Dentro del proyecto turístico de Arabia Saudita de US$ 800.000 millones
El reino de Oriente Próximo está en plena construcción: islas privadas, hoteles de lujo, parques temáticos, puertos de cruceros e incluso una estación de esquí en el desierto. La cuestión sigue siendo: si lo construyen, ¿quién va a ir?