No todos los días aparece un nuevo hiperauto. Por eso, cuando RML Group llevó su prototipo P39 al Supercar Fest, el público se llevó una sorpresa. Tal vez ya notaste que la silueta del P39 resulta familiar. Creado como homenaje por los 40 años de RML Group, este ejemplar toma como base la plataforma del Porsche 992.1 Turbo S. La idea fue combinar las cualidades del 992 para el uso diario con una versión salvaje pensada para la pista.
Michael Mallock, miembro del Consejo de Administración y responsable de la División Bespoke de RML, declaró: "Desde el principio nos propusimos el reto de construir un auto que pudiera cambiar de personalidad con solo pulsar un botón: sereno en la calle, implacable en el circuito. Las cifras hablan por sí solas, pero lo que más me entusiasma es lo intuitivo y seguro que se siente el P39, sea cual sea el entorno".
En colaboración con Litchfield Motors, el motor bóxer biturbo de seis cilindros fue rediseñado con tuberías de admisión y escape más anchas. También optimizaron el sistema térmico para alcanzar 920 CV y 705 lb-pie de torque en los modos Sport y Sport+. Para que nadie termine contra un muro al girar la llave, RML Group incorporó dos modos de conducción extra. El modo húmedo reduce la potencia máxima a 600 CV, y el modo normal la limita a 750 CV, pensado para manejar en la calle.
Paul Dickinson, director ejecutivo de RML Group, agregó: "El P39 es una demostración en movimiento de lo que la división de ingeniería de RML puede lograr. Al integrar aerodinámica activa, un chasis rediseñado y un motor de 920 CV, hemos creado un hiperauto que ofrece un rendimiento implacable en pista, pero que se siente como en casa en la King's Road. Es la expresión más pura de 40 años de excelencia en ingeniería, plasmada en un vehículo que luce nuestra insignia con orgullo".
Aunque el P39 todavía conserva rasgos del 992, rediseñaron la carrocería en fibra de carbono para bajar el peso. La estrella del diseño es el enorme alerón trasero, que rompe con la estética clásica de Porsche en la parte de atrás. Tiene componentes móviles controlados electrónicamente que ajustan la carga aerodinámica según la situación. En modo pista, se acomoda para aumentar esa carga en un 24 %. Y si lo que se busca es exprimir la velocidad en las rectas, el conductor puede activar el sistema de reducción de resistencia aerodinámica, que aplana el alerón y baja la resistencia en un 23 %.
El kit aerodinámico se extiende por todo el auto, incluso en la parte delantera, donde cuenta con un divisor extensible que se desliza 75 mm hacia adelante en modo pista. Esa distancia extra cambia la presión sobre el morro y mejora la precisión del tren delantero en curvas. También suma cortinas de aire en torno a las ruedas delanteras, recortes en los guardabarros, un difusor bajo la carrocería y pasos de rueda ventilados. Con todo ese conjunto, la carga aerodinámica del Turbo S original, que es de 1432 N, sube hasta 5100 N en modo carretera y supera los 6500 N en modo pista a 240 km/h.
Para bancarse la potencia extra y las fuerzas extremas que actúan sobre el auto, fue necesario hacer varios ajustes en el chasis para lograr el mejor rendimiento. Ensancharon la trocha con nuevas bieletas de suspensión, colocaron soportes superiores personalizados para mantener los ángulos de caída correctos y sumaron muelles secundarios, buscando el equilibrio justo entre uso en pista y manejo en calle. El P39 también trae amortiguadores R53 hechos a medida, fabricados por el propio RML Group, junto con un sistema de elevación hidráulica que permite elegir entre dos alturas para la suspensión trasera y tres para la delantera.
RML Group planea mostrar el prototipo del hiperauto P39 en el Supercar Driver Secret Meet, en Silverstone, el 17 de junio. Las presentaciones de verano terminarán en el Festival de Silverstone, del 22 al 24 de agosto. Como lo indica su nombre, esta joya se fabricará en una edición limitada de solo 39 unidades.
*Con información de Forbes US.