Las exigencias del mercado laboral son cada vez mayores, en parte porque demanda una predisposición hacia el aprendizaje continuo, pero también porque obliga a los talentos a adaptarse a condiciones en plena transformación. Para enfrentar esto es que el reskilling llega a dar nuevas opciones a los colaboradores y abrirles a las empresas la posibilidad de ir adecuando su estructura. “El surgimiento de nuevas capacidades cambió el mundo profesional y lo que se espera del talento. Un ejemplo es la digitalización o el conocimiento big data, el uso y manejo de los datos se convirtió en algo fundamental en la mayoría de los roles”, afirma María Inés Calvo, directora Sr. de People de Visa.

Estas nuevas habilidades requieren de nuevos procesos de aprendizaje, reskilling y upskilling, tanto para los colaboradores actuales como para los futuros. “El upskilling es el proceso de aprendizaje de nuevas habilidades para mejorar el desempeño de nuestra gente, es decir, mejorar los conocimientos y evolucionar las competencias necesarias dentro de un mismo puesto o perfil. Cuando hablamos de reskilling nos referimos al proceso de aprendizaje de habilidades y conocimientos para la adaptación a un nuevo rol”, añade Calvo.

En este sentido, Sabrina Martins, directora de RR.HH. de Alsea Cono Sur, asegura que en contextos volátiles, de incertidumbre o complejidad, “las organizaciones necesitan estar en constante adaptación a esas nuevas realidades”. Y añade: “Permitir que tus equipos adquieran nuevas competencias y habilidades para desempeñarse en cada nuevo escenario es clave”.

Diego Solveira, director de RR.HH. de Ualá, coincide: “El reskilling es una pieza importante para fortalecer la marca empleadora de una empresa. Permite proporcionar oportunidades de desarrollo y crecimiento, y brindar todas las herramientas necesarias para desempeñarse con éxito en un mundo laboral en constante crecimiento y evolución”.

"Es una ventaja competitiva tanto para el perfil profesional capacitado y cualificado para las nuevas tendencias como para la empresa, en la que genera mejor clima laboral, mayor engagement y menor rotación. Para que este camino sea exitoso es clave la convicción personal para animarse a encararlo y salir de lo conocido”, alerta Rocío Mondino, People Manager en Softtek Argentina.

“Vivimos y trabajamos en contextos inciertos, que requerirán en todas las personas de la reconversión y desarrollo de nuevas competencias. La capacidad y agilidad para aprender son determinantes en las posibilidades de desarrollo de carrera, mucho más incluso que un know how determinado. El foco es acompañar no solo el reskilling de lo que hoy necesitamos desarrollar, sino también anticiparnos a aquellas competencias que permitirán evolucionar nuestro negocio al próximo nivel”, destaca Verónica Pittolo, Learning Lead en Naranja X.

Sin embargo, pese a que todos coinciden en que las formaciones son una herramienta demandada y necesaria, no todos perciben su aplicación del mismo modo. “El reskilling y las capacitaciones existen en las empresas, pero no de la forma más eficiente, ya que no favorece la fidelización. En nuestro estudio “El futuro de la fuerza de trabajo mundial”, vimos que el 64% de los directivos afirman que su empresa invierte eficazmente en el desarrollo de sus competencias, y solo el 36% de los trabajadores opinan lo mismo, una estadística que resulta preocupantemente baja”, indica Alexandra Manera, directora de RR.HH. de Adecco Argentina y Uruguay.

“La revolución de las habilidades se está convirtiendo en un tema no negociable para los individuos, ya que las funciones las requieren cada vez más. Se estima que el 58% de los colaboradores necesitará habilidades nuevas para realizar su trabajo. Por eso, resulta fundamental incentivar a toda la fuerza laboral a capacitarse con cursos breves y relevantes para roles y funciones específicas”, afirma Gustavo Aguilera, director de Talent Solutions y People & Culture de ManpowerGroup Argentina.

“Siempre es atractivo saber que la empresa en la que trabajás se interesa no solo por tu desarrollo, sino que también comprende que la continuidad laboral y la rotación ya no son valores antagónicos, y ese es el punto clave del reskilling. Ofrecer programas de capacitación para adquirir nuevas habilidades y conocimientos permite nuevos escenarios para los colaboradores en los que el cambio es parte de la propuesta de valor”, analiza Gustavo Fernández, director de Talento y Cultura de BBVA.

Las organizaciones que hacen foco en el reskilling y en el upskilling también lo hacen “en la transformación, en el crecimiento y desarrollo del talento interno, y esto marca una tendencia dentro del mercado. Habla de compañías que están a la vanguardia y piensan en qué habilidades necesitan desarrollar internamente para lograr sus objetivos”, destaca Verónica Climent, directora de Gestión de Personas y Seguridad en Santander Argentina.

“Formar parte del crecimiento de nuestros colegas es muy importante, no solo como un beneficio para retener el talento, sino también porque nos ayuda a generar espacios adaptados a un nuevo paradigma laboral y del sector de la salud”, indica Ileana Bergés, directora de People Experience de Pfizer para Argentina.

En Quales Group van más allá: “Al apostar por el desarrollo y reskilling de nuestro equipo no solo fortalecemos nuestra cultura, sino que también generamos un impacto positivo en la sociedad al formar y capacitar talentos que escasean”, dice Judith Irusta, Chief Operations & People Officer de la empresa.

Otras compañías piensan tanto en el público interno como en el externo. “Para Byma, la educación es una prioridad. Se promueve la formación permanente de los colaboradores, al mismo tiempo que mediante el programa Bymaeduca ofrecemos una amplia currícula de cursos para potenciar la formación de la sociedad sobre el mundo de las inversiones”, cuenta Fernanda Merlo, gerente de Desarrollo Organizacional y Gestión de Personas de la entidad financiera.

“En Google cada empleado puede reinventar su propia carrera, asumiendo nuevos desafíos y creando proyectos desde cero. Nuestra cultura promueve la innovación y la creatividad, ya sea a través de la capacitación, nuevas experiencias o cambios en los roles. Los empleados cuentan con la quinta parte de su tiempo laboral para dedicarse a proyectos -individuales o colectivos- no necesariamente vinculados con su puesto. Pueden desarrollar ideas propias para crear nuevos servicios y abrirse paso a nuevas oportunidades en su crecimiento”, describe Fernanda Vidueiros, gerente de RR.HH. de Google para Hispanoamérica.

Igual, todavía hay compañías que no terminan de apostar por la enseñanza y la formación en nuevas habilidades. “Los motivos provienen de diversos factores, como la falta de inversión en el tiempo. Corren detrás de las urgencias y no les permite ver más allá del frenesí. Y, cuando lo hacen, presuponen grandes cantidades de dinero y tiempo para llevar adelante procesos formativos, por lo que desisten”, advierte Alan Bustamante, Content Factory Leader en Readiness Global.

Capacitarse: ¿en qué?

En cuanto a los temas, algunos de los enfoques más comunes incluyen “desarrollo de habilidades blandas, capacitación en habilidades digitales, programas de mentorías, certificaciones técnicas, entre otros”, enumera Solveira. “Está probado que reskillear trae beneficios que superan el costo. Invertir en el desarrollo de empleados contribuye a desarrollar su compromiso, la satisfacción de los consumidores, y crear un círculo virtuoso para ir fortaleciendo la marca empleadora”, refuerza Cecilia Bulleraich, gerente de Cultura para Philip Morris International Argentina, Uruguay, Paraguay, Bolivia y Chile.

Los temas que piden los talentos para capacitarse son los relacionados a la tecnología, “ya que siempre hay algo nuevo por aprender o mejorar. La IA impulsa esta necesidad de reskilling”, resalta Valeria Czarnota, Chief People Officer de Interbanking.

“La gente nos pide formarse en las nuevas herramientas tecnológicas para eficientizar procesos y potenciar sus proyectos. Al mismo tiempo, buscan profundizar en las habilidades humanas y blandas, necesarias para liderar equipos y mejorar sus relaciones interpersonales”, suma Florencia Porcelli, directora de RR.HH. de Cervecería y Maltería Quilmes.

“El reskilling también aplica a personas que toda su vida hicieron una cosa y pasarían a hacer otra diferente, por ejemplo, un cajero de una sucursal bancaria conoce muy bien los procesos y los sistemas, pero dándole las herramientas y capacitación necesarias será sin duda un excelente Tester Manual”, ejemplifica María Laura Palacios, VP de la Cámara de la Industria Argentina del Software (Cessi).

Otros temas que piden son: “Herramientas de comunicación, ESG, marketing, liderazgo, gestión de personas y proyectos, entre otros. Los temas relacionados con la inteligencia emocional, el pensamiento estratégico, la creatividad, la resolución de problemas y la toma de decisiones también están en auge”, enumera Nayana Pita, directora de RR.HH. en Thales Latinoamérica. “También se está poniendo foco en el desarrollo de habilidades de liderazgo. Los líderes son clave para derramar la transformación cultural y organizacional, y de ahí la necesidad de expandir sus competencias, habilidades y capacidades”, dicen desde Gire.

¿Son los jóvenes los que más lo piden? No necesariamente, pero sí “quieren desafíos y tienen curiosidad por explorar nuevas oportunidades, sobre todo cuando ven que en la empresa se promueve el desarrollo interno. Los organigramas flexibles y planes de carrera horizontales son atractivos, pero deben ir acompañados por un plan de training enfocado a desarrollarse en la nueva posición”, explica Mario Falguieres, CHRO de Blue Star Group. “El reskilling no se limita a una generación específica.

Es una herramienta clave para cualquier persona que desee mejorar sus habilidades, desafiarse y estar a la altura de los cambios que atravesamos”, dice María de la Paz Del Viso, Head of People de n1u. Gastón Vilachán, líder de Atracción de Talento en Ceta Capital Humano, señala: “Todas las generaciones lo piden, pero no todas piden lo mismo. Hay que saber identificar lo que cada uno busca y necesita. Es muy importante realizar un diagnóstico interno para identificar las necesidades y poder tener una correcta planificación y ejecución de los planes de capacitación. La inversión en el capital intelectual es sumamente importante hoy”.

“Los talentos valoran el reskilling de manera muy positiva. El aprendizaje y el desarrollo personal y profesional son considerados clave para muchos empleados, especialmente los más jóvenes. No solo les permite mantenerse actualizados en el mercado laboral, sino que también les brinda oportunidades de crecimiento y promoción interna”, concluye Sandro Cosentino, Head de Talentos y RR.HH. de Los Grobo.