Microsoft presentó los balances trimestrales de la segunda parte del año, los cuales decepcionaron al mercado e hicieron bajar el precio de sus acciones.
En primer lugar, la tecnológica registró ingresos por US$ 64.727 millones, un 16% más que en el mismo periodo del año anterior y una cifra alineada con las expectativas de Wall Street.
El total se dividió entre los segmentos Nube Inteligente (US$ 28.515 millones), Productividad y Procesos de Negocio (US$ 20.317 millones) e Informática Personal (US$ 15.895 millones). Año a año, hubo incrementos de 19%, 11% y 14%, respectivamente.
A su vez, la ganancia neta mejoró interanualmente un 10% hasta los US$ 22.036 millones. Sin embargo, el beneficio por acción (EPS, por su sigla en inglés) ajustado de US$ 2,95 no superó las estimaciones de US$ 3,01 del mercado.
“Nuestro sólido desempeño durante este año fiscal habla tanto de nuestra innovación como de la confianza que los clientes siguen depositando en Microsoft”, afirmó Satya Nadella, presidente y director ejecutivo de Microsoft. "Como empresa de plataformas, estamos enfocados en satisfacer las necesidades críticas de nuestros clientes en todas nuestras plataformas a gran escala, al mismo tiempo que nos aseguramos de liderar la era de la IA”, añadió.
A pesar de los sólidos resultados financieros, las acciones de Microsoft cayeron más de un 5% en la rueda posnegociación debido a que los ingresos de Azure, el negocio de nube, se ubicaron por debajo de las previsiones de los analistas de US$ 28.720 millones.
