Pocos tenistas se han sentido tan cómodos jugando sobre cualquier superficie como Chris Evert e Iga Świątek. Entre ambas suman 11 coronas individuales de Roland Garros, innumerables títulos de la Asociación de Tenis Femenino (WTA) y rachas récord, en las que se destaca su dominio en las canchas de polvo de ladrillo de todo el mundo. En diferentes generaciones, ambas Testimoniales Rolex han alcanzado la cima del tenis femenino y se han convertido en las reinas indiscutidas del polvo de ladrillo.
De cara a la temporada de tenis 2025, Evert y Świątek se reúnen para compartir una mirada única sobre sus trayectorias hacia el éxito e intercambiar su valiosa sabiduría. "Sigo siendo una princesa; solo hay una reina", asegura Świątek. En primer lugar, hace un guiño a los legendarios logros de Evert, y al mismo tiempo pone de manifiesto la naturaleza respetuosa y humilde de una de las estrellas más brillantes del tenis, que promete seguir los pasos de la estadounidense sobre el polvo de ladrillo. Evert responde: "Probablemente te haya visto mucho más de lo que tú me has visto a mí a lo largo de los años, Iga, y creo que tenemos muchas cosas en común en los aspectos intangibles del juego. La fortaleza mental, la concentración y el hambre que, en mi opinión, son más del 50% del tenis. No te conformás, como otras personas, con ganar uno o dos Grand Slams. Siento que pensás: 'Bueno, ¿y ahora qué?'. Querés jugar mucho tiempo y ganar muchos torneos importantes".
Ambas mujeres poseen un fuerte juego de fondo, con potentes golpes de derecha y un juego de pies preciso, un estilo de juego en el que Evert fue pionera en la década de 1970 y que Świątek ahora adopta décadas más tarde. Świątek se unió a Evert como miembro de la familia de Testimoniales Rolex en 2021, a los 19 años. Ahora, con 23, se sorprende cuando escucha a Evert decir que no logró sentirse cómoda al acercarse a la red o jugar en toda la cancha hasta los 25 o 30 años.
El tema de Roland Garros surge de manera natural. Con este torneo, Rolex completó el calendario Grand Slam de colaboraciones en 2019, tras convertirse en Reloj Oficial de Wimbledon más de 40 años antes, en 1978. Durante esta época dorada del tenis, Evert logró un récord de siete de sus 18 títulos individuales de Grand Slam femenino en las canchas de polvo de ladrillo parisinas, además de ganar dos veces el torneo de dobles. El año pasado, Świątek ganó su cuarto título individual de Roland Garros, y Evert fue la encargada de entregarle el trofeo Suzanne-Lenglen en la misma cancha donde la estadounidense saboreó por primera vez la gloria del Grand Slam en 1974.
El año pasado fue la temporada en la Świątek demostró mayor dominio sobre el polvo de ladrillo hasta la fecha. Llegó a París tras haber logrado dos victorias consecutivas en torneos WTA 1000, en Madrid y Roma, antes de encontrarse en un match point en contra en la segunda ronda de Roland-Garros, un partido que describe como el más difícil de su carrera sobre polvo de ladrillo. Świątek asegura: "Realmente pensé que estaba fuera del torneo. En el tercer set, perdía 2-5 y logré salvar un match point; mentalmente, tenía que estar en mi mejor nivel para siquiera creer que podía remontarlo. Finalmente gané el partido, pero más tarde, en el gimnasio, estuve 15 minutos llorando. Creo que fue el partido más largo que jugué sobre polvo de ladrillo, y me rompió el corazón. Fue el título más significativo de mi carrera por lo cerca que estuve de perder".
"¿No creés que después de un partido como ese estás mucho mejor preparada para el resto del torneo?", pregunta Evert. Świątek responde: "A veces me pasa, pero no esta vez. Mis expectativas eran demasiado altas, no podía aceptar haber jugado un partido así al inicio del torneo que siento como mi casa. No era lógico, pero recuerdo que solo quería trabajar en mi juego porque sentía que podía hacerlo mucho mejor. Sinceramente, sentí que la vida me había dado una segunda oportunidad, así que tenía que aprovecharla".
Evert agrega: "¡Estás siendo muy dura contigo, Iga! ¿Sabés qué aprendí después de una larga carrera? Que no podés estar al 100% mental, física y emocionalmente en cada partido que jugás. Reconocer que estás un poco desconcentrada, que no estás en tu mejor momento está bien, todo es experiencia. He visto que a veces no estás jugando bien, y lográs volver y ganar partidos, mientras que otros jugadores simplemente se decepcionan y se rinden mentalmente. Esa experiencia realmente te ha ayudado a ganar partidos en los que parecía que no ibas a lograrlo. Y es porque sos una campeona".
Es esta mentalidad ganadora la que define a estas dos deportistas excepcionales. La fidelidad de Rolex al tenis abarca varias generaciones, desde las leyendas que han abierto el camino hasta los jugadores actuales que están dando forma al futuro de este deporte. Evert y Świątek hablan con pasión sobre el amplio apoyo de la empresa relojera suiza, que se reforzó aún más al convertirse en Reloj Oficial de la WTA y del WTA Tour el año pasado. Świątek afirma: "Cuando entré en el circuito, mi vida era un poco caótica, y no estaba segura de que fuera el lugar adecuado para mí. Mi colaboración con Rolex me hizo sentir que formaba parte de algo más grande, que era parte de una familia. Todo el legado que aporta Rolex me hizo sentir que estaba escribiendo una historia que excedía las canchas de tenis, que había alguien que creía en mí".
"Rolex es una familia muy unida", agrega Evert. "Me siento muy honrada de ver mi nombre junto al de grandes figuras como Iga y ser parte de un grupo que también incluye a iconos del deporte como Rod Laver, Arnold Palmer y Roger Federer. Es un grupo muy selecto, y siento que Rolex elige a deportistas de larga trayectoria, confiables y con una calidad consistente. También me encanta que Rolex haya brindado un apoyo tan fuerte al tenis masculino y femenino, y que aún hoy veamos los relojes en torneos como Wimbledon y Roland-Garros".
La edición de 2025 de Roland-Garros, que se disputará entre el domingo 25 de mayo y el domingo 8 de junio, será un punto culminante para ambas mujeres esta temporada. En particular, se conmemoran los 50 años desde que Evert y el también Testimonial Rolex Björn Borg defendieron con éxito sus primeros títulos individuales de Grand Slam en las canchas de polvo de ladrillo de París en 1975. Tras levantar el trofeo por segunda vez, Evert alcanzó el número 1 de la WTA en noviembre de 1975, puesto que ocupó durante 260 semanas. Solo el tiempo dirá si Świątek es capaz de dar un paso más allá y superar el récord de Evert en esta superficie de tanta exigencia física y recuperar el puesto número 1 del mundo. Con el fuerte respaldo de una de las grandes del tenis y un Rolex en su muñeca, no hay dudas de que regresará a París con una determinación aún mayor para dejar su huella en la historia del polvo de ladrillo.
Rolex celebra los logros humanos, reconociendo el viaje marcado por hitos y emociones que culmina en momentos decisivos, definidos por el camino recorrido y no tan solo un trofeo. Parte integral de esta filosofía es la larga relación de la empresa relojera suiza con el tenis, que se remonta a casi medio siglo atrás, cuando se asoció por primera vez con The Championships, Wimbledon en 1978. Desde entonces, Rolex se ha transformado en Reloj Oficial de los cuatro eventos de Grand Slam: el Open de Australia, Roland-Garros, Wimbledon y el US Open.
Numerosas leyendas del deporte han integrado la familia de Testimoniales Rolex a lo largo de las décadas, como Rod Laver, Björn Borg, Chris Evert y Roger Federer. El compromiso de Rolex con el tenis se extiende a la Asociación de Tenistas Profesionales (ATP) y la Asociación de Tenis Femenino (WTA), torneos de alto nivel como los eventos ATP Masters 1000 y WTA 1000, las Nitto ATP Finals y WTA Finals, y las principales competencias por equipos, como las finales de la Copa Davis y la Laver Cup. Durante estos torneos, los Testimoniales Rolex siguen superando los límites del rendimiento y el esfuerzo en las canchas. De los ganadores de títulos de Grand Slam Carlos Alcaraz, Coco Gauff, Jannik Sinner e Iga Świątek a jugadores destacados como Mirra Andreeva, Taylor Fritz, Ben Shelton, Stéfanos Tsitsipás y Qinwen Zheng, Rolex respalda la búsqueda de la excelencia en la cumbre del tenis actual.
