Google se enfrenta a una superdemanda millonaria liderada por 32 grupos mediáticos
Entre los miembros del grupo, se destacan la austriaca Krone, los grupos belgas DPG Media y Mediahuis, la danesa TV2 Danmark, la finlandesa Sanoma, la polaca Agora, la española Prensa Ibérica y la suiza Ringier.

Google fue demanda por US$ 2.300 millones por 32 grupos mediáticos, incluyendo Axel Springer y Schibsted, por supuestas pérdidas debido a maniobras de la empresa en el ámbito de la publicidad digital.

La medida del grupo, que incluye editores en Austria, Bélgica, Bulgaria, República Checa, Dinamarca, Finlandia, Hungría, Luxemburgo, Países Bajos, Noruega, Polonia, España y Suecia, se produce en medio de una guerra entre los reguladores antimonopolio y las grandes tecnológicas.

"Las empresas de medios implicadas sufrieron pérdidas debido a un mercado menos competitivo, lo que es consecuencia directa de la mala conducta de Google", afirmaron en un comunicado los abogados Geradin Partners y Stek.

 

"Sin el abuso de su posición dominante por parte de Google, las empresas de medios habrían recibido ingresos significativamente mayores por publicidad y habrían pagado tarifas más bajas por los servicios de tecnología publicitaria. Fundamentalmente, estos fondos podrían haberse reinvertido para fortalecer el panorama de los medios europeos", dijeron los defensores.

Como ejemplo, citaron la multa de US$ 250 millones de la autoridad de competencia francesa contra Google por su negocio de tecnología publicitaria en 2021, así como los cargos de la Comisión Europea en 2023.

A través de un comunicado, Google dijo que se opone a la demanda y que no es más que “especulativa y oportunista”. “Google trabaja de manera constructiva con editores de toda Europa... nuestras herramientas publicitarias se adaptan y evolucionan en asociación con esos mismos editores”, añadió.

 

Entre los miembros del grupo, también se destacan la austriaca Krone, los grupos belgas DPG Media y Mediahuis, la danesa TV2 Danmark, la finlandesa Sanoma, la polaca Agora, la española Prensa Ibérica y la suiza Ringier.

Juntos dijeron que presentaron la demanda en un tribunal holandés debido a la reputación del país como una jurisdicción clave para demandas por daños antimonopolio en Europa y para evitar múltiples demandas en diferentes países de la región.