El gigante estadounidense de software e internet Google ha creado unos robots capaces de comprender órdenes emitidas en lenguaje humano y servir las órdenes de sus dueños, por ejemplo llevándoles comida o material de limpieza.

La firma de Mountain View (California, EE.UU.) compartió con Efe un video en que se ve a estos simpáticos robots, una suerte de torres cilíndricas de color blanco con ruedas y una caja negra en la parte superior que da apariencia de ojos, llevando a cabo tareas menores.

El aspecto innovador de estos robots es que usan inteligencia artificial para "pensar" por sí mismos, es decir, que no han sido programados para llevar a cabo una tarea concreta, sino que son capaces de escuchar la orden de un humano, interpretarla y proceder con una respuesta con base en el mensaje recibido.

Así, por ejemplo, si el humano dice "estoy hambriento, ¿puedes traerme comida?", el robot automáticamente analizará esa frase, la pondrá en contexto y tomará una decisión que ayude a remediar el problema, como por ejemplo llevarle una pieza de fruta o un dulce.

Ese aspecto facilita enormemente la interacción con humanos y les diferencia de otros modelos que llevan a cabo tareas más avanzadas y algunos de los cuales ya se encuentran disponibles en el mercado, pero que responden únicamente a órdenes para las que han sido específicamente programados.

"Google está enseñando a los robots a pensar por sí mismos", esa es la afirmación con la que Harry McCracken presenta su artículo en el medio de comunicación Fast Company. Él ha tenido la suerte de ver cómo los robots de la firma tecnológica son cada vez más útiles y cómo les otorgan una forma de actuar que les hace parecer más humanos.

El redactor de Fast Company pone de ejemplo un robot de Google que se encargaba de llevar a cabo tareas en una pequeña cocina de una oficina en Mountain View (California).Esta máquina de cuerpo blanco tiene un mecanismo de agarre en el extremo de su único brazo y unas ruedas que le permiten realizar su trabajo.

El sistema del que habla McCracken sirve para que los robots de Google comprendan las declaraciones tanto habladas como escritas. De este modo, las máquinas pueden buscar la respuesta acertada más fácilmente para ayudar a los humanos.

Según los ingenieros de Alphabet, el estudio de PaLM-SayCan es la primera vez que los robots han tenido acceso a un modelo de lenguaje a gran escala. En comparación con el software que usaban antes en Google, este nuevo sistema hace que los robots sean 14% mejores en planificar sus tareas y un 13% mejores para completarlas exitosamente.

Dicha tecnología de Google todavía está lejos de lanzarse comercialmente. De momento, PaLM-SayCan está en fase de pruebas, por lo que los usuarios no lo verán en un futuro reciente.