Con 22 años, ya facturan más de $ 200 millones anuales y revolucionaron el mercado de las medias
La idea surgió a partir de ver una oportunidad durante su viaje de egresados y juntos crearon Fox Socks. Este este año, proyectan alcanzar una producción anual de entre unos 250.000 y 300.000 pares.

Todavía no habían terminado la secundaria y ya eran emprendedores. Nicolás Sigal y Tommy Cohen tenían una mirada curiosa e incansable, tanto que se activó durante su viaje de egresados de quinto año y desde ese momento son amigos y socios. Hoy soy los fundadores de Fox Socks, empresa que está cerca de lograr su objetivo de facturar $ 250 millones durante este año.

Aún son estudiantes, apenas rondan los 22, y al mismo tiempo lideran este negocio que está ligado a una pasión de ellos y de los argentinos: el fútbol. “Para hablar del nacimiento de fox Socks tenemos que remitirnos a nuestro viaje de egresados a Europa, en 2018. Allá, Tommy observó que los jugadores utilizaban una pantorrillera para jugar al futbol, en lugar de la media completa. Descubrió que varios de ellos rompían la parte inferior de sus medias y se calzaban en el pie otras, unas novedosas medias antideslizantes”, recuerda Nicolás.

En ese entonces, Nicolás jugaba en las inferiores de Ferro, por lo que no le faltaban conexiones con el mercado deportivo. “A partir de este hallazgo, evaluamos que podría existir un nicho y una oportunidad de negocio focalizada en la innovación tecnológica que se aplica a las medias, con las que se evitan lesiones, formación de callos y ampollas, y además aportan un nuevo grado de confort a los usuarios”, cuenta el fundador.

 

Ambos socios confiesan que todo empezó como un juego. El primer pedido solo fue de 250 medias (la inversión inicial fueron sus ahorros: US$ 800), que, como todos los que recién empiezan, vendieron a amigos y familiares. Pero ese puntapié fue definitivo y ascendente. Para que el emprendimiento funcione, “le pusimos mucho esfuerzo y sacrificio, y logramos realizar una alianza estratégica para fabricar nuestras medias en Argentina. Hoy tenemos que agradecer esa alianza, porque de una manera u otra, logramos vender la idea, y que confiaran en nosotros (dos jóvenes de 19 años en ese momento) y en la promesa de que Fox Socks llegaba para transformarse en un jugador relevante en la industria”, dicen. Y lo están logrando. 

Conocer el mercado

“Por nuestra historia y por nuestra pasión por el deporte, nos gusta definirnos como una empresa fundada por deportistas para deportistas. Sabemos muy bien la necesidad que existe de utilizar medias cómodas y confortables en todos los que practican deportes u otras actividades físicas”, afirman los socios.

Conscientes de las necesidades que impone un emprendimiento, ambos jóvenes eligieron formarse en consonancia al negocio, entonces, Tommy está cursando la carrera de Negocios Digitales en la Universidad de San Andrés, y Nicolás optó por Administración de Empresas en la UADE. “Pero, para encarar un proyecto como este, además hay que sumarle lo que nos gusta llamar la universidad de la calle y la práctica”, sonríen.

Entonces, no dudan en acercarse a empresarios con experiencia y de otros rubros para nutrirse de diferentes miradas. Y a medida que evolucionaba Fox Socks fue también crecía el equipo profesional que los acompaña, todos igual de jóvenes que estos emprendedores. 

 

Como conocedores de lo que querían de un par de medias, estos creadores se enfocaron en tener los mejores materiales, y la tecnología y la calidad adecuadas. “Se trata de medias de muy buena calidad, a las que, luego del proceso de costura, se le suma en la base un estampado antideslizante. Esta tecnología ofrece una mejor fijación del pie en el calzado y previene lesiones de tobillo y ampollas, a la vez que aumenta el rendimiento”, describe Nicolás.

Actualmente, su producto estrella son las medias de fútbol 3⁄4 antideslizantes, pero son muchas las disciplinas deportivas en las se las pueden usar. “Estamos trabajando para que todos los que desarrollan alguna actividad física tengan una media ideal para optimizar su rendimiento en cada una de sus elecciones”, dice el socio. 

Por eso, desarrollaron también una línea de running y soquetes con antideslizante para la práctica de pilates y yoga, además de tapings para prevenir lesiones y/o tratarlas en la rehabilitación.

 

El factor argentino

Emprender en la Argentina no es tan sencillo, “sobre todo porque no hay mucha financiación para emprendedores y hay ciertas trabas burocráticas. Una vez superado eso, el otro desafío que se nos presentó fue la necesidad de desarrollar una marca desde cero. Esto no solo requiere de inversión, sino también de constancia”, reflexiona Nicolás.

“El otro tema es el factor tiempo: trabajar y estudiar requiere de mucha disciplina y organización. Y muchas veces las 24 horas del día no nos alcanzan”, se lamentan. Entonces para hacer madurar la marca se unieron a deportistas profesionales para llegar al público objetivo. Entre los que se sumaron al proyecto están el arquero Franco Petroli, de River; Walter Bou, de Vélez, y Federico Redondo, de Argentinos Juniors.

“Sin dejar de mencionar también que otros muchos jugadores profesionales -algunos de la Selección Nacional, tanto los actuales campeones mundiales como quienes la integraron en otros años- han usado o usan nuestras medias”, afirman orgullosos. 

 

En cuanto al factor argentino, “actualmente uno de nuestros mayores desafíos está en fijar precios y comprender nuestros costos. Producto de la alta inflación, los insumos se incrementan permanentemente, además de los otros costos que requiere el negocio (alquileres, servicios y más)”, detalla Nicolás.

Pero esto no los frena. “Este es el año de consolidación del negocio. Notamos cada vez más cómo la marca está creciendo y resulta cada vez más conocida, por eso para este años proyectamos alcanzar una producción anual de unos 250.000 a 300.000 pares”, resaltan los socios.

“También tenemos como meta incrementar la disponibilidad de nuestro producto para que más consumidores puedan acceder al mismo. Además de nuestro ecommerce y nuestros socios comerciales actuales, queremos ingresar en las tiendas de indumentaria más grandes del país”, anticipa Nicolás.

Además, estos jóvenes quieren desarrollar programas de actividades deportivas con contenido social que estén en consonancia con sus valores. “Queremos transmitirles a los jóvenes que se animen a hacer, porque mucha gente busca un país mejor y apoya a quienes emprenden. Los ayudan a que sus negocios crezcan, ya sea con consejos, contactos, plazos y más”, concluyen Nicolás y Tommy.