La cadena de electrodomésticos Ribeiro se presentó en convocatoria de acreedores para tratar de ordenar su pasivo y encontrar inversores y financiamiento que le permita continuar la actividad. El caso Garbarino como espejo.
Por un lado, se intentará cerrar un acuerdo por inversiones con un grupo extranjero y, por el otro, se presentará un plan de pago de salarios, medio aguinaldo y aportes a la seguridad social adeudados, en la mayoría de los casos, desde hace tres meses.
La gerencia del complejo -propiedad del empresario y ex funcionario del gobierno de Mauricio Macri, Hernán Lombardi- mantuvo una reunión con dirigentes gremiales, a quienes comunicó el cierre de las instalaciones para el turismo a partir de la reestructuración de la compañía.
Ribeiro dejó de pagar salarios, comenzó a cerrar locales, suspendió su sitio de e-commerce y, según trascendió en el mercado de retail, busca urgentemente un socio para capitalizar la compañía.