Con una capitalización bursátil de unos 100.000 millones de dólares, MicroStrategy cotiza más de dos veces por encima de sus participaciones en Bitcoin.
El crecimiento del índice fue liderado por las siete grandes compañías tecnológicas, impulsadas por la compañía de Elon Musk, que mostró una ganancia del 3%.
Después de conocerse los datos de un mercado laboral fuerte, los principales índices bursátiles saltaron, aunque no todos los activos se beneficiaron del repunte.
El mercado sigue con un fuerte impulso, pero la caída de las expectativas de ganancias puede ser un indicador de que los inversores deberían ser más cautelosos.
La semana pasada, las acciones estadounidenses alcanzaron niveles récord y el bitcoin superó los US$ 64.000 tras el anuncio de la Fed sobre un ciclo anticipado de flexibilización monetaria.
El índice subió 0,7%, mientras Wall Street espera un recorte a los tipos de interés de la Reserva Federal de Estados Unidos y los inversores calman sus temores de recesión.
Esta fuerte fluctuación se dio por dos motivos: la creciente demanda de chips para abastecer el boom de la inteligencia artificial y a los procesadores viejos, que están quedando obsoletos.
La economía norteamericana dio mejores indicios de lo que se esperaba, con aumentos en las ventas minoristas, bajas en solicitudes de subsidio por desempleo y sólidos resultados por parte del gigante Walmart.
La mayoría de los inversores acuden al Nasdaq en busca de acciones tecnológicas. Pero también hay algunas compras interesantes entre las acciones más pequeñas del Nasdaq en otros sectores.
La caída se produjo después de que el informe de ganancias del martes revelara ventas y ganancias trimestrales más bajas que las previsiones de los analistas, así como un recorte en sus perspectivas para su año fiscal que finaliza en mayo, culpando a "condiciones macroeconómicas volátiles".
Los rendimientos de los bonos también cayeron a su nivel más bajo desde septiembre, ya que la lectura de la inflación subyacente más baja en dos años impulsó a los mercados de renta variable.
Se espera que las principales empresas tecnológicas aumenten sus beneficios en el tercer trimestre un 33%, mientras que el resto del S&P 500 registraría una caída del 9% en los beneficios del tercer trimestre.