pequeñas y medianas empresas. Lorenzo Sacerdoti y Benjamín Durruty compartieron cursadas y, más importante aún, una visión. Sacerdoti, con un ADN emprendedor proveniente de su familia, y Durruty, con experiencia en el mercado de capitales, identificaron rápidamente un problema crítico: la gran mayoría de las pymesperdían dinero diariamente por no saber cómo gestionar su flujo de caja de manera efectiva. 

"Siempre supimos que queríamos emprender en finanzas, pero el impulso final vino de ver los problemas reales de familiares y conocidos con sus empresas. No sabían si dejar la plata quieta o invertirla para generar rendimientos", recuerda Sacerdoti. El equipo fundacional se completó con la llegada de Maximiliano Sánchez, con experiencia en la fintech Belo, que se convirtió en el socio tecnológico; y Ignacio Klyver, como encargado de producto. 

Los primeros pasos de Cresium fueron de pura inmersión en la realidad empresarial: entrevistas con dueños de pymes, diagnósticos manuales de flujos de caja y recomendaciones personalizadas. Sin embargo, este modelo, aunque efectivo, no era escalable. La verdadera disrupción residía en la automatización. Era imperativo construir una "cuenta inteligente" que resolviera de forma autónoma lo que consumía cientos de horas operativas. "Nos dimos cuenta de que las pymes no solo buscan rendimiento; quieren ganar tiempo, no olvidarse de pagar una factura, entender en tiempo real su flujo de caja. Esa fue la chispa que encendió Cresium", relata Sacerdoti.

Lorenzo Sacerdoti 

Así nacieron funcionalidades como los Pagos InteligentesCobros Inteligentes, integrados en un Calendario Financiero con Inteligencia Artificial. Esta herramienta anticipa vencimientos, proyecta flujos de efectivo y reduce drásticamente los errores humanos. "Con estas herramientas, recortamos más del 80% del tiempo operativo en pagos y llevamos el riesgo de olvidos prácticamente a cero", explica el CEO. Sacerdoti destaca que la plataforma está disponible para cualquier tipo de pyme, de cualquier sector. La propuesta de valor se centra en automatizar y simplificar el trabajo de todas las personas que interactúan con la parte financiera de una empresa, ya sean dueños, contadores o administradores. "El mundo pyme tiene otro nivel de complejidad, con muchos recursos en simultáneo. Nuestro trabajo está muy enfocado en cómo hacemos para que la labor de todas las personas sea simple con una plataforma simple", explica.

Sobre la adopción tecnológica en las pymes, Sacerdoti observa una división. Mientras las empresas más tradicionales ofrecen algo más de resistencia al cambio, las que tienen dueños de segunda o tercera generación buscan activamente soluciones innovadoras. "Quieren algo más innovador y que sea más simple de usar que el banco de toda la vida", señala.

Hoy, la plataforma trabaja con 165 clientes, y la meta es ambiciosa: proyecta cerrar 2025 con 500 clientes activos y una facturación de US$ 1 millón. La compañía, que comenzó a gestarse en 2023, demandó una inversión más de US$ 300.000 de inversores ángeles y otros actores del sector financiero que vieron en el proyecto no solo una buena idea, sino una herramienta concreta para impulsar la productividad en un país donde cada punto de eficiencia es vital para la supervivencia. "El contexto económico actual juega a nuestro favor: las empresas están hiperenfocadas en proteger sus márgenes y recortar costos. Nosotros ofrecemos exactamente eso: eficiencia y agilidad, sin la pesadez de la banca tradicional", sostiene Sacerdoti. Además, anticipa que para noviembre o diciembre de este año, con el lanzamiento de nuevos productos, iniciarán una nueva ronda de levantamiento de capital. Los fundadores de Cresium proyectan la expansión regional para 2026. "Vemos mucho potencial en países como Chile, Perú y Colombia, pero primero queremos consolidar la operación en Argentina", destaca Sacerdoti. 

El futuro de la industria fintech en Argentina, según Sacerdoti, es "hipercompetitivo", con productos cada vez más "comoditizados". Sin embargo, la diferenciación radica en la Inteligencia Artificial y la automatización. "La diferenciación viene del lado de la inteligencia artificial y empezar a automatizar ciertas tareas que llevan tiempo para, en nuestro caso, las empresas", concluye, reafirmando el compromiso de Cresium de liberar tiempo y capital para que los empresarios se concentren en lo que realmente importa: hacer crecer su negocio.