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Los propios empleados aseguran que trabajar cuatro días por semana mejora la pro
Liderazgo

Más felices, menos agotados e igual de productivos: así trabajan quienes ya disfrutan de la semana laboral de 4 días

Bryan Robinson, Ph.D.

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Una investigación analizó el impacto de reducir la jornada semanal en casi 3.000 empleados de seis países. Los resultados refuerzan lo que muchas empresas ya prueban: trabajar menos días puede mejorar la salud física y mental sin afectar el rendimiento.

25 Agosto de 2025 09.38

La idea de una semana laboral de cuatro días no es nueva, pero en tiempos donde el "trabajo líquido" gana terreno y cada vez más personas buscan equilibrar mejor el trabajo con su vida personal, esta modalidad empieza a tomar fuerza. Hasta esta semana, casi no existían estudios a gran escala que midieran su impacto. Pero una investigación reciente, la más amplia hasta ahora, arrojó resultados que respaldan lo que ya se había visto en pruebas más chicas.

Los beneficios de la semana laboral de 4 días

Entre 27 y 30 empresas —como Kickstarter, Panasonic, Awin y Digible— ya pusieron en marcha semanas laborales más cortas, con distintas modalidades. Y cada vez son más las compañías que se suman. En muchos casos, los propios empleados aseguran que trabajar cuatro días por semana mejora la productividad y reduce la rotación del personal.

Robert Yuen, cofundador y CEO de Monograph, me contó en 2023 que para él no hay dudas: los empleados necesitan más tiempo. Por eso su empresa adoptó la semana laboral de cuatro días. "Una semana laboral de cuatro días les da a los empleados el espacio para cuidarse a sí mismos, brindándoles espacio para su desarrollo personal", dijo. "Desde que esta startup tecnológica implementó la semana laboral de cuatro días en 2019, la satisfacción de los empleados alcanzó un máximo histórico", agregó.

¿Qué muestran los estudios? Una investigación publicada en la revista Academy of Management Journal reveló que trabajar cuatro días por semana no baja la productividad. De hecho, puede mejorarla. Un experimento más amplio, realizado en el Reino Unido en junio de 2022, puso en marcha el mayor programa piloto de semana laboral de cuatro días hasta ese momento. Participaron más de 3300 empleados y 70 empresas británicas.

El ensayo no encontró caídas en la productividad. Al contrario, algunas compañías reportaron mejoras notables. El estudio británico concluyó que reducir la semana laboral libera tiempo para la vida personal, mejora el bienestar de los empleados y, además, los hace rendir más mientras están en el trabajo. El 46 % de los consultados dijo que la productividad de su empresa se mantuvo estable, el 34 % señaló una mejora leve y el 15 % notó una mejora importante.

Un nuevo estudio publicado esta semana en Nature Human Behaviour es, hasta ahora, el ensayo clínico más grande sobre la semana laboral de cuatro días. Participaron casi 3000 empleados de 141 empresas en seis países durante seis meses. Los resultados fueron claros: los trabajadores están más contentos, sufren menos agotamiento, muestran mayor satisfacción con sus trabajos y mejoran tanto en salud mental como física. Además, la productividad no se resiente. Los empleados rinden lo mismo en cuatro días que en cinco.

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Con una semana laboral de cuatro días, los trabajadores están más contentos, sufren menos agotamiento, muestran mayor satisfacción con sus trabajos y mejoran tanto en salud mental como física.

El 23 de julio, Pipedrive difundió su Informe Anual sobre el Estado de Ventas y Marketing, basado en respuestas de 1000 profesionales de 85 países. Según los datos, trabajar cuatro días a la semana se vincula con mejores resultados en ventas y más satisfacción personal. Los vendedores que tienen jornadas de cuatro días son un 8 % más propensos a alcanzar sus metas y son los que más conformes están con su equilibrio entre el trabajo y su vida personal. En cambio, quienes hacen horas extra —más del 75 % de los consultados— suelen rendir peor. La conclusión es clara: más horas no garantizan mejores resultados.

Los críticos cuestionan el último estudio sobre la semana laboral de 4 días

Imagino que muchos de ustedes, al leer esta buena noticia, se ilusionan con la chance de tener una semana laboral de cuatro días en su trabajo. Lamento pincharles el globo, pero hay que decirlo: los estudios previos tienen varios problemas metodológicos. Los resultados positivos entusiasman, claro, pero es importante tener en cuenta que, en su mayoría, se basan en autoinformes sin mediciones objetivas.

Isaac Kohen, fundador y director de operaciones de Teramind —una empresa que se dedica al análisis de la fuerza laboral para detectar riesgos internos y medir la productividad— pone en duda la solidez del último estudio. Por mail, me dijo que la falta de indicadores objetivos sobre la productividad es una falla grave y puede llevar a que algunas empresas tomen decisiones costosas con información incompleta.

Según Kohen, los reportes de productividad que hacen los propios empleados sirven para entender cómo se sienten, pero no alcanzan para justificar un cambio tan grande frente a inversores o directorios. "Cuando el 90 % de las empresas decidieron mantener sus horarios de cuatro días, ¿tomaron esta decisión basándose en métricas sólidas o simplemente en una mayor motivación? La verdadera medición de la productividad requiere analizar patrones de trabajo reales, como el uso de aplicaciones, las tasas de finalización de tareas y la eficiencia del flujo de trabajo", explicó.

Entonces, ¿qué habría que ajustar para contar con datos más confiables y aumentar las chances de implementar una semana laboral más corta? Kohen tiene una respuesta. "Para evaluar correctamente la productividad entre semanas de cinco y cuatro días, las organizaciones tienen que establecer métricas de referencia con el esquema tradicional de cinco días, y después comparar de manera constante el rendimiento cuando se aplican jornadas de cuatro", recomienda.

Según una encuesta de Zippia de 2023, la productividad suele ubicarse entre el 70 % y el 75 %. Además, el trabajador promedio dedica apenas 4 horas y 12 minutos a tareas activas en una jornada de ocho.

Flexibilidad laboral
El trabajador promedio dedica apenas 4 horas y 12 minutos a tareas activas en una jornada de ocho.

Kohen advierte que, sin datos objetivos, las empresas pueden terminar tomando decisiones basadas más en entusiasmo que en evidencia. "Sentirse más productivo y ser realmente más productivo no es lo mismo, y solo una medición rigurosa puede cerrar esa brecha entre percepción y realidad para ver si, de verdad, las semanas laborales de cuatro días benefician tanto a los empleados como a los objetivos del negocio", remata.

Sofia Passova, ex científica espacial y fundadora de StereoLOGIC, también marca un punto clave: antes de reducir la semana laboral, hay que revisar cómo se trabaja. "El objetivo de una semana más corta es ayudar a que la gente trabaje con más inteligencia, no que se mate más", afirma. Y agrega: "La mejor manera de lograr eso es analizar, con datos, cómo mejorar, optimizar y aprovechar al máximo el trabajo que se hace todos los días".

Un resumen final sobre sus posibilidades de una semana laboral de 4 días

Muchos trabajadores creen que trabajar menos días les da más orden, un día libre para desconectar, ocuparse de sus cosas y disfrutar un poco más del equilibrio entre la vida personal y laboral. Una semana laboral de cuatro días podría ser una buena respuesta frente al desgaste que genera el trabajo, siempre y cuando ese día libre no implique bajar el rendimiento ni tomar decisiones costosas sin respaldo.

La clave está en seguir probando. Hace falta un estudio a gran escala que no solo condense cinco días de trabajo en cuatro, sino que también incluya mediciones objetivas además de lo que cuentan los empleados. Que ese análisis pueda mostrar beneficios reales tanto para los trabajadores como para las empresas.

Con más evidencia científica, la idea de trabajar cuatro días por semana ya no parece tan lejana. Puede que no llegue en 2025, pero si la tendencia se mantiene, es probable que se vuelva una práctica habitual mucho antes de lo que imaginamos.

Con información de Forbes US.

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