En todo 2025, los vencimientos en dólares rondan los US$ 17.300 millones, de los cuales US$ 9.300 millones pertenecen a amortizaciones de capital y US$ 8.000 millones, a intereses.
En el 2025 podría haber ciertos desafíos, tanto para la renta variable como para la renta fija del país. Por esta razón, una buena opción puede ser aprovechar el bajo "canje" e invertir parte de los ahorros en FCI de América Latina.
Una asignación del 2% en Bitcoin ofrece un perfil de riesgo similar al de mantener las acciones tecnológicas de las "Siete Magníficas" en una cartera equilibrada.
Tras una fuerte suba de los activos financieros argentinos y una caída del riesgo país, los analistas creen que el panorama local sigue siendo favorable, pero existen riesgos en el corto plazo.
El Banco de la Reserva de Australia (BRA) todavía no redujo los costos de endeudamiento en este ciclo, por lo que la deuda del país se está preparando para un repunte.
Marc Seidner y Pramol Dhawan dijeron que favorecen los bonos del Tesoro a corto y mediano plazo, pero no los de largo plazo por el potencial de una mayor inflación y por la emisión de deuda extra para financiar los déficits.
Cuando hay crecimiento, las acciones son las grandes ganadoras; cuando hay inflación, el oro sale favorecido; cuando hay deflación, los bonos son la mejor alternativa; y cuando llega la recesión, el "efectivo" domina.
Los inversores podrán armar una cartera que combine renta fija y variable, tanto en pesos como en dólares, para obtener un beneficio económico en distintos horizontes temporales.
Inicialmente, los Bopreales rivalizaban de igual a igual con muchos títulos de deuda soberana por ofrecer un retorno similar y, en principio, ser más "seguros".
Muchos inversores son optimistas y consideran que, tarde o temprano, la situación terminará resolviéndose y todo volverá a la normalidad. Por lo tanto, será mejor enfocarse en cuidar las carteras de inversión.
En los últimos meses, Pampa Energía vendió bonos con vencimiento en 2028 con una tasa de interés del 5,75%, mientras que YPF emitió títulos a 2028 con una tasa del 6,5%.
Después de conocerse los datos de un mercado laboral fuerte, los principales índices bursátiles saltaron, aunque no todos los activos se beneficiaron del repunte.
Esta semana, el magnate les encargó a algunos bancos de inversión, como Bank of America Securities y Mizuho Securities, que empiecen a gestionar una venta de deuda en yenes en el mercado local.