Argentina abre el juego y se inicia la era de la Internet Satelital para Starlink, de Elon Musk, y Kuiper de Amazon entre otras
El gobierno, a través del Ente Nacional de Comunicaciones (Enacom, la entidad pública que se encarga de la gestión del sistema audiovisual en el país) aprobó operaciones en territorio argentino a empresas que brindan servicios de internet satelital.

El esperado cambio finalmente sucedió. Este lunes Enacom autorizó el inicio de las operaciones en territorio argentino para Starlink, el sistema de comunicación por satélite propiedad del magnate Elon Musk.

Asimismo, según se recoge en el Boletín Oficial, el ejecutivo también otorgó licencias a la empresa de nanosatélites OneWeb y al proyecto de Internet satelital de Amazon, Proyecto Kuiper, lo que les permitirá del mismo modo comenzar a operar en el país.

La llegada de Starlink a Argentina supone un nuevo paso en la cercana relación entre el presidente del país, Javier Milei, y el consejero delegado de la compañía, Elon Musk. Este último confesó su admiración por el recién llegado mandatario argentino, poniendo en valor sus tesis liberales para el devenir económico de Argentina y el mundo.

Además, Milei adelantó  que se podría producir una visita de Musk a Argentina antes de que concluya el primer trimestre del año. 

Tras su participación en la cumbre del Partido Republicano, el presidente argentino quiere mostrar en actos concretos cómo una apertura regulatoria mejora la calidad y el precio de los servicios. Hay que recordar que tras darle la enhorabuena a Milei por su victoria electoral, Elon Musk expresó su interés en viajar a Argentina con el objetivo de reunirse con el presidente.

El viaje de Elon Musk podría incluir una visita a la provincia de Salta, que tiene un especial interés para el magnate porque le permite conocer de primera mano el negocio del litio en el país, en el que tiene interés por invertir. En dicha provincia se plantea incluso instalar una gran fábrica, relevante para la producción de vehículos de Tesla.

Pese a que Starlink llegó formalmente a Argentina en 2022 mientras estaba en el poder Alberto Fernández. Con la aprobación del decreto de necesidad y urgencia (DNU) impulsado por la nueva administración, se permite la desregularización de mercados argentinos como el del Internet satelital, lo que permite la entrada en el país de compañías extranjeras, como es el caso de Starlink.
 

Javier Milei brindando su discurso en la cumbre del Partido Republicano

“Se trata de satélites que crean una malla que va cubriendo todo el planeta para dar Internet. Son satélites de órbitas bajas que no tienen el delay de los satélites convencionales. De esta forma tienen mas capacidad y velocidad que los hace más parecidos a los servicios que conocemos en los proveedores tradicionales. Nosotros tenemos muchas zonas del país que no están cubiertos por la cobertura terrestre. Son servicios para esos casos donde no llega la infraestructura tradicional y Argentina tiene gran parte de su territorio en esas condiciones, relacionados además con industrias del Agro, minería o energía, además de centros turísticos”, explica Enrique Carrier un reconocido especialista en Telecomunicaciones. 

Estos servicios satelitales son mucho más costosos de los tradiciones aunque llegan a brindar banda ancha a 100MB algo que transformó el mercado. Starlink suele cobrar US$ 100 mensuales lo cual es entre 10 a 5 veces más que los servicios tradicionales. El usuario lo que necesita es la antena en tierra, que el usuario recibe en su domicilio tras realizar la suscripción. La ventaja es que no se depende de tiempos de obra desde que se realiza la oferta comercial que ahora es posible tras las medidas del Enacom. 

Este tipo de servicios entonces son complementarios de los servicios tradicionales como la fibra óptica y el cablemódem y no constituyen una competencia. Se trata de llevar la conectividad allí donde no estaba, para hacer disponible esa red, tan necesaria e indispensable en el mundo moderno de la Big Data y la Inteligencia Artificial.