En medio de la incertidumbre política y económica, el Banco Central de la República Argentina (BCRA) logró un saldo positivo en las operaciones cambiarias durante las últimas dos semanas, marcando un ligero punto de estabilidad en un contexto financiero volátil después de las elecciones presidenciales.
El organismo retomó las compras en el mercado de cambios con una intervención exitosa al absorber más de la mitad del volumen operado en una rueda mayorista, con un total de US$ 195 millones.
Si bien la cifra representa la mayor compra realizada desde el 14 de agosto, en octubre, el BCRA registró ventas netas por US$ 665 millones. En lo que va del año, el saldo negativo asciende a US$ 2.419 millones.
En este contexto, el ministro de Economía, Sergio Massa, ganador de las elecciones presidenciales que afrontará una segunda vuelta en noviembre contra Javier Milei, anunció que los exportadores argentinos podrán liquidar el 30% de sus ventas al dólar CCL, ofreciendo cierta estabilidad en medio de la crisis económica.
No obstante, pese a los intentos del Gobierno por impulsar las exportaciones con el Programa de Incremento Exportador (PIE V), la incertidumbre sigue afectando a los negocios en el país, con problemas para la dolarización de ingresos y un tipo de cambio libre en constante aumento.
Asimismo, el Gobierno enfrenta el desafío de mantener las reservas internacionales, especialmente con la inminente necesidad de pagar una deuda al Fondo Monetario Internacional (FMI).
Concretamente, las reservas internacionales brutas bajaron US$ 700 millones durante la semana pasada, a US$ 24.544 millones el viernes 20, el monto más pobre desde el 22 de agosto. En lo que va de 2023, el total ya cayó US$ 20.054 millones desde los US$ 44.598 millones del cierre de 2022.
