Fiordos, diseño y el secreto de viaje mejor guardado del norte de Europa
Una travesía entre Oslo y Copenhague para disfrutar de la mejor gastronomía, entretenimiento y descanso a bordo, con precios que sorprenden incluso en una de las regiones más caras del mundo. Una alternativa inesperada para recorrer Escandinavia sin romper el presupuesto.

Escandinavia es conocida por sus fiordos, su diseño de vanguardia y sus precios elevados. Sin embargo, hay un lujo poco visible que sigue siendo uno de los más accesibles de la región. El crucero nocturno en ferry entre Copenhague y Oslo no es solo una manera de trasladarse de una ciudad a otra. Es un minicrucero de 17,5 horas que ofrece restaurantes, espectáculos, bares nocturnos y vistas espectaculares del fiordo de Oslo.

¿La verdadera sorpresa? Con una reserva bien planificada, puede salir más barato que una noche en un hotel en la ciudad.

¿Qué son los ferries de crucero?

En el norte de Europa, los ferries de crucero son una opción muy popular. Más grandes que un ferry común para autos, pero mucho más relajados que un crucero tradicional, estos barcos combinan transporte y ocio en un solo viaje.

Los pasajeros pueden subir con auto, casa rodante o a pie. Una vez a bordo, se encuentran con una variedad de camarotes, restaurantes, bares y opciones de entretenimiento. Como los trayectos nocturnos son extensos, el barco funciona prácticamente como un hotel flotante.

Muchos viajeros los usan como una forma de trasladarse entre Dinamarca y Noruega, mientras que otros los disfrutan como si fuera un minicrucero: llegan por la mañana, recorren un poco Oslo o Copenhague, y por la tarde ya están embarcando para regresar.

La 'Perla Nórdica' en Copenhague espera a los huéspedes para la travesía diaria a Oslo.David Nikel.

 

Pero quizás lo que más define la experiencia de un crucero en ferry es la atmósfera.

La experiencia de viajar de Copenhague a Oslo

A bordo del Nordic Pearl, la combinación de turistas, locales que aprovechan escapadas de fin de semana y familias que van a visitar a sus seres queridos genera un ambiente especialmente animado.

Aunque no todos suben con intenciones de divertirse, el ferry ofrece un salón de espectáculos, bares que permanecen abiertos hasta la madrugada y una gran tienda libre de impuestos. La música en vivo, los concursos de trivia y el público internacional —con el inglés como idioma común— completan la propuesta.

Las familias también encuentran su lugar: hay un programa exclusivo de entretenimiento para chicos, además de una zona de juegos acuáticos pensada para toda la familia, junto a la piscina y los jacuzzis. La oferta gastronómica a bordo es variada, aunque los precios no son siempre accesibles. Los restaurantes a la carta y los buffets suelen ser costosos, pero hay un local de inspiración italiana que ofrece una mejor relación entre precio y calidad. Conviene llegar temprano: no acepta reservas y se llena rápido con pasajeros que buscan opciones más económicas para comer.

Los bares y salones a bordo del 'Nordic Pearl' son del nivel de un crucero. David Nikel.

 

En la cubierta, el solárium cobra vida cuando el clima acompaña. Ya sea que zarpe de Oslo al atardecer o que llegue a la capital noruega al amanecer, la navegación por el fiordo de Oslo se convierte en un momento difícil de olvidar.

Viajar barato por Escandinavia

Durante años, DFDS fue la empresa encargada de la ruta entre Copenhague y Oslo, pero recientemente fue adquirida por la línea de cruceros Go Nordic Cruiseline, de nombre algo llamativo. La nueva compañía renovó por completo los dos barcos, que ahora se llaman Nordic Pearl y Nordic Crown.

Las cabinas van desde opciones interiores con literas básicas hasta suites remodeladas con balcón. Los pasajeros pueden abordar a pie, con bicicleta o incluso en auto o casa rodante.

Como era de esperarse, los precios varían, pero se pueden encontrar ofertas realmente convenientes. Para quienes viajan a pie y optan por una opción simple, las tarifas por un camarote básico suelen ir de US$ 35 a US$ 75 por persona.

Mejor aún, la modalidad de "minicrucero" que ofrece Go Nordic —una noche de navegación, 6,5 horas en Oslo o Copenhague y regreso en el mismo barco— puede costar apenas US$ 25 durante las rebajas.

Si se considera que una noche promedio en un hotel de Oslo o Copenhague supera los US$ 100, el ferry termina siendo una alternativa de transporte que, en comparación, parece gratuita.

La vista del paseo marítimo de Oslo atrae a muchos pasajeros a la cubierta para la llegada y salida del ferry a Copenhague. David Nikel.

 

En una región donde las promociones no abundan, el crucero en ferry se mantiene como uno de los secretos de viaje mejor guardados del norte de Europa.

Otras rutas destacadas de ferries de crucero

La travesía entre Copenhague y Oslo es solo una de las varias rutas de larga distancia que recorren el norte europeo.

Otra opción muy elegida desde Oslo es el viaje nocturno a Kiel, en el norte de Alemania, operado por Color Line. Esta línea cuenta con dos de los ferries de crucero más grandes del mundo, el Color Fantasy y el Color Magic, que incluyen teatros con espectáculos nocturnos, varias propuestas gastronómicas y hasta una galería comercial.

Además, DFDS mantiene su servicio entre Newcastle y Ámsterdam, que volvió a ganar popularidad gracias a su versión de "minicrucero", disponible desde US$ 70 por persona durante las temporadas de descuento.

El Mar Báltico es uno de los destinos más activos para los cruceros. Entre Estocolmo y Helsinki, varios operadores compiten por atraer pasajeros en la travesía de 17 horas que une estas dos capitales nórdicas. En cambio, la ruta entre Helsinki y Tallin también es muy transitada, aunque mucho más corta: el cruce dura solo dos horas.

No todos los ferries están enfocados en la vida nocturna. A lo largo de la costa noruega, las salidas diarias de Hurtigruten y Havila Voyages funcionan como ferries costeros operativos, que transportan correo, autos y residentes entre pequeños puertos desde Bergen hasta Kirkenes.

Aun así, sus paisajes impresionantes y el confort de sus barcos atraen a muchos viajeros internacionales, que reservan el recorrido completo de 12 días ida y vuelta como si fuera un crucero turístico.

Para quienes buscan una experiencia más aventurera, Smyril Line opera un ferry semanal que conecta Dinamarca, las Islas Feroe e Islandia. Con salidas limitadas, el servicio se percibe más como una conexión esencial que como un barco de entretenimiento. Sin embargo, para los viajeros que prefieren una forma más tranquila y evocadora de llegar al Atlántico Norte, se trata de un viaje único y difícil de olvidar.

 

*Con información de Forbes.