Dos jóvenes entrepreneurs crearon Blended, una plataforma de comunicación y gestión escolar. Con presencia en más de 350 colegios, proyectan facturar $ 30 millones.

Una gran parte de los emprendimientos tienen su génesis en descubrir una problemática. Esto es lo que le pasó a Nicolás Giménez cuando estaba terminando su carrera de Administración de Empresas en la Universidad de San Andrés, donde conoció a su socio Federico Hernández, que por aquel entonces estudiaba Economía. A Nicolás, la educación fue siempre un tema que le despertó interés y por eso había decidido basar su tesis en la problemática en América Latina. “Hubo un dato que fue el disparador: cuatro de cada diez chicos no terminan la secundaria y, entre los que terminan, el continente tiene una de las peores calidades educativas”, rememora.

A partir de la investigación que realizó para la tesis, empezó a profundizar en los números para entender la dimensión de la problemática. En América Latina hay 150 millones de chicos en edad escolar y el Banco Mundial estima que 50 millones no completarán su educación. También fue clave preguntarse por qué y cuáles son los factores que impulsan a tantos jóvenes a interrumpir su educación y qué determina que les vaya bien o mal. “Uno de los factores fue cuán involucrados están los padres en la educación, cuando históricamente se creía que era por nivel socioeconómico”, enfatiza el emprendedor. Así, descubrió que el 90% de las 700.000 escuelas de América Latina se comunicante un chat, pero no pueden generar contenidos.

Hoy, la start-up ya cuenta con un staff de 18 empleados. “Nuestro modelo se basa en el boca en boca y que los colegios y padres nos vayan recomendando por el vínculo que generamos con las escuelas”, confirman los jóvenes fundadores. Así, el año pasado, la compañía registró un crecimiento explosivo: ya a través del viejo cuaderno de comunica- dos y grupos de mails o Whatsapp.

En 2016, Nicolás y Federico terminaron de darle forma al proyecto y decidieron crear Blended, una plataforma de comunicación y gestión escolar en la nube que incluye una aplicación para celulares para que los padres pue- dan recibir información relevante de sus hijos. “Digitalizamos el cuaderno de comunicaciones y la gestión interna de los colegios, que están llenas de planillas. Tuvimos que entender los procesos y requisitos y reemplazamos el mix artesanal, el cuaderno de comunicados, las planillas en papel, el Excel y las cadenas de mails”, dice Giménez. Para dar los primeros pasos, la compañía recibió US$ 200.000 de Wayra, la aceleradora de Telefónica, y de algunos inversores ángeles, lo que les permitió armar un primer equipo de siete personas y una versión de la plataforma para empezar a generar ingresos. “Nos reunimos con autoridades de muchos colegios, docentes y padres para entender sus necesidades puntuales”, recuerdan.

Para las familias, Blended ofrece una aplicación móvil amigable e intuitiva en la cual los padres pueden recibir toda la información relevante acerca de sus hijos: calificaciones, inasistencias, llegadas tarde al colegio, fotos, videos y un calendario integrado de eventos, como exámenes o partidos de fútbol. Según la configuración que realice cada colegio, los padres pueden interactuar respondiendo las consultas del colegio mediante un chat, pero no pueden generar contenidos.

Hoy, la start-up ya cuenta con un staff de 18 empleados. “Nuestro modelo se basa en el boca en boca y que los colegios y padres nos vayan recomendando por el vínculo que generamos con las escuelas”, confirman los jóvenes fundadores. Así, el año pasado, la compañía registró un crecimiento explosivo: ya está presente en 370 instituciones y alcanza a 100.000 familias en el país. “Tuvimos la primera ola de crecimiento fuerte en 2018 y esperamos poder expandirnos”, destaca Giménez.

Blended fue elegida la mejor start-up entre más de 8.000 empresas de 64 países por Seedstars World.

El modelo de negocios se basa en el modelo SaaS (Software as a Service), a través del cual cobra un abono mensual a las instituciones educativas de acuerdo con la cantidad de alumnos. Además, ofrece dos planes: uno para aquellos que quieren solo la parte de comunicación (que tiene un valor de $ 15 por alumno) y otro para la parte de gestión (con un valor de $ 25 por alumno). “Queríamos que tuviera un target amplio. Apuntamos a escuelas de clase de media y no solo a colegios ABC1”, enfatizan.

A fines de 2018, emprendieron la búsqueda de un inversor para lograr la expansión regional y atrajeron el interés de Omidyar Network (el fondo de Pierre Omidyar, creador de eBay, y su esposa Pam) además del fondo de Roberto Souviron, el fundador del unicornio Despegar. Hoy están presentes en Argentina y en Uruguay y esperan abrir dos mercados en el segundo semestre: Perú y Colombia, ya que ambos tienen un sistema educativo similar al de Argentina. “La industria de EdTech está creciendo en todo el mundo. La empresa más grande, que hace algo similar a lo que hacemos nosotros, es de China y está valuada en US$ 1.700 millones”, destaca el emprendedor.

Este año, fueron reconocidos como la mejor start-up del mundo por la prestigiosa competencia Seedstars World, de la que participaron más de 8.000 empresas de 64 países. “Nunca ganó una empresa de la región. Nuestro objetivo era ir a cono- cer gente que nos pueda aportar valor”, se sincera Giménez.

Los fundadores esperan que Blended pueda alcanzar las 1.000 escuelas en diciembre y que cierre el 2019 con una facturación de $ 30 millones, lo que significaría cuadruplicar el crecimiento. Además, el otro foco es estar a la vanguardia de la innovación y generar información de valor agregado para los directores y autoridades de los colegios para que puedan tomar decisiones. “Por ejemplo, los alumnos en riesgo, los que tienen potencial de quedarse libres, de dejar la escuela, de mejorar el rendimiento. El objetivo es mejorar las métricas para mejorar la calidad informativa. Cuantos más datos e información tenés en el colegio, mejor es la calidad educativa para los chicos”.