Cuál es el mejor espumoso del año, elegido por el reconocido crítico ingles Tim Atkin
El nuevo Millésime 2017, el cual estuvo durante 80 meses en contacto con sus levaduras, obtuvo 95 puntos en el informe anual del crítico ubicándolo como el mejor espumoso de Argentina.

En su Argentina 2023 Special Report, Tim Atkin eligió a Cruzat Millésime como el "espumoso del año". Con 95 puntos, el ícono de la bodega se colocó como el mejor puntuado de su informe anual.

Con 95 puntos, el reconocido crítico Tim Atkin eligió al nuevo Cruzat Millésime 2017 como el mejor espumoso argentino del año.

“Que un crítico internacional como Tim Atkin nos otorgue este reconocimiento es una referencia muy valiosa para nosotros, es afirmar que nuestros espumosos siguen los parámetros de calidad internacional”, afirmó Andrés Heiremans, Gerente General de Bodega Cruzat.

Es el espumoso ícono de la bodega que sólo se elabora en cosechas excepcionales, como lo fue la 2017. Es una bebida ultra premium perfecta para quienes buscan la excelencia y se deleitan con productos exclusivos. Es el resultado de años de recorrido, de dedicación y de trabajo para encontrar la mejor expresión de sus vinos espumosos. 

millesime champagne

“Como la única bodega argentina especializada en la elaboración de espumosos bajo el método tradicional, estos premios son el reconocimiento a una inmensa cantidad de pequeños desafíos que se presentan en el día a día. Es nuestra búsqueda continua de mejorarnos en cada etiqueta que presentamos en el mercado”, dijo Lorena Mulet, enóloga de Cruzat.

Cruzat Millésime 2017: mejor espumoso de Argentina

“La cosecha 2017 fue una vendimia muy reducida en cantidad, pero de una calidad excelente y de gran sanidad”, explica la especialista, y agrega: “Este tipo de cosecha permitió elaborar vinos bases de excelente calidad, con muy buena madurez aromática y gustativa”. En el Argentina 2023 Special Report de Tim Atkin, Cruzat Millésime 2017 recibió 95 puntos, siendo el espumoso con mayor puntaje del país.

 

Cruzat Millésime 2017 estuvo durante más de 80 meses en contacto con las lías. Es de color amarillo dorado pálido con tonos verdosos y aroma a frutos negros, como grosellas, y frutos secos acompañado de sensaciones lácticas. En boca es robusto y complejo, conservando una frescura que se combina con notas de levadura, pan y pimienta blanca, lo que en su conjunto brinda una elegancia magnífica. Su burbuja es fina, cremosa y persistente.