Medio Oriente está atravesando nuevamente una etapa de alta inestabilidad geopolítica. Israel e Irán, dos de los principales protagonistas de la historia, se encuentran atacándose fuertemente y generando mucha preocupación entre los inversores, incluyendo los argentinos que no quieren que la volatilidad global impacte en el plan económico de Milei.
Este viernes, el ejército israelí confirmó que Irán lanzó numerosos misiles balísticos hacia Israel en una ofensiva ya finalizada, de acuerdo a fuentes oficiales. Las Fuerzas de Defensa de Israel (IDF) reportaron que sus sistemas de defensa interceptaron varios proyectiles y que se mantuvo un estado de máxima alerta nacional durante el ataque.
Además, se dio a conocer que la sección sobre el suelo de la principal instalación nuclear de Irán en Natanz fue destruida, incluyendo infraestructura eléctrica y generadores de energía de emergencia, así como una sección donde se enriquecía uranio hasta el 60%.
En tanto, Irán acusa a Israel de atacar infraestructura civil y zonas residenciales, reportando un alto número de víctimas civiles (más de 70 muertos y 300 heridos, según medios iraníes no confirmados por las autoridades).
"Se trata de una fuerte escalada en Medio Oriente que desafía abiertamente a Donald Trump, quien había pedido en reiteradas ocasiones que no se avanzara en ese frente. De hecho, el presidente estadounidense fue informado de los planes apenas unas horas antes", relataron desde Portfolio Personal Inversiones.
En este contexto, el S&P 500 cayó un 1,1% durante la rueda del viernes, mientras que el Dow Jones retrocedió un 1,8% y el Nasdaq 100, un 1,3%. Asimismo, el índice Euro Stoxx 50 bajó un 1,7% y el DAX alemán, un 2%. En contrapartida, el precio del oro subió un 1,3% por considerarse un activo refugio, a la vez que el petróleo se disparó hasta un 6%.
En el plano local, el Merval en dólares perdió un 3% de valor, mientras que los bonos soberanos en dólares cayeron entre un 1% y un 1,5%. Asimismo, el riesgo país subió un 3,5% hasta los 678 puntos.
A priori, la reacción negativa de los inversores locales se vinculó con la creencia de que podría existir un gran impacto del conflicto de Medio Oriente en la economía argentina. No obstante, los especialistas consideran que todavía no se ponen en jaque los fundamentos que deberían impulsar un crecimiento sostenido a mediano plazo.
"Mientras que la tensión geopolítica se mantenga concentrada en Medio Oriente, creemos que el impacto sobre la macro argentina puede ser reducido (sobre todo luego de que Estados Unidos y China parecen haber interrumpido la escalada del conflicto comercial)", comentó Gonzalo Lacunza, analista en Empiria Consultores.
Incluso podría resultar "beneficioso" para el sector energético, a pesar de tratarse de una situación indeseable, porque la revalorización del petróleo ayudaría a petroleras como YPF, Vista Energy y Pampa Energía, según el experto.
Aún así, la clave para determinar el verdadero impacto se dará a conocer en próximas ruedas. "Si tenemos en cuenta la reacción del precio del petróleo y los mercados a los conflictos recientes en Medio Oriente, el impacto fue más bien acotado y temporario. Una de las cosas para monitorear en los próximos días es si Estados Unidos se verá forzado a entrar en el conflicto", mencionaron desde Balanz Capital.